La Argentina tiene futuro si está bien
gobernada
El ex candidato
presidencial, en diálogo con La Prensa aseguró que muchos perdieron la
esperanza en los políticos. El líder de NOS afirmó que le "encantaría
manejar esta crisis'' porque podría acelerar la transformación del país.
Además, cree que la grieta es moral y acusa al Gobierno de tener "simpatía
con el delito".
Sebastián
Muzi
La Prensa, 27.10.2020
"Nosotros
consideramos que el principal problema que tiene el país no es de índole
financiero, económico ni político, sino moral, porque la clase política desde
hace muchas décadas abandonó y traicionó el pacto fundacional de la República,
los valores que son el sustento del sistema jurídico y político de la
Argentina. El respeto a Dios, a la Patria, a la bandera, el trabajo, la
producción... la traición de estos valores se transformó en un correlato de la
Argentina actual. La clase política ha generado un modelo basado en el miedo y
el odio'', señala el ex candidato presidencial Juan José Gómez Centurión, líder
del Frente NOS, en un extendido diálogo por Zoom con La Prensa.
El veterano de
Malvinas, cuyas acciones merecieron la Cruz al Heroico Valor en Combate, dijo
que los políticos de los últimos cuarenta años han dividido a los argentinos,
"confrontándolos y polarizándolos'', y que "se han manejado como
impostores, porque no es lo que dicen ser y no creen en lo que prometen. En la
crisis del día a día, esta casta tiene de rehén a 12 millones de argentinos con
planes y subsidios que no les alcanza para vivir. Esto constituye la base del
gasto y la indisciplina fiscal que hace que el país hoy sea inviable''.
-¿Entonces qué hay
que hacer?
-En primer lugar,
liberar esos 12 millones de planes a través del empleo genuino, y para eso es necesario
dar el paso con el sistema impositivo. Esto generaría una rueda virtuosa en la
economía. Con este modelo impositivo es imposible promover la producción en la
Argentina.
-¿Por qué, si
estuvimos a la par de las potencias hace 100 años, nos cuesta tanto ser
estables?
-La sociedad
argentina no es inestable, el modelo económico tampoco, lo que ha generado
inestabilidad monetaria sistemáticamente es el déficit fiscal y la incapacidad
de los gobiernos de controlar el gasto. La Argentina hace 50 años que gasta más
de lo que recauda y produce. Eso genera deuda con los organismos
internacionales, deuda en bonos y deuda cuasifiscal todos los meses tomando
dinero para el gasto corriente.
-¿Qué piensa
cuando ve que los jóvenes se quieren ir del país?
-Yo lo que les
digo a los jóvenes es que tienen que hacer un análisis muy concreto de cómo el mundo recibe a los
inmigrantes. En general no los recibe como los recibió Argentina durante el
siglo XIX y todo el siglo XX. En NOS tenemos una columna vertebral de jóvenes
con mucha fuerza y ellos mismos se encargan de decir que la Argentina tiene
futuro si está bien gobernada.
-¿Ve mucha gente
desesperanzada?
-Sí, muchos
perdieron la esperanza en los políticos porque estos no están dispuestos a
realizar los cambios en las estructuras que nos llevan al fracaso. Esta forma
de hacer política desalienta a la gente. Pese a ello yo noto que inclusive en
los hogares más humildes, cuando uno les explica que hay otra Argentina
posible, genera un enorme nivel de esperanza. Las grandes crisis, en manos de
buenos gobernantes, han generado oportunidades a lo largo de toda la historia
en todos los países, y la Argentina no puede ser la excepción.
-Justamente en el
programa de Viviana Canosa usted señaló que le gustaría manejar esta crisis.
-Sí, claro, porque
las crisis permiten reestructurar las cosas con mayor rapidez, haciendo
transformaciones profundas que en otro momento llevarían mucho tiempo, y que
sería muy difícil de llevarlas a cabo. Esta es la oportunidad para generar un
enorme programa de empleo y proponerle a la gente que vive de los subsidios
(que no es otra forma que enterrarse durante toda su vida), un modelo de
inclusión, aporte social, jubilatorio. Ahora, ¿qué es lo que pasa? Los actuales
gobernantes no tienen la cabeza ni el músculo para hacerlo. Yo creo que no
entienden el modelo productivo, se basan en un modelo socialdemócrata que tiene
que ser el Estado el que saque a la gente de la pobreza. En ningún lugar del
mundo pasa eso. Lo que la saca es el trabajo, la producción y el desarrollo.
POLITICA
-NOS se diferencia
del resto de los partidos por ser provida y tener un programa basado en
valores. ¿Qué más le falta para llegar a la ciudadanía?
