Claudia Peiró
En medio de la polémica previa a la Cumbre contra el Cambio Climático de Copenhague pasó inadvertido un documento elaborado por el Fondo de Naciones Unidas para la Población (UNPFA), cuyo mensaje es que urge ayudar a las mujeres a tener menos hijos para limitar las emisiones de carbono. Según esta agencia, la natalidad galopante de los países en desarrollo es uno de los principales motores del calentamiento global.
Mas allá del cinismo de culpar a los pobres por el efecto invernadero, el planteo de la UNPFA ha sido desmentido por la realidad, una y otra vez.
En 1994, el pronóstico demográfico era que en 2025 habría 11.000 millones de seres humanos en el planeta. Sobre esa base, la ONU elaboró un programa de acción basado en la salud reproductiva y la planificación familiar. Hoy, quince años después, los pronósticos fueron revisados a la baja: la nueva predicción es de 9.000 millones, pero no para 2025 sino para 2050.
La bomba demográfica tan anunciada desde los años 60 no estalló sino que se desactivó.
Extractado de Ámbito Financiero, 18-12-09
Algo más sobre el tema de la contaminación
Según la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), una vaca emite por día lo mismo que un auto que recorre 60 kilómetros.
En Córdoba hay 5,6 millones de cabezas de bovino que liberan 26,9 millones de toneladas de dióxido de carbono (CO2) al año. En realidad, cada vaca emite anualmente 0,2 toneladas de metano, producto de su proceso digestivo. Pero este gas es 23 veces más nocivo para el clima que el CO2. Es decir, cada animal emitiría 4,8 toneladas de CO2 anuales.
Esta cifra equivale a lo que libera anualmente una camioneta 4x4 de las más poderosas.
La Voz del Interior, 18-12-09