"Vuelve al esquema hegemónico personalista"
Por Martín Dinatale
Infobae, 16-6-17
El fraccionamiento del PJ, la eventual candidatura de
Cristina Kirchner, el armado político de Florencio Randazzo y las derrotas que
viene sufriendo el PJ en los últimos años "traerán profundas
consecuencias" para el peronismo, según el senador Miguel Ángel Pichetto.
No sólo esto. Para este dirigente, que ejerció un amplio peso en el Senado durante
los 12 años de kirchnerismo, hay una lectura lapidaria para el futuro político
inmediato del espacio que se emparenta con el PRI de México y que está
representada en una frase: "Las derrotas que hubo en el PJ en los últimos
años tuvieron fuertes consecuencias y en el peronismo vamos a necesitar un
proceso de tiempo para volver al poder".
Para Pichetto, la única fórmula que debe encontrar el
PJ para regresar al poder en 2019 o, incluso, se proyecta para 2023, es la
salida de lo que él denomina "la conurbanización". En términos
pragmáticos esto es "salir de la mirada centrada en la provincia de Buenos
Aires para pensar en la reconstrucción del PJ en las provincias y en los
dirigentes jóvenes".
Asimismo, el senador criticó la maniobra de Cristina
Kirchner para armar un frente propio: "La contradicción que muestra hoy el
espacio de la ex presidenta es negar el instrumento de internas y volver al
esquema decisorio hegemónico personalista".
–¿Qué lectura hizo de la decisión de Cristina Kirchner
de armar un frente por afuera del PJ? ¿Cree que Cristina será candidata?
–El proceso desarrollado en los últimos 15 días es una
consecuencia y una emergencia de un proceso de crisis que comienza en 2013 con
el triunfo de Sergio Massa y frustra un modelo hegemónico de la ex presidenta.
Así, el PJ está en un proceso de crisis, de transición y de búsqueda de
liderazgos. Al PRI en México le costó 12 años volver al poder y volver a
reconstruir del llano.
–¿Usted cree que le llevará ese tiempo al PJ?
–Lo que quiero decir es que vamos a necesitar un
proceso de tiempo para volver al poder. Puede haber un acortamiento de ese
proceso para que el PJ vuelva a ser confiable en el 2019 o en lo que continúa
el 2023. Es que la derrota deja consecuencias y efectos. El mapa electoral
cambió totalmente. El escenario de la provincia de Buenos Aires tenía tres
tercios. El Gobierno con un activo electoral como el de Vidal, con los recursos
que significa gobernar. El PJ, que estaba en el llano después de muchos años. Y
el de Massa con Stolbizer. Es una mixtura de PJ con centroizquierda y el otro
espacio era el kirchnerismo y Randazzo, que hoy está dividido. Antes había
tercios y hoy hay cuatro cuartos. El esquema opositor está dividido. En el
Gobierno deben mirar esto con cierto optimismo desde el punto de vista
electoral. Pero las elecciones siempre son abiertas e imprevisibles. Nada es
previsible. Le pasó a la ministra inglesa que buscó una elección para
consolidar su poder y lo perdió.
–¿No cree que el sector que unificó Cristina Kirchner
represente al PJ?
–El sector de Cristina es un sector más de izquierda y
radicalizado, con una posición más dura. Hay algunos peronistas allí, pero
muchos formaron parte del proceso del gobierno y que gravitan mucho hoy en la
construcción de esas ideas de ese sector. Yo me identifico más en un peronismo
de centro. La mirada del peronismo es más centrista y de construcción nacional
dentro del sistema democrático. Y cuando le tocó ser oposición lo hizo con
inteligencia y responsabilidad. Hay que mirar el pasado con aprendizaje.
–¿El armado de Cristina está más pensado en lo que fue
el 2005, cuando tenían el poder?
–El armado de Cristina es una visión muy parecida al
2005. Allí se rearma el Frente para la Victoria y en esto se da la
confrontación con Duhalde y su señora en la provincia de Buenos Aires. La
diferencia más sustancial es que en ese momento Néstor Kirchner estaba
ejerciendo el poder. Se estaban corrigiendo las anomalías de la economía y se
estaba recuperando empleo. En ese momento, con ese experimento con el PJ
neutralizado, el FpV se llevó la victoria. Esto no hace muchos años.
–¿Cree que Cristina será candidata entonces?
–Es indudable que si se arma una estructura con la ex
presidenta es muy probable que sea candidata y si no lo es será referencia
sustancial en ese espacio, lo que le va a dar el control del armado de las
listas.
–¿Qué deberá hacer Randazzo para ganar?
