elmanifiesto.com, 29 de septiembre de 2017
Hasta aquí hemos llegado.
No me insultéis más ni a mí ni a mi tierra. No
insultéis a mis abuelos, no insultéis a mis ancestros. No insultéis a
Cervantes, a Delibes, a Teresa de Ávila, al iusnaturalismo del que nacen los
derechos humanos, a Juan de Padilla, a Juan de Austria… No insultéis más a una
tierra que con su concepto del hombre cambió para siempre el destino de la
humanidad. ¿O qué cojones os creíais que somos? ¿Quien os ha utilizado para
pensaros mejores que nosotros? ¿Exactamente por qué motivo nos odiáis? ¿En qué
sois diferentes? ¿Qué pensaríais de vosotros mismos si en toda América se
hablara catalán? ¿Qué pensaríais si vuestras leyes supusieran el germen de las
libertades de todo el mundo? ¿Exactamente en qué os creeis mejores que
Castilla?
Os lo diré. Vosotros, los de las algaradas en las
calles de Cataluña, representáis lo más oscuro, lo retrógrado y lo patético
frente a una historia de grandeza, heroísmo, democracia y libertad que
representa el país del que sois parte: España. Pretendéis acabar con el
progreso, con la libertad y con la luz para arrojaros de modo suicida hacia el
pasado, hacia el salvajismo. […] Sois una panda de niñatos incultos y paletos
que pretendéis hacer una revolución con iPhones mientras en Castilla mis
paisanos se parten el lomo en tierras llena de adobe, polvo y pobreza para que
vosotros podáis insultarnos con un porro en la mano.
Sois un rebaño, siento lástima y cuando despertéis de
este sueño, de esta borrachera de vaso de plástico y piercing de hoz y martillo
vais a pasar una larga temporada abochornados por la vergüenza, el ridículo y
el espanto que estáis sembrando ante la mirada atónita de vuestros hijos, a los
que estáis llenando de odio. Despertad, aunque solo sea por ellos.
Odiáis a España porque odiáis a Castilla, y la odiáis
porque no os la merecéis. Estáis insultando a una tierra que ha derramado
sangre para que hoy vosotros podáis ser libres. Estáis insultado esfuerzos que
jamás comprenderíais. Si solamente alguien os hubiera contado los sacrificios
históricos de Castilla, la generosidad de una tierra que junto a otras se
diluye para crear España, para crear algo superior, una unidad histórica, un
destino, una de las naciones más grandes de la historia, para dar al resto de
reinos de la península las leyes y los frutos de su grandeza…
Si supierais lo que supuso para esta tierra hacer una
reconquista prácticamente solos, si supierais lo que supuso atravesar un océano
hacia el fin del mundo y llevar ley y dignidad a todo un continente, si
supierais lo que los jesuitas y otras órdenes han hecho para dar esperanza en
los cinco continentes, si supierais el estado de pobreza extrema de nuestros
pueblos, si supierais que aquí solo dejaron adobe mientras llenaron Austria de
mármol…Si supierais que nos estamos muriendo mientras vosotros, los pijos,
queréis abandonar a su suerte a nuestros mayores…
Porque eso es lo que queréis. Cortar la solidaridad
entre hermanos. Pero no vais a conseguirlo jamás. Vais a perder. No, no podéis
votar. Por supuesto que no se puede votar, por ejemplo, si matamos o no a los
niños pelirrojos, si apartamos a los judíos, si flagelamos a las adúlteras. No
podemos decidir ciertas cosas. La democracia no es votar, paletos. La
democracia es entre otras cosas, garantizar que los bárbaros no podáis votar
acabar con la igualdad o con la libertad. Y eso es lo que va a seguir pasando,
que España va a defenderos de vosotros mismos, de los que os tratan como
rebaño. Por supuesto que vais a perder. Espero que podamos ayudaros a
garantizar la libertad y el progreso llenando las cárceles de fascistas y
criminales. Si por mi fuera, iba a pasar mucho tiempo hasta que os perdonemos.
Pero lo acabaremos haciendo. Como siempre.