QUÉ SE ESCONDE DETRÁS DEL FALLO DE LA CÁMARA PORTEÑA
Por Christian Sanz
Una vergüenza, no hay otra manera de definirlo. La Cámara Federal porteña emitió tres fallos en los que despenaliza la tenencia de drogas para consumo personal, mientras se espera que la Corte Suprema haga lo suyo para febrero próximo.
Con las firmas de los jueces Eduardo Freiler, Jorge Ballestero y Eduardo Farah, el tribunal de alzada declaró, en tres nuevos casos, la inconstitucionalidad parcial de un artículo de la ley 23.737 de estupefacientes, que castiga la tenencia simple de drogas para consumo personal.
Para los jueces, el artículo 14 de la ley constituye "una irrazonable restricción de la libertad personal y menoscabar el libre acceso del derecho a la salud".
Particularmente, el juez Ballestero en su voto sostuvo que el segundo párrafo de ese artículo estipula una "irreconciliable pugna con el artículo 19 de la Ley Fundamental", que sostiene que "las acciones privadas de los hombres que de ningún modo ofendan al orden y a la moral pública, ni perjudiquen a un tercero, están reservadas a Dios y exentas de la autoridad de los magistrados".
Lo que parece desconocer Ballestero es que, en este tipo de casos, donde hay drogas de por medio, sí se perjudica a terceros, debido a que los estupefacientes alteran la conducta humana. Esto se ha demostrado oportuna y científicamente.
En realidad, el juez sabe esto, al igual que sus colegas, pero la instrucción para que se redactara ese fallo ha llegado desde la mismísima Casa de Gobierno y debió ser cumplida sin objeción alguna.
Tres tristes tigres
Como ha detallado este medio reiteradamente, el intento de despenalizar la tenencia de drogas, está enmarcado en una serie de acuerdos que el kirchnerismo ha refrendado oportunamente con cárteles de narcotráfico mexicanos y colombianos a cambio de una interesante suma de dinero, parte del cual se ha utilizado para las campañas políticas del Frente para la Victoria (1).
A cambio, se han pactado una serie de medidas para beneficio de los traficantes de estupefacientes que pusieron el efectivo: el ingreso irrestricto de narcotraficantes colombianos y mexicanos sin control de la Dirección Nacional de Migraciones, el desmembramiento del Sistema Informático María de control aduanero, la falta de control de los precursores químicos para elaborar drogas sintéticas -ley frenada por el inefable Aníbal Fernández-, la descoordinación de las fuerzas de seguridad, la no radarización del territorio nacional y la despenalización de la tenencia de drogas. Todo esto, es dable mencionarlo, comenzó a ser advertido a partir del año 2004 por Tribuna de periodistas, mucho antes de que explotara públicamente de la manera en que lo hizo.
Volviendo a los fallos despenalizadores, no es casual que haya sido la Cámara Federal porteña la que hizo el trabajo sucio: los tres integrantes son más que permeables a las instrucciones del kirchnerismo.
El juez Eduardo Freiler, por caso, era un insípido fiscal que fue ascendido a camarista en octubre de 2004 -junto a otros cuatro jueces de primera instancia-, gracias a la intervención del mismísimo Néstor Kirchner. Su esposa es jueza en lo Civil, y su suegra, Esther Pereyra Arandía, fue una histórica puntera del PJ bonaerense, secretaria de la Cámara de Diputados en tiempos de Alberto Pierri.
Por su parte, Eduardo Farah, es un personaje harto denunciado por este medio, por su connivencia con el narcotráfico marplatense (2). Un botón de muestra ha sido la pésima instrucción que hizo en la causa "pescado blanco", la cual permitió que el expediente quedara en la nada. El premio por la labor cumplida en la ciudad balnearia, ha sido su asunción a camarista en la influyente Cámara Federal porteña.
El caso de Jorge Ballestero es más insólito aún: de juez Federal de primera instancia durante el menemismo, supo reciclarse para acomodarse como camarista en el kirchnerismo. La presión oficialista para que llegue a ocupar un cargo en la Cámara fue decisiva: si no se le sumaban las 78 unidades que tiene por antecedentes como juez, no podría haberlo logrado, ya que sólo obtuvo 40 puntos sobre los 100 que plantea el examen pertinente. Así y todo, Ballesteros quedó en el noveno lugar.
