Infobae, 2 de
Marzo de 2021
“Yo no lo
gestioné, que lo explique el Gobierno”. El ex presidente Eduardo Duhalde ofreció esa breve
explicación cuando saltó el escándalo de la vacunación VIP contra el
coronavirus en el país, que derivó en la salida de Ginés González García del
Ministerio de Salud, y se conoció que él fue uno de los beneficiados. La
inoculación, se supo días después, fue delivery: el ex mandatario, su
esposa, sus hijas, y un estrecho colaborador recibieron la vacuna Sputnik V en
su casa ubicada en la zona sur del conurbano bonaerense.
En las últimas
horas revelaron quién fue la persona que aplicó esas vacunas a domicilio: el
subsecretario de Estrategias Sanitarias del Ministerio de Salud, Alejandro Costa,
el funcionario que acompañaba a la ahora ministra Carla Vizzotti en la lectura
diaria de la situación epidemiológica con relación al coronavirus. Así lo
informaron los periodistas Javier Calvo y Romina Manguel en A24. Es decir, no
fue personal médico del Hospital Posadas, como se especuló en un principio.
Costa, cercano
tanto a Ginés González García como a Vizzotti, es médico recibido en la
Universidad de La Plata, y es especialista en Medicina Interna, en Terapia
Intensiva, en Sistemas de Salud y Seguridad Social, y realizó una Maestría en
Políticas y Gestión de Salud. Además, se desempeñó como subsecretario de
Planificación del Ministerio de Salud de la Provincia de Buenos Aires durante
las gestiones de Daniel Scioli como gobernador.
Por otro lado, ayer
el fiscal Eduardo Taiano, a cargo de la investigación por la vacunación
paralela en el interior del Ministerio de Salud, amplió la lista de imputados y
pidió citar a Beatriz Sarlo como testigo.
Los dos nuevos
imputados son Alejandro Collia y Marcelo Guillé. Guillé trabajaba como
secretario privado de González García en tanto Collia ocupa el cargo de
subsecretario de Gestión de Servicios e Institutos del Ministerio de Salud de
la Nación. En el dictamen al que accedió Infobae, Taiano señaló que el caso se
circunscribirá “a las vacunaciones irregulares llevadas a cabo con dosis de
Sputnik V, asignadas al Hospital Nacional Posadas”.
“En ese sentido,
personas que no cumplían con los criterios de prioridad epidemiológicos y el
esquema de etapas previamente establecidos, y/o en los formularios pertinentes
consignaron una categoría falsa de trabajadores sanitarios, habrían sido
inmunizados en la institución médica referida, el Ministerio de Salud de la
Nación y domicilios particulares. Asimismo, dichas inmunizaciones se habrían
efectuado en virtud de las órdenes impartidas por el exministro Ginés González
García y ejecutadas por los funcionarios Lisandro Emilio Bonelli, Alejandro
Federico Collia y Marcelo Ariel Guillé”, amplió en el texto.
Durante la
apertura del año legislativo en el Congreso, ayer el presidente Alberto
Fernández hizo referencia a la vacunación VIP. “En el plan de vacunación, hay
prioridades muy claras. Las reglas se deben cumplir. Si se cometen errores, la
voluntad de este Presidente es reconocerlos y corregirlos de inmediato. Cuando
se dijo que aquellas reglas habían sido transgredidas, me he encargado de
recabar la información pertinente. Aun cuando en lo personal me causaran mucho
dolor, tomé las decisiones que correspondían”, aseguró el mandatario.
Y amplió: “Ningún
gobierno de la tierra se puede arrogar el privilegio de no cometer errores,
pero todo gobierno sensible sí tiene la obligación de corregir esos errores
para desterrar cualquier indicio de privilegio o falta de solidaridad”, agregó.
“No llegué a la
Presidencia para ser sordo a las críticas bien intencionadas. Como tampoco
llegué a la Presidencia para dejarme aturdir por críticas maliciosas que
responden a intereses inconfesables de poderes económicos concentrados, que en
ocasiones buscan sembrar la fractura, la polarización y discordia entre el
pueblo argentino, profundizando las heridas que como sociedad cargamos”,
finalizó el Presidente.