jueves, 4 de septiembre de 2008

Hacer soja en Uruguay es más barato

Por la voracidad fiscal hacia el campo, conformada por una batería de impuestos donde se destacan las retenciones del 35 % a la soja, la carga impositiva total para producir soja en la Argentina es hoy 2,5 veces mayor que en Uruguay.
Así lo expresa un informe de la consultora Openagro, que revela de esta manera uno de los motivos que impulsaron la contundente avanzada de agricultores y pools de siembra argentinos en ese país desde 2004.
De hecho, según estimaciones privadas y oficiales uruguayas, los productores argentinos son responsables de más de la mitad de la superficie plantada con soja en el vecino país, que en la campaña pasada alcanzó las 447.000 hectáreas.
Según el trabajo de la consultora, en la Argentina la rentabilidad después de impuestos para un modelo de producción de 3000 kilos por hectárea, con el pago de un arrendamiento de 426,16 dólares por hectárea, en la actualidad es negativa en 106,88 dólares por hectárea.
En el caso de un rinde de 3500 kilos por hectárea, la rentabilidad también es negativa, pero en 4,81 dólares hectárea, y sólo con un rendimiento de 4000 kilos se torna positiva en 66,32 dólares por hectárea, según el informe. El trabajo consideró una carga impositiva compuesta por un 1 por ciento de Ingresos Brutos, 35 % de Ganancias, 0,50 % de sellos y 1,20 % del impuesto a los débitos y créditos bancarios.
En resumen, sólo entre retenciones, Ganancias, Ingresos Brutos y débitos y créditos, en la Argentina hay un 73 % de carga impositiva contra un 27 % en Uruguay.

(La Nación, 1-9-08)