–Randazzo tendrá que construir un espacio propio y
buscar el apoyo de la ciudadanía donde está obligado a competir. Hubiera sido
más saludable competir (en unas PASO). Además hubiéramos cumplido con la ley de
primarias abiertas con participación de la ciudadanía. La contradicción que
muestra hoy el espacio de la ex presidenta es negar el instrumento de internas
y volver al esquema decisorio hegemónico personalista. La característica de los
sistemas políticos en América Latina es que cuando los partidos tienen el poder
no hay debate democrático interno. El Gobierno también muestra este esquema
donde habrá en Cambiemos una lista única en Capital y en Provincia.
–¿Las PASO pierden sentido en estas elecciones?
–Las PASO tienen sentido. No el verdadero que tiene la
ley de preselección de candidatos. Lo que tiene sentido es que marca
tendencias. Hoy marca la tendencia de cara a octubre. La experiencia muestra
que los porcentajes de las primarias difícilmente se modifiquen en octubre.
Puede haber un poco de corrimiento pero eso es dudoso.
–¿La ex presidenta no representa al PJ para ustedes,
entonces?
–La ex presidenta tiene una visión más alejada del PJ.
Este es un nuevo espacio en la Argentina y el PJ va a tener que renovarse y
reconstruirse. Con candidatos jóvenes y preparados para la Argentina que se
viene. No se puede estar preparando con un discurso fácil de televisión para convencer
a la ciudadanía. De esto hay que sacar experiencia.
–¿Le ayudará a Randazzo la polarización que hizo el
Gobierno con Cristina?
–El Gobierno ha logrado la polarización. Está forzando
esa polarización con un discurso muy confrontativo. Pero ante ello la gran
pregunta es qué va a pasar después de octubre, donde habrá un escenario muy
complicado y el Gobierno solo no va a poder. La realidad parlamentaria no se va
a modificar porque el PJ va a seguir manteniendo mayorías.
–¿Van a seguir con los esquemas de acuerdos en el
Congreso?
–No concibo otra oposición que no sea democrática. No
la del bloqueo, no la de no votar nada y llevar al Gobierno al decretismo. Ese
es el peor camino para la Argentina. Creo en la búsqueda de consensos y en que
el PJ sea alternativa democrática, que tenga la confianza de la ciudadanía para
que el día de mañana seamos opción de poder. Si apostamos a que todo vaya mal,
va a ir peor. El Gobierno está obligado a un diálogo permanente. Lo planteó
monseñor Poli en el Tedeum. Por ejemplo, dijo que hay pocas cosas para
celebrar, ya que aumentó la pobreza y que la democracia no ha podido resolver
ese problema.
-Es decir que sea cual sea el resultado de octubre el
PJ va a garantizar apoyo en el Congreso…
-Es lo que venimos ejercitando. Hemos apoyado leyes
como instrumentos importantes para que el Gobierno lleve adelante su política
como la salida del default, el acuerdo con los fondos buitre. Acompañamos el
blanqueo, el pago a jubilados, Ganancias, el Presupuesto. Lo que creo es que el
Gobierno debe convocar a grandes políticas de Estado, grandes acuerdos para
llevar adelante procesos de reestructuración para sacar adelante al país.
Argentina necesita de acuerdos. No le pongamos títulos rimbombantes que van a
quedar arrumbados en la revisión de la historia. Hablemos de siete temas.
-El 2019 no está lejos y el PJ parece estar sumergido
en una crisis. ¿Cree que podrán rearmarse?
-En primer lugar me parece que el PJ tiene que salir
de lo que denomino la conurbanización. Esa mirada centrada en la provincia de
Buenos Aires, sin olvidar que ese es un distrito muy gravitante. Pero hay que
salir de esa visión. Hay que mirar la reconstrucción del PJ en las provincias,
mirar los dirigentes jóvenes, sentarnos con nuestros representantes de
organizaciones sindicales que hacen un trabajo con mucha responsabilidad.
Tendremos un proceso de tiempo para volver al poder. Será un proceso de tiempo
que podrá ser más corto o más largo. Todo depende de la inteligencia de nuestra
dirigencia, siempre el factor humano es el que va a hacer la diferencia. El PJ
necesita una reconstrucción mirando al futuro no mirando para atrás. En el
periodo de 12 años que pasaron hubo aciertos y errores. En los últimos cuatro
años más errores. Hubo un encerramiento de visiones ideológicas no cercanas al
PJ. Se necesita recrear, renovarse y tener una propuesta. Necesitamos un
partido que vea la realidad con voluntad positiva y no negativa.