La Nación, 4 de
Septiembre de 2015
La ONG ecologista Greenpeace criticó al Gobierno por
invertir en el combustible fósil que más contribuye al calentamiento global;
afirman que es la peor opción energética.
Tras la inauguración en el día de hoy de la usina de
carbón de 240 MW en Río Turbio, Santa Cruz, por parte de la presidenta Cristina
Fernández de Kirchner,Greenpeace reiteró sus críticas al Gobierno nacional por
invertir en carbón, el combustible fósil que más contribuye al calentamiento
global.
"La matriz energética de Argentina está
conformada en un 90% por combustibles fósiles y, en lugar de cambiar y avanzar
hacia las energías renovables, el Gobierno Nacional sigue profundizando esa
dependencia. El carbón es la peor opción energética, la más contaminante, la
más costosa y la que más contribuye a acentuar el cambio climático. La usina de
carbón de Río Turbio es una decisión desacertada en lo energético, lo
económico, y lo ambiental. Con ese mismo dinero se podría producir el doble de
energía eólica, energía renovable, limpia y segura", señaló Martín Prieto,
Director Ejecutivo de Greenpeace Argentina.
El carbón es el combustible fósil que más contribuye
al calentamiento global y que genera mayores problemas de contaminación en su
etapa de combustión. Greenpeace se opone a la usina de carbón en Río Turbio
desde antes de iniciada su construcción, y realizó varias protestas.
"Si queremos mantener el cambio climático dentro
de un rango de temperaturas globales que evite una catástrofe, el mundo debe
alcanzar un acuerdo justo, ambicioso y vinculante en la próxima Cumbre
Climática que se realizará en París, esto implica abandonar el carbón de manera
urgente y reemplazarlo por energías renovables", indicó el ambientalista.