sábado, 6 de febrero de 2016

LA ALARMA DEL ZIKA ES UN NUEVO FRAUDE DE LA OMS


Eduardo Ferreyra
Presidente de FAEC

Mitos y Fraudes, Febrero 2, 2016

La gente debería de tener presente en todo momento de sus vidas la frase que el gran periodista norteamericano Hubert L. Mencken dijo en las décadas de los años 20 y 30 del siglo pasado:
"Todo el propósito en la práctica de la política es mantener al populacho alarmado, y por ello clamoroso de ser conducido a la seguridad, amenazándolo con una interminable serie de sandeces, todas ellas imaginarias."

Y a ello le agregó lo que ya hemos podido comprobar demasiadas veces:
La urgencia de salvar a la humanidad es casi siempre un falso frente para el ansia de someterla.
Comencemos suponiendo algo que la experiencia con el periodismo nos ha enseñado -o tendría que haberlo hecho: Supongamos que el número real de los casos de microcefalia, o bebés nacidos con un cerebro más pequeño, son mucho menos que lo informado? Entonces todos los esfuerzos para explicar alguna situación extraordinaria, inusual, y súbita están errados porque están basados en una mentira. No será la primera vez que los gobiernos, la OMS y los medios lo hayan hecho.

Tenemos que mirar hacia atrás y ver cuántas veces ha sucedido eso, para aprender y evitar que vuelva a suceder. Tenemos que hacerlo para saber qué está sucediendo en Brasil, y por qué se trata de una enorme mentira. Hemos visto a las autoridades sanitarias mentir descaradamente una gran cantidad de veces. Algunas veces fabrica una cantidad de estadísticas a partir de muy escasa información, como aconteció con la Gripe del Cerdo, por ejemplo. O la gripe aviar o “del pollo”. Hacia abril de 2009 el Centro de Control de enfermedades (CDC) de los EEUU, estimó que había en ese país unos 22 millones de casos. Eso sucedió después de que Sharyl Attkisson, entonces una reportera estrella de la investigación periodística, descubrió que el CDC había dejado de contar los casos de la gripe del cerdo. ¿Por qué se detuvieron? Porque la descomunal cantidad de muestras de sangre que pacientes de la gripe de cerdo que llegaban al laboratorio daban resultado negativo para la gripe del cerdo -o para cualquier otra gripe. Entonces el CDC duplicó la apuesta y decidió decir una gigantesca mentira. Ese es un viejo truco de propaganda: decir una mentira gigantesca y la gente la aplaudirá. La técnica enseñada por Josef Goebbles: “Mientras más grande es la mentira, más fácil la creerá la gente.”

¿Qué pasa con el Zika?
Se supone que la microcefalia, los bebés nacidos con cabezas más pequeñas y daño cerebral son el resultado del virus del Zika, que durante unos 60 años se conoce que ha causado nada más que, como mucho, una muy leve enfermedad. Pero se puede leer en los diarios y noticieros de la TV que “... fueron confirmados 270 de los 4180 casos sospechados de macrocefalia.”. Eso se llama “una pista”, en caso de que tenga dudas. De los previamente anunciados 4180 casos de microcefalia, sólo fueron confirmados nada más que 270. ¿Cuántos de ellos son de origen natural, sin relación alguna con el Zika?
Por supuesto, eso no detendrá a la prensa de seguir aumentando la alarma y al miedo por “la temida” enferme-dad, y los soldados brasileños irán puerta por puerta entregando sprays repelentes de mosquitos, y las compa-ñías farmacéuticas seguirán su frenética carrera en dirección a descubrir y producir una vacuna contra el Zika... Porque la maquinaria está en marcha, y no importan los hechos científicos.

Una noticia del 27 de enero en el US News decía:
“Rio de Janeiro - Nuevas cifras publicadas por el Ministerio de Salud de Brasil como parte de un sondeo en el virus del Zika, ha revelado menos casos de un raro defecto de nacimientos de lo que se temía previamente. Los investigadores estuvieron mirando a 4180 casos de microcefalia denunciados desde octubre. El miércoles, los funcionarios dijeron que habían hecho un análisis más intenso de más de 700 de esos casos, confirmando 270 casos y descartando otros 462.”
¿Qué hay acerca de los otros 3448 casos sospechados? Ni una palabra. Quiere decir que hasta ahora hay nada más que 270 casos confirmados de microcefalia. Y de esos 270 casos cuántos son debidos al Zika y cuántos son de origen natural? Porque nos encontramos que todo el maldito asunto de esta alarma tonta explota por los 4180 casos reportados como sospechosos. 

