lunes, 13 de agosto de 2018

JUBILARSE EN CÓRDOBA



 66% por encima de la fórmula de la Anses

Mejor los de acá. Un jubilado cordobés percibe con su haber el 73% del sueldo en actividad. Uno nacional, entre el 56% y 64%.

La Voz del Interior, 12 de Agosto

Por Laura González

Parte de la diferencia la explican los últimos cuatro años de salarios que toma la Caja frente a los 10 que promedia la Nación.
El cálculo para el haber inicial es el punto que Córdoba todavía no ha armonizado.
¿Puede la Caja de Jubilaciones de Córdoba convertirse otra vez en un problema fiscal para la administración de Juan Schiaretti?

En un escenario de ajuste fiscal monitoreado por el Fondo Monetario Internacional, ¿las cajas provinciales no transferidas pasarán a estar en el ojo de la tormenta? ¿Puede confiarse la Provincia cuando Nación debería enviar alrededor de 427 millones de pesos mensuales y manda 171 millones para cubrir el déficit que se comprometió a cubrir? ¿Qué pasa si la exigencia es achicar ese déficit, sobre todo a la luz de las condiciones ventajosas que todavía persisten entre los jubilados y los pensionados provinciales?

En 2017, la Caja de Jubilaciones acusó un rojo de 12.296 millones de pesos, de los cuales la Nación aportó 5.092 millones, el 41 por ciento. Para 2018, Córdoba deberá destinar como mínimo unos 9.500 millones de pesos de sus impuestos a subsidiar este déficit, además de cubrir la porción de la Nación hasta tanto se regularicen los atrasos.

Para la Provincia, la Nación no puede exigir reformas
¿Es justo, por ejemplo, que se posterguen las comprometidas rebajas a los Ingresos Brutos, impuesto que asfixia a la producción y frena el empleo, para sostener un sistema previsional con beneficios que no tendrá ninguno de los trabajadores privados que con sus impuestos sostienen al sistema provincial?

A diferencia de Epec, donde Unión por Córdoba en casi 20 años no había ensayado (hasta ahora) intentos de eficientizar la empresa, en la Caja de Jubilaciones hubo dos grandes reformas que acotaron los privilegios. Pero todavía persisten dos grandes beneficios.

Los beneficios

El primero es que los aumentos se les aplican a los jubilados en el mismo mes en el que cobran los activos. La Caja aplica un Índice de Salarios Sectoriales que copia para cada sector los aumentos obtenidos en esa rama en actividad.

En la Nación, esos aumentos son trimestrales desde 2018 (hasta 2017 eran cada seis meses) y son devengados, es decir, replican la inflación del semestre anterior, con lo que se va mucho más atrás respecto de la inflación. En Córdoba, los aumentos acordados son en función de la inflación esperada para el trimestre siguiente, más gatillo si se calculó mal.

El segundo privilegio se explica por la tasa de sustitución, es decir, con qué porcentaje del salario que tenía en actividad se retirará ese empleado cuando se jubile. En promedio, esa tasa es del 95 por ciento. Según el último informe de movilidad de la Caja de Jubilaciones, el salario promedio de los aportantes a la Caja en junio era de 34.510 pesos, en tanto que la jubilación media fue de 32.753 pesos.

Para llegar a esa tasa de sustitución se tienen en cuenta dos factores. Por un lado, el porcentaje de un salario determinado. Ese porcentaje, que la ley 8.024 establecía en un 82 por ciento móvil de la remuneración, fue de ambigua interpretación e imposible de pagar. Ramón Bautista Mestre lo frenó con el famoso decreto 1.777, que la Corte Suprema de Justicia volteó en julio de 2007.

El eje del problema fue qué remuneración tomar para calcular ese 82 por ciento móvil. Originalmente, la administración de Eduardo Angeloz la calculó sobre el salario bruto del agente; Mestre, en 1995, lo computó sobre el salario de bolsillo, y con la ley 10.333, de diciembre de 2015, Schiaretti dispuso un híbrido: se calcularía el 82 por ciento sobre un neto imaginario: descuenta los aportes que rigen en la Anses (del 11 por ciento) en lugar de los que rigen en la Provincia (por entonces, del 18 por ciento). Así, el agente pasaría a cobrar el 72,95 por ciento del salario bruto. Mejor que con Mestre, aunque peor que con Angeloz.

¿Y qué salario se toma para calcular ese porcentaje? Hasta 2008, regía un descalabro: era el mejor de la vida activa del trabajador, aun cuando eso hubiese sido hace 25 años y en otra provincia. En 2008, se dispuso tomar los últimos cuatro años activos del trabajador, calculados a valor presente, es decir, actualizados en función del parámetro que rige en la Provincia para los activos, es decir, el Índice de Precios al Consumidor provincial.

Pero en la Nación el régimen es diferente. En la Anses, se toman los 120 últimos salarios en actividad del trabajador que se retira, actualizados por el índice de movilidad hasta 2017 y por Ripte desde entonces. Con los salarios actualizados, obtiene el 1,5 por ciento y lo multiplica por la cantidad de años trabajados, que pueden ser 30 o más. A esa cifra se le suma la Prestación Básica Universal (PBU), un monto fijo que actualmente está en 3.825 pesos. En general, un trabajador con 30 años se retira con el 56 por ciento de su sueldo; y si trabajó 35 años, llegará al 64 por ciento. En ambos casos, está por debajo del 73 por ciento que paga Córdoba.

Este modo de calcular las jubilaciones, tanto en el porcentaje como por el salario que se toma, explican las diferencias del haber inicial y, por ende, del gasto previsional que seguirá todos los años.

Para comparar

Por ejemplo, un trabajador de Epec (categoría 14, con 35 años), que en septiembre pasado cobraba 132.314 pesos se jubiló en la Caja con un haber de 96.589 pesos. Si rigieran las mismas cláusulas que en la Nación, se hubiese retirado con 41.905 pesos, un 56,6 por ciento menos y un tercio de lo que percibía en actividad.

Un bancario jefe de departamento con 30 años de servicio en Córdoba se retiró con 56.389 pesos, mientras que con el parámetro nacional cobraría 38.120, es decir, 32 por ciento menos.

Un empleado de la ciudad de Córdoba, jefe de división con 33 años de antigüedad que ganaba en mano 92.505 pesos, se fue con 67.529 pesos. Pero si la Caja hubiese armonizado, se habría retirado con 41.093 pesos, esto es, 39,1 por ciento menos.

La brecha también persiste en casos de menores ingresos, como un empleado del escalafón general (tramo ejecución, 30 años y salario de 20.990 pesos): en Córdoba tendrá 15.323 pesos y 11.036 pesos en la Nación, 28 por ciento menos.

Sólo hay un rubro en el que la Nación paga mejor a sus jubilados: los docentes. Un profesor con 25 años de antigüedad, que cobraba 26.365, se fue con 19.246 pesos, mientras que con el régimen nacional hubiese cobrado 21.490, ya que garantiza el 82 por ciento.

En promedio, los cinco casos testigos se jubilaron con un 66 por ciento más de lo que se jubilarían con las condiciones de la Nación.