Lo que aún no ha explicado debidamente es cómo llegó a tener el nivel de vida que ostenta, ya que hace poco más de 10 años vivía en una humilde vivienda en Caballito y manejaba un viejo automóvil. Posiblemente, su riqueza patrimonial actual tenga que ver con el sobreseimiento dado oportunamente a corruptos funcionarios del menemismo, como Miguel Angel Vicco en la causa de la -mala- leche (3).
Como puede verse, los responsables del fallo que despenaliza la tenencia de drogas no son magistrados imparciales, sino jueces acomodados por el propio gobierno. Uno de ellos está directamente rozado por escándalos relacionados al narcotráfico en Mar del Plata, lo cual, en vista del fallo, es toda una paradoja en sí misma.
Concluyendo
Persiste hasta el día de hoy una insólita confusión respecto al tema de la despenalización de drogas: muchos creen que lo que quiere liberarse es el consumo, algo que ya está despenalizado hace dos décadas. En realidad, lo que quiere legalizarse, es la tenencia de los narcóticos; es decir, la posibilidad para transportar drogas de un lugar a otro. Esto daría libertad total al dealer y, por carácter transitivo, al narcotraficante.
Como se ha dicho, es lo que ha pactado el kirchnerismo e intentará cumplirlo a como sea.
Finalmente, hay que destacar que la despenalización va en sentido contrario a lo hecho por otros países del mundo. Incluso aquellos que habían despenalizado en su momento el uso de narcóticos, están revirtiendo su postura debido al fracaso de la medida.
Lo que intenta el gobierno es de una locura irracional, desaconsejado por todo especialista reconocido en el tema.
Por eso, por la salud social de la Argentina, hay que detener el intento de ingreso de carteles de droga al país. Pero, más importante que ello, es hacerlo por el futuro de nuestros hijos y nietos.
Christian Sanz
(1) Ver denuncia judicial por blanqueo de dinero:
http://www.periodicotribuna.com.ar/Articulo.asp?Articulo=4409
(2) Ver http://www.periodicotribuna.com.ar/articulo.asp?articulo=1721
(3) Ballestero vivía en Hidalgo al 300, en un departamento de setenta metros que era bastante más chico que su actual cochera de 92,6 metros cuadrados.
Buenos Aires - Argentina
info@PeriodicoTribuna.com.ar
Una vergüenza, no hay otra manera de definirlo. La Cámara Federal porteña emitió tres fallos en los que despenaliza la tenencia de drogas para consumo personal, mientras se espera que la Corte Suprema haga lo suyo para febrero próximo.
Con las firmas de los jueces Eduardo Freiler, Jorge Ballestero y Eduardo Farah, el tribunal de alzada declaró, en tres nuevos casos, la inconstitucionalidad parcial de un artículo de la ley 23.737 de estupefacientes, que castiga la tenencia simple de drogas para consumo personal.
Para los jueces, el artículo 14 de la ley constituye "una irrazonable restricción de la libertad personal y menoscabar el libre acceso del derecho a la salud".
Particularmente, el juez Ballestero en su voto sostuvo que el segundo párrafo de ese artículo estipula una "irreconciliable pugna con el artículo 19 de la Ley Fundamental", que sostiene que "las acciones privadas de los hombres que de ningún modo ofendan al orden y a la moral pública, ni perjudiquen a un tercero, están reservadas a Dios y exentas de la autoridad de los magistrados".
Lo que parece desconocer Ballestero es que, en este tipo de casos, donde hay drogas de por medio, sí se perjudica a terceros, debido a que los estupefacientes alteran la conducta humana. Esto se ha demostrado oportuna y científicamente.
En realidad, el juez sabe esto, al igual que sus colegas, pero la instrucción para que se redactara ese fallo ha llegado desde la mismísima Casa de Gobierno y debió ser cumplida sin objeción alguna.
Tres tristes tigres
Como ha detallado este medio reiteradamente, el intento de despenalizar la tenencia de drogas, está enmarcado en una serie de acuerdos que el kirchnerismo ha refrendado oportunamente con cárteles de narcotráfico mexicanos y colombianos a cambio de una interesante suma de dinero, parte del cual se ha utilizado para las campañas políticas del Frente para la Victoria (1).
