QUIEN ELOGIO AL
PONTIFICE
Página 12, 25-7-13
En uno de sus
primeros pedidos en su día de descanso en Brasil, antes de dirigirse al
santuario de Aparecida y encontrarse con los asistentes a la Jornada Mundial de
la Juventud
(JMJ) de Río, el Papa recibió el libro Francisco de Asís y Francisco de Roma,
escrito por el teólogo y ex franciscano Leonardo Boff, en el que analiza la
ruptura que el sumo pontífice está realizando en la Iglesia. “Le entregué el
libro al arzobispo de Río, monseñor Orani Tempesta, y él se lo ha dado ya al
Papa”, confirmó Boff al diario El País de España momentos antes de viajar a dos
encuentros con más de mil jóvenes en Santa Catarina y en San Pablo. Boff, uno
de los padres de la Teología
de la Liberación ,
estará en Río el sábado, coincidiendo con la vigilia de oración en Guaratiba.
Boff definió al nuevo
papa como alguien que traía esperanza, alivio y alegría de vivir y pensar la fe
cristiana. “La iglesia volvió a ser una casa espiritual”, apuntó el teólogo,
que colgó los hábitos en 1992 por desavenencias con el Vaticano.
“No he podido
sustraerme a un compromiso que tenía desde hace mucho con los jóvenes a los que
voy a hablar. Por eso, voy a estar en Río sólo el sábado, último día de la
visita del Papa”, explicó el teólogo ante la posibilidad de mantener un
encuentro con el papa Francisco. “Una amiga del Papa de cuando era arzobispo de
Buenos Aires, con la que Francisco habla por teléfono todas las semanas, me
dijo que le preguntó al Papa si tenía la intención de recibirme y su respuesta
fue: ‘Quiero hacerlo, pero sólo después de haber concluido la reforma de la Curia ’”, reveló Boff al
diario español. Se trataría entonces de una visita oficial, algo que Boff no
pudo lograr durante el pontificado de Benedicto XVI. Sin embargo, no se
descarta un encuentro extraoficial si ambos coinciden en Río el próximo sábado.
Por otra parte, Boff
contó a O Globo de Brasil que Francisco podría rehabilitar a los más de 500
teólogos condenados por la
Iglesia durante los años de Joseph Ratzinger y Karol Wojtyla,
aunque considera que no lo hará mientras viva Benedicto XVI.
“El (por el Papa)
hará un llamamiento por que los gobiernos escuchen a las calles, escuchen a los
jóvenes”, afirmó Boff, quien opinó que el pontífice exhortará a los jóvenes a
inaugurar una nueva fase de la Iglesia. Según el brasileño, su esperanza en el
pontificado de Francisco se debe a que, antes de ser elegido papa, el cardenal
Jorge Bergoglio “era adepto de una de las vertientes de la Teología de la Liberación , que era
propia de Argentina, y que es la teología del pueblo, la teología de la cultura
popular”.
“La Teología de la Liberación tenía muchas
tendencias. En Argentina predominó ésa, que viene del justicialismo”, expresó
Boff. “Francisco siempre se entendió a sí mismo como un peronista, un
justicialista. El defendía traer a los pobres como participantes, y que no hay
solución para los pobres sin su participación. Esto es la Teología de la Liberación , y quizás
sea hasta bueno que él, como papa, no esté afiliado a teología alguna”, agregó
Boff.
“Podemos decir que
Francisco es un teólogo de la liberación elaborada por Scanone, que fue la que
de alguna forma sostuvo algunas actitudes del peronismo”, afirmó Boff, al
recordar que quien enseñó la
Teología de la
Liberación en Argentina fue Carlos Scanone, profesor de
Bergoglio. “Scanone elaboró una Teología
de la Liberación
que estaba ligada a la ‘teología popular’, de alguna forma diferente de la que
después desarrolló la corriente que se inspiró en la tesis del marxismo que
pretende el rescate de los pobres y excluidos a través de los cambios de
estructuras políticas”, agregó.
“Son sus nuevos
aires, nueva música, nuevas palabras para viejos problemas que nos permiten
pensar en una nueva primavera de la
Iglesia ”, estimó Boff, que fue condenado al silencio por el
papa Juan Pablo II por sus posiciones radicales, en una columna publicada en el
diario brasileño O Estado de Sao Paulo. Boff destacó que los papas anteriores
daban centralidad a la Iglesia
reforzando sus instituciones y doctrinas. “El papa Francisco coloca al mundo,
los pobres, la protección de la
Tierra , y el cuidado de la vida como cuestiones esenciales”,
diferenció.
Los dos pontificados
anteriores se caracterizaron por la disciplina y el control de las doctrinas,
señaló Boff, al destacar que esa estrategia creó un invierno que congeló muchas
iniciativas. “Esta nueva Iglesia, que aún no se puede evaluar lo suficiente por
su poco tiempo de existencia, dejó de ser una fortaleza para transformase en un
casa abierta cercana al pueblo”, consideró Boff.
Sobre la posibilidad
de que la Curia
use cualquier medio para mantenerse en el poder y pueda boicotear la ruptura
que quiere implementar Francisco, Boff no descartó ante El País que lo intenten.
“Pero Francisco también es jesuita, que es también hijo de Ignacio de Loyola,
el gran estratega de la
Compañía de Jesús, que ha resistido hasta hoy, pasando por
todos los vendavales contra ella, no solo de la Curia , sino de hasta más de
un papa que acabó disolviéndola, para resucitar siempre con mayor fuerza”,
añadió.
“El nuevo papa no se
presenta como un doctor sino como un pastor, habla a partir del sufrimiento
humano sobre el hambre del mundo, los inmigrantes de Africa que llegan a la
isla Lampedusa, y denuncia el sistema financiero mundial que martiriza a países
enteros –destacó–. Creo que es muy valiente. Se ha situado junto a los pobres y
contra la injusticia. Tenemos una Iglesia que tiene hábitos palaciegos y
principescos. Este Papa ha mandado señales de que quiere otro estilo de
Iglesia, de los pobres para los pobres, y ésta es la gran herencia de la Teología de la Liberación. Va a
poner en jaque los hábitos tradicionales de cardenales y obispos”, manifestó el
teólogo.