Tasa de letalidad
por la infección de la COVID-19 calculada a partir de los datos de
seroprevalencia
John P A Ioannidis
Objetivo
Estimar la tasa de
letalidad por la infección de la enfermedad por coronavirus de 2019 (COVID-19)
a partir de los datos de seroprevalencia.
Métodos
Se buscaron los
estudios de seroprevalencia de la COVID-19 con un tamaño de muestra mayor o
igual a 500 a partir del 9 de septiembre de 2020 en PubMed y en los servidores
de preimpresión. Además, se recuperaron los resultados adicionales de los
estudios nacionales a partir de los comunicados de prensa y de los informes
preliminares. Se evaluaron los estudios para determinar las características de
diseño y las estimaciones de seroprevalencia. Para calcular la tasa de
letalidad por la infección de cada estudio, se dividió la cantidad acumulada de
muertes por la COVID-19 por la cantidad de personas que se estima que están
infectadas en cada región. Asimismo, se corrigió la cantidad de tipos de
anticuerpos probados (inmunoglobulinas, IgG, IgM, IgA).
Resultados
Se incluyeron 61
estudios (74 estimaciones) y 8 estimaciones nacionales preliminares. Las
estimaciones de seroprevalencia oscilaban entre el 0,02 % y el 53,40 %. Las
tasas de letalidad por la infección oscilaron entre el 0,00 % y el 1,63 %, los
valores corregidos entre el 0,00 % y el 1,54 %. En 51 lugares, la mediana de
la tasa de letalidad por la infección de la COVID-19 fue del 0,27 % (corregida
en un 0,23 %): la tasa fue del 0,09 % en lugares donde las tasas de
letalidad de la población con la COVID-19 eran inferiores al promedio mundial
(menos de 118 muertes/millón), del 0,20 % en lugares con 118-500 muertes a
causa de la COVID-19/millón de personas y del 0,57 % en lugares con más de 500
muertes a causa de la COVID-19/millón de personas. En personas menores de 70
años, las tasas de letalidad por la infección oscilaron entre el 0,00 % y el
0,31 % con medianas brutas y corregidas del 0,05 %.
Conclusión
La tasa de
letalidad por infección de la COVID-19 puede variar de manera sustancial en
diferentes lugares y esto puede reflejar diferencias en la estructura de edad
de la población y en la variedad de casos de los pacientes infectados y
fallecidos, así como en otros factores. Las tasas de letalidad por infección
que se calculan tienden a ser mucho más bajas que las estimaciones realizadas a
principios de la pandemia.