-Creo que lo que
nos falta es presencia en los medios masivos de comunicación. Nos faltaba
presencia en redes pero ya hemos diseñado una estrategia digital muy
importante. La tarea de hacer conocer nuestra propuesta no es nada fácil. En
los grandes medios han decidido que una propuesta como la nuestra no sea
comunicable. Esto es palpable. Queremos recorrer todo el territorio argentino
contándole personalmente a la gente cuando pase la pandemia.
-Una de las
críticas que se le hace es que Lavagna, Espert y usted favorecieron la vuelta
de los Kirchner. ¿Qué piensa al respecto?
-Bueno, el
kirchnerismo decía que yo era una colectora de Cambiemos y Cambiemos decía que
yo favorecía al kirchnerismo. Esto es el absurdo que plantea la polarización
política a dos bandos. Las ofertas políticas enriquecen el sistema. Cambiemos
perdió porque hizo un gobierno muy malo y fracasó en todos los planos que se
propuso hacer transformaciones.
-En 2016 fue
funcionario en la administración Macri. ¿Cree que lo que le pasó en la Aduana
fue el puntapié para decidir ser candidato a presidente?
-No, yo en 2016 ni
siquiera pensaba en una candidatura. Todavía creía que el gobierno del cual
participaba venía a hacer una transformación. Cuando me di cuenta que no lo
hizo, y que después de haber prometido la defensa de la vida presentó el
proyecto del aborto en el Congreso, dije listo, hasta acá llegamos. Aquellos
que me quisieron perjudicar con esa operación, lo que lograron fue que me
hiciera conocido.
-¿Le gustaría que
Macri le dé su apoyo para enfrentar al kirchnerismo en 2023?
-Hay que ver en
2023 dónde está Macri y dónde estoy yo. Falta mucho, y en la Argentina tres
años pueden ser siglos. Me gustaría ser la cabeza de la oposición, no sólo al
kirchnerismo sino a este modelo que nos lleva al fracaso. -Teniendo en cuenta
el manejo de la pandemia, más la grave crisis económica y social de la que
todavía no ha llegado lo peor, ¿pediría en este momento un adelantamiento de
elecciones?
-No, el Gobierno
no se va a atrever a una medida de esa naturaleza, porque sería un gesto de
debilidad tremendo. Lo que sí creo es que pueda suspender las PASO, por ser un
gasto superfluo y más en una elección legislativa.
DELITOS
Cuando se le
pregunta por algunas medidas como la libertad de 4.000 delincuentes, la
restricción de libertades, el asesinato de personas por romper la cuarentena o
la pasividad con los mapuches, el veterano de Malvinas señala que ``el Gobierno
tiene una matriz de simpatía con el modelo delictivo, que se basa en ese setentismo
declarado. Muchos de los funcionarios tienen afinidad con la delincuencia, y
algunos de sus ideólogos (como Verbitsky) provienen de Montoneros. Sin embargo,
yo no creo que haya pasividad con los mapuches o con las tomas de tierras, sino
que directamente hay complicidad''.
-¿Usted dice que
hay funcionarios que están alentando la toma de tierras?
-Sí, y eso es un
delito, inclusive con las tierras estatales, que no son de nadie sino de todos.
Hay funcionarios de orga o paraestatales como Grabois que están siendo
alentados para usurpar tierras aduciendo una `necesidad', y con la complicidad
de la ministra de Seguridad.
-Hablando de los
'70. ¿Cree que ganó el terrorismo en la Argentina?
-No, creo que no.
La subversión como actor armado fue derrotado, claramente, porque su objetivo
era tomar el poder a través de la fuerza y no lo consiguió. Los agentes
subversivos y las organizaciones terroristas eran parte de una agenda cubana
para tomar el poder en cada uno de los países de Latinoamérica.
-¿Falta que actúe
la Justicia con los montoneros?
-Se hizo justicia,
pero fueron indultados. Acuérdese que la cabeza de Montoneros estuvo presa y
fue indultada por el ex presidente Menem. Lo que pasa es que el kirchnerismo,
cuando volvió, aparándose en un pacto con Verbitsky, lo que generó fue un gran
escudo con las organizaciones setentistas, que ellos llaman "de derechos
humanos", impulsando y cooptando a la Justicia, generando leyes
retroactivas y casi un Código Penal específicamente para ese fuero. Los que
combatieron a la subversión están presos, y el resto son funcionarios públicos.
-¿Cómo ve nuestra
política exterior?
-No hay. Y lo
estamos viendo con las idas y vueltas de la condena a Maduro en distintos
organismos. Hace mucho tiempo que la Argentina perdió la visión estratégica. Lo
que hace es un relacionamiento ideológico con cada gobierno y no hay una
política de Estado con el mundo. Eso nos hace muy poco confiables, porque cada
4 u 8 años cambiamos la política exterior.