miércoles, 14 de abril de 2010

EL CANJE, UN NUEVO Y MULTIMILLONARIO NEGOCIADO


La clave de esta nueva estafa al pueblo argentino, que premia a los fondos buitres y a la banca internacional, se encuentra en las comisiones a pagarse a los bancos, y en los “premios” ofertados a los grupos que compraron bonos a muy bajo precio. El negocio K es obtener mil millones de dólares para hacer campaña, a la vez que “cumplen” con sus patrones del “mercado”.

Festeja Wall Street, así como lo hacen la banca Barclays, el Deutsche y el Citibank, sumándose al jolgorio los “fondos buitres” –los mismos a los que apuntó defenestrándolos CFK hace muy poco- y los tenedores concentrados de los hasta hace muy poco “bonos basura”, hoy imposibles de conseguir en el mercado ya que nadie quiere venderlos expectantes ante la maxiganancia.
CFK, junto a Néstor y Boudou viabilizan por estas horas un negociado antipatriótico que terminará beneficiando especialmente a banqueros extranjeros y a los especuladores internacionales, tal como antes lo hicieran las duplas Menem-Cavallo y De La Rúa-Cavallo en perjuicio de la Patria, la Nación y el Pueblo Argentino.
Las infidencias del trío de “bancos asesores” –o de coimeros y explotadores consuetudinarios- provocaron durante los últimos tiempos múltiples inversiones especulativas en el mercado internacional de bonos, beneficiando a toda clase de delincuentes y usureros internacionales, quienes alertados de la proximidad y de las prebendas del “canje patriótico” de CFK, arrasaron con los bonos en default ampliando, consecuentemente, las comisiones a cobrar.
Cuando se realizó el primer canje de la deuda defaulteada –gestión Lavagna- las comisiones pagadas insumieron U$S 178 millones por una deuda de más de cien mil millones, mientras que ahora la propuesta realizada por el trío bancario les otorga una comisión de cerca de U$S 82 millones por un monto a canjear que no va a alcanzar los veinte mil millones, más que duplicando las comisiones abonadas apenas hace cinco años.
Los cálculos preeliminares –falta el detalle final de la oferta- indican que con este negociado los acreedores externos ganarán la friolera de U$S 1 mil millones, considerando una utilidad conservadora del 7%, pues si se llega a la más realista del 16% la cifra terminaría más que duplicándose. Los bonos en default hoy cotizan a U$S 48 por cada 100 impagos que entren al canje cuando apenas en Diciembre 2009 los mismos cotizaban de U$S 42 a 45, si se llega a abonar –como muchos analistas sostienen- U$S 57 la ganancia importa U$S 9 por cada 100 en default.
Solo CFK, Néstor y Amado Boudou pueden explicar por qué será tan generosa la oferta del Gobierno en el presente canje, aclarándose que la “propuesta de canje” no fue realizada por el Gobierno o por el Ministerio de Economía –como se hiciera en el canje original-, sino que fue “ofertada” por la banca Barclays y antes de que sucediera el despido de Redrado y el batifondo de las trabas a los DNU de las reservas, hoy medianamente solucionadas por el fallo de la Cámara Contencioso Administrativa, que desdiciendo a CFK benefició al Gobierno sin dejar de pertenecer al “partido judicial”.
Festejan los bancos –locales y extranjeros-, los fondos de inversión que compraron bonos a U$S 30 o aún menos y los fondos buitres, mientras pena y sufre la Nación y el pueblo que serán quienes en definitiva terminarán pagando este banquete del Gobierno, los bancos y los acreedores externos. Una ganancia del 70% en dólares, que además se lograría en muchísimos casos en tiempo récord –menos de seis meses-, es casi un despropósito si no incluyera un gigantesco y oscuro negociado.

Buenos Aires, 12 de Abril de 2010.
Arq. José Marcelino García Rozado.