A cambio, se han pactado una serie de medidas para beneficio de los traficantes de estupefacientes que pusieron el efectivo: el ingreso irrestricto de narcotraficantes colombianos y mexicanos sin control de la Dirección Nacional de Migraciones, el desmembramiento del Sistema Informático María de control aduanero, la falta de control de los precursores químicos para elaborar drogas sintéticas -ley frenada por el inefable Aníbal Fernández-, la descoordinación de las fuerzas de seguridad, la no radarización del territorio nacional y la despenalización de la tenencia de drogas. Todo esto, es dable mencionarlo, comenzó a ser advertido a partir del año 2004 por Tribuna de periodistas, mucho antes de que explotara públicamente de la manera en que lo hizo.
Volviendo a los fallos despenalizadores, no es casual que haya sido la Cámara Federal porteña la que hizo el trabajo sucio: los tres integrantes son más que permeables a las instrucciones del kirchnerismo.
El juez Eduardo Freiler, por caso, era un insípido fiscal que fue ascendido a camarista en octubre de 2004 -junto a otros cuatro jueces de primera instancia-, gracias a la intervención del mismísimo Néstor Kirchner. Su esposa es jueza en lo Civil, y su suegra, Esther Pereyra Arandía, fue una histórica puntera del PJ bonaerense, secretaria de la Cámara de Diputados en tiempos de Alberto Pierri.
Por su parte, Eduardo Farah, es un personaje harto denunciado por este medio, por su connivencia con el narcotráfico marplatense (2). Un botón de muestra ha sido la pésima instrucción que hizo en la causa "pescado blanco", la cual permitió que el expediente quedara en la nada. El premio por la labor cumplida en la ciudad balnearia, ha sido su asunción a camarista en la influyente Cámara Federal porteña.
El caso de Jorge Ballestero es más insólito aún: de juez Federal de primera instancia durante el menemismo, supo reciclarse para acomodarse como camarista en el kirchnerismo. La presión oficialista para que llegue a ocupar un cargo en la Cámara fue decisiva: si no se le sumaban las 78 unidades que tiene por antecedentes como juez, no podría haberlo logrado, ya que sólo obtuvo 40 puntos sobre los 100 que plantea el examen pertinente. Así y todo, Ballesteros quedó en el noveno lugar.
Lo que aún no ha explicado debidamente es cómo llegó a tener el nivel de vida que ostenta, ya que hace poco más de 10 años vivía en una humilde vivienda en Caballito y manejaba un viejo automóvil. Posiblemente, su riqueza patrimonial actual tenga que ver con el sobreseimiento dado oportunamente a corruptos funcionarios del menemismo, como Miguel Angel Vicco en la causa de la -mala- leche (3).
Como puede verse, los responsables del fallo que despenaliza la tenencia de drogas no son magistrados imparciales, sino jueces acomodados por el propio gobierno. Uno de ellos está directamente rozado por escándalos relacionados al narcotráfico en Mar del Plata, lo cual, en vista del fallo, es toda una paradoja en sí misma.
Concluyendo
Persiste hasta el día de hoy una insólita confusión respecto al tema de la despenalización de drogas: muchos creen que lo que quiere liberarse es el consumo, algo que ya está despenalizado hace dos décadas. En realidad, lo que quiere legalizarse, es la tenencia de los narcóticos; es decir, la posibilidad para transportar drogas de un lugar a otro. Esto daría libertad total al dealer y, por carácter transitivo, al narcotraficante.
Como se ha dicho, es lo que ha pactado el kirchnerismo e intentará cumplirlo a como sea.
Finalmente, hay que destacar que la despenalización va en sentido contrario a lo hecho por otros países del mundo. Incluso aquellos que habían despenalizado en su momento el uso de narcóticos, están revirtiendo su postura debido al fracaso de la medida.
Lo que intenta el gobierno es de una locura irracional, desaconsejado por todo especialista reconocido en el tema.
Por eso, por la salud social de la Argentina, hay que detener el intento de ingreso de carteles de droga al país. Pero, más importante que ello, es hacerlo por el futuro de nuestros hijos y nietos.
Christian Sanz
(1) Ver denuncia judicial por blanqueo de dinero:
http://www.periodicotribuna.com.ar/Articulo.asp?Articulo=4409
(2) Ver http://www.periodicotribuna.com.ar/articulo.asp?articulo=1721
(3) Ballestero vivía en Hidalgo al 300, en un departamento de setenta metros que era bastante más chico que su actual cochera de 92,6 metros cuadrados.
Buenos Aires - Argentina
info@PeriodicoTribuna.com.ar