Gonzalo Guillén
El Nuevo Herald
Venezuela suministra un flujo continuo de municiones para los cerca de 15.000 fusiles AK que poseen las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y el Ejército de Liberación Nacional (ELN), revelaron fuentes colombianas de inteligencia militar.
La denuncia se basa en los decomisos de municiones a los grupos guerrilleros en las regiones del nororiente del país, fronterizas con Venezuela, y en el testimonio de desertores de ese grupo guerrillero.
El suministro de munición venezolana ha sido revelado por más de 10 miembros de las FARC de un grupo de 95 fugado de esa organización en lo que va del año, aseguraron las mismas fuentes. La única fábrica en Sudamérica que produce munición calibre 7,62 x 39 mm para el AK es la estatal Compañia Anónima Venezolana de Industrias Militares (CAVIM).
Los AK de las FARC y el ELN usan la misma munición de los 100.000 AK-103 y AK-104 que compró Venezuela.
Un comunicado del Departamento de Defensa de Estados Unidos, advirtió entonces: La compra ha creado interrogantes sobre el propósito final (de las armas). Nuestra preocupación con esta compra de armas aumenta dada la tolerancia de Venezuela ante grupos como las FARC, el ELN y otros.
Hasta que Venezuela comenzó a surtir de munición a las FARC y el ELN, estas dos guerrillas y los paramilitares, que tienen aproximadamente otros 5.000 AK, debían conseguir los cartuchos en el mercado negro, a un precio que podía llegar a 5 dólares. La escasez y la carestía obligaron a estas organizaciones a restringir al máximo posible el uso de su parque. Según las fuentes de inteligencia consultadas, las FARC compran la munición venezolana a precios que no superan 50 centavos por unidad y hay indicios de que también reciben suministros gratis.
En 2005, por orden del Presidente Hugo Chávez, el Ministerio de Defensa de Venezuela compró 100.000 fusiles automáticos AK-103 y AK-104 y municiones -en cantidades no reveladas- a la firma rusa Rosoborenexport, que ya ha recibido en su totalidad. Próximamente, además de la fábrica de municiones, entrará en funcionamiento en Venezuela una planta de ensamblaje de fusiles AK-103 con capacidad para producir cerca de 25.000 unidades al año.
(Fuente: Ámbito Financiero, 22-1-08)
El Nuevo Herald
Venezuela suministra un flujo continuo de municiones para los cerca de 15.000 fusiles AK que poseen las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y el Ejército de Liberación Nacional (ELN), revelaron fuentes colombianas de inteligencia militar.
La denuncia se basa en los decomisos de municiones a los grupos guerrilleros en las regiones del nororiente del país, fronterizas con Venezuela, y en el testimonio de desertores de ese grupo guerrillero.
El suministro de munición venezolana ha sido revelado por más de 10 miembros de las FARC de un grupo de 95 fugado de esa organización en lo que va del año, aseguraron las mismas fuentes. La única fábrica en Sudamérica que produce munición calibre 7,62 x 39 mm para el AK es la estatal Compañia Anónima Venezolana de Industrias Militares (CAVIM).
Los AK de las FARC y el ELN usan la misma munición de los 100.000 AK-103 y AK-104 que compró Venezuela.
Un comunicado del Departamento de Defensa de Estados Unidos, advirtió entonces: La compra ha creado interrogantes sobre el propósito final (de las armas). Nuestra preocupación con esta compra de armas aumenta dada la tolerancia de Venezuela ante grupos como las FARC, el ELN y otros.
Hasta que Venezuela comenzó a surtir de munición a las FARC y el ELN, estas dos guerrillas y los paramilitares, que tienen aproximadamente otros 5.000 AK, debían conseguir los cartuchos en el mercado negro, a un precio que podía llegar a 5 dólares. La escasez y la carestía obligaron a estas organizaciones a restringir al máximo posible el uso de su parque. Según las fuentes de inteligencia consultadas, las FARC compran la munición venezolana a precios que no superan 50 centavos por unidad y hay indicios de que también reciben suministros gratis.
En 2005, por orden del Presidente Hugo Chávez, el Ministerio de Defensa de Venezuela compró 100.000 fusiles automáticos AK-103 y AK-104 y municiones -en cantidades no reveladas- a la firma rusa Rosoborenexport, que ya ha recibido en su totalidad. Próximamente, además de la fábrica de municiones, entrará en funcionamiento en Venezuela una planta de ensamblaje de fusiles AK-103 con capacidad para producir cerca de 25.000 unidades al año.
(Fuente: Ámbito Financiero, 22-1-08)