Carlos vergara
Con profunda molestia reaccionó el oficialismo chileno ante la sorpresiva aparición del ex guerrillero Galvarino Apablaza en el acto de la Corriente de la Militancia Política y Social, junto a dirigentes kirchneristas en la Plaza del Congreso.
Apablaza, acusado en Chile del asesinato del ex senador de la derechista Unión Demócrata Independiente (UDI), Jaime Guzmán, y del secuestro del directivo del diario El Mercurio Cristián Edwards, recibió refugio político por parte del gobierno de Cristina Kirchner tras un largo proceso.
"Esta es la mejor demostración de que no hubo ningún tipo de asilo humanitario en el caso del señor Apablaza. Por el contrario, su participación en un acto de política partidista deja en claro que la decisión del gobierno argentino tuvo mucho de político y poco de humanitario", dijo a LA NACION el presidente de la UDI, el senador Juan Antonio Coloma.
"Es doloroso e inexplicable que la forma de retribuir sea con su asistencia a actos de este tipo. Acnur algo debiera decir ", agregó Coloma, que ratificó que su partido está a la espera de la respuesta a la solicitud hecha por el Estado chileno a la Comisión Nacional para los Refugiados (Conare) y que estudia alternativas de apelación ante organismos internacionales.
Al respecto, se han seguido haciendo gestiones en Buenos Aires, tales como el viaje de la diputada UDI Mónica Zalaquett, que se reunió a fines de octubre con el diputado de Pro Julián Martín Obiglio. Asimismo, se han producido acercamientos con la Unión de Partidos Latinoamericanos (UPLA), actualmente presidida por el senador chileno Jovino Novoa, también militante de UDI.
La oposición también se mostró sorprendida por la aparición de Apablaza. "Es muy poco prudente de su parte dejarse ver en estos actos en consideración de que su persona ha sido causal de fricción entre los gobiernos de Chile y la Argentina. Le recomendaría mantener un bajo perfil y no participar nunca más en reuniones de este tipo", explicó el diputado concertacionista y miembro de la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara baja Jorge Tarud.
En el Congreso trascendió también la molestia de diversos parlamentarios oficialistas por la justificación de la presencia de Apablaza en el acto que hizo el oficialismo argentino, principalmente por intermedio del diputado Agustín Rossi.
El gobierno chileno, actualmente inserto en un conflicto por la réplica peruana ante la Corte Internacional de La Haya por el diferendo marítimo que afecta a ambos países, optó por no referirse al evento. El presidente Sebastián Piñera está de gira por Asia. Según fuentes de gobierno, podría referirse desde allí a la situación de Apablaza.
La Nación, 11-11-10