Sin esas falsas cifras de casos atribuidos al zika, nunca se hubiese dado inicio la alarma y la histeria. Pero la noticia también decía:
“Pero, de acuerdo con algunos expertos, lo que esto significa es difícil de decir. No responde si el virus tropical Zika está causando que los bebés tengan cabezas inusualmente pequeñas. Tampoco nos dice cuán grande es el problema.”
Exactamente! No está para nada confirmado que el virus del Zika esté completamente confirmado. Ni siquiera saben cuántos casos de microcefalia existen. Seguía diciendo la noticia:
“Pero la OMS y otros expertos han destacado que la relación entre el Zika y el defecto (micorcefalia) permanece siendo circunstancial u todavía no ha sido probado científicamente. Y las nuevas cifras fueron un recordatorio de lo muy poco que se sabe de la enfermada y sus efectos.”

Maravilloso. Todavía no se ha demostrado de manera científica. Y qué poco se sabe del Zika. Pero en base a la ignorancia de los expertos se ha lanzado una alerta mundial de emergencia de salud, alertando a las mujeres embarazadas a no viajar a Brasil y a todas las mujeres del mundo a no quedar embarazadas. A no procrear; a no tener hijos. Esto se llama “despoblación por Parte de Prensa”. El Club de Roma tiene que estar frotándose la manos y saltando alegría. Por fin una medida que podría reducir la población del mundo. Habían puesto tantas esperanzas de que el virus del SIDA pudiese disminuir a la población, pero resultó que nunca se probó ni siquiera su existencia! Pero el Zika, un virus inofensivo si los hay, hizo que los gobiernos y las agencia de salud pública emitiesen publicaciones alarmistas y luego se volvieron ciegos. Las cosas como siempre.

Pero lo muy revelador viene después: La noticia añade luego:
“Los funcionarios brasileños dijeron que los bebés con el defecto [micorcefalia] y sus madres están siendo analizadas para ver si fueron infectadas con virus. SEIS de los 270 casos confirmados se descubrió que tenían al virus del Zika.”
Esto revela la desmesura de la alarma y demuestra que se trata de un fraude de enorme extensión: De los sospechados 4180 casos de microcefalia que resultaron ser 270 confirmados, sólo SEIS tenían al virus del zika. ¿Nos están tomando el pelo? 
Y los gobiernos de todo el mundo están clamando que el Zika provoca microcefalia y daños cerebral? ?Y se supone que tenemos que creer tamaña estupidez?

La Ciencia dice
En caso de que no haya quedado claro, se lo diré claramente: “No se puede afirmar que un virus causa una enfermedad si el virus NO ESTA AHÍ!
“Bien, señor Pérez, usted tiene la gripe. La gripe es causada por un vrus. Esa es la única cuasa de la gripe. Usted no tiene al virus, pero tiene la gripe. ¿Okay? Vaya y tome dos cursos en lógica y llámeme por la mañana si cree que le estoy mintiendo.”
Uno ha aprendido esta lección en “fraudología” una y otra vez. Antes de decir que un virus está causando una enfermedad, primero se tiene que hallar cuántos casos de le enfermedad existen y han sido comprobados. Luego, para esos casos hay que hallar si el virus en cuestión esta presente. Porque si el virus no está, no haya nada más que seguir hablando.

Es necesario que la gente comience a darse cuenta del fraude. Si los científicos honestos comienzan a quejarse de estar obligados por sus jefes a mentir para sostener a la propaganda, la OMS y el CDC tendrán que mudarse a Brasil y decirle a los científicos brasileños que comprueben a los restantes 3448 casos de nadie-sabe-qué y que digan que la mayoría de ellos son macrocefalias causadas por el virus del Zika. Ese es el comienzo de la presión que tendrán que hacer para salvar su reputación.
Porque la Maquinaria de Salud y Farmafia ya están en movimiento, y las autoridades de la salud no pueden retractarse ni negar lo que ya han dicho. No pueden decir: “Que terrible, nos equivocamos, hemos construido una paella a partir de una grano de arroz. Olvídense, el Zika no es problema. Y en realidad hay muchísimos menos casos de microcefalia de los que habíamos creído.” No pueden hacerlo y convertirse en el niño que gritó “¡viene el lobo!”

El Zika es un fraude, un hoax. La OMS, el CDC y los gobiernos están apurados para asentar y hacer creíble su historia. Seguirán promoviendo al fraude y los fabricantes de vacunas seguirán trabajando para obtener una vacuna que la OMS hará de aplicación obligatoria a más de la mitad de la población mundial. Un negocio brillante. Mucho más brillante que la alarma del SIDA y la venta de anti-retrovirales y kits de tests Eliza y Western Blot que no sirven para saber si los anticuerpos son del HIV, o de la malaria, una gripe común, o una bronquitis. Y todo basado en nada real.

Eduardo Ferreya

Presidente de FAEC