jueves, 1 de febrero de 2024

LAS ÉLITES DE DAVOS


 presionan por el control del discurso

 

By Iulia-Elena Cazan

NUEVA YORK, 26 de enero (C-Fam), 25-1-2024

 

 Líderes mundiales progresistas y jefes de importantes empresas de medios subieron al escenario en el Foro Económico Mundial (FEM) para reafirmar su compromiso de “luchar” contra la desinformación. Se reconoce ampliamente que este esfuerzo globalista se utiliza para eliminar opiniones conservadoras sobre temas como el aborto, la identidad sexual, la soberanía nacional y el COVID-19.

 

En respuesta al creciente escepticismo público hacia la agenda globalista, el FEM designó la sesión de este año como una sesión de “reconstrucción de la confianza”. A lo largo del evento, varios oradores reiteraron que la “desinformación” erosiona la confianza en las instituciones internacionales y los líderes mundiales tienen el imperativo moral de combatirla. Sin embargo, los progresistas suelen utilizar la palabra “desinformación” para describir el discurso antiglobalista y antiprogresista, no necesariamente el discurso falso.

 

Tirana Hassan, directora ejecutiva de Human Rights Watch, vinculó el “clima de desinformación” actual con el autoritarismo. Hassan dijo que “aparecen señales de advertencia [de autoritarismo]… con conceptos como proteger los valores familiares o salvaguardar nuestras tradiciones” y que el público debe prestarles mucha atención. “A menudo (estas señales) son egoístas, manipuladoras y casi siempre dañan a las personas y restringen los derechos humanos”.

 

Hassan avanzó aún más diciendo que “Otro ejemplo es cuando los derechos de las mujeres son atacados… los gobiernos les dicen a las mujeres… si pueden estar embarazadas o no… en Florida, la censura educativa donde se prohíbe a los estudiantes aprender sobre la identidad sexual y de género”.

 

El Informe de Riesgo Global 2024 del FEM cita la desinformación y la mala información como los mayores riesgos a corto plazo del mundo. El WEF lanzó una iniciativa titulada “Desinformación y COVID-19 – Inteligencia estratégica” que promovía la narrativa generalizada de respuesta al COVID-19, pero desde entonces han eliminado la página web.

 

​Meredith Kopit Levien, presidenta y directora ejecutiva del New York Times, dijo que “Google ha logrado avances reales en cómo se indexan las cosas”, lo que significa que Google es eficaz a la hora de generar y promover el “tipo correcto” de contenido en la cima de la página de Resultados de Búsqueda de Google (Google Search Results), mientras que la “información no deseada” es empujada mucho más lejos (en los resultados de la búsqueda), lo que supone una auténtica aventura poder encontrarla. Muchos usuarios están familiarizados con éso, especialmente en el contexto de COVID-19, cuando era necesario navegar a través de decenas de páginas de Google para llegar a contenido no convencional, solo para descubrir que, de hecho, era exacto.

 

La misión de controlar el discurso también está ganando peso en la Unión Europea (UE). En su discurso, Ursula von Leyen, presidenta de la Comisión de la UE, dijo que “para la comunidad empresarial mundial, la principal preocupación para los próximos dos años no es el conflicto armado ni el clima. Es la desinformación y la mala información”. Von Leyen también dijo que “los valores que apreciamos sin estar conectados (offline) también deberían protegerse estando conectados (online)”. Estos valores incluyen el acceso al aborto y la legalización del matrimonio entre personas del mismo sexo, que figuran como prioridades de la UE en los foros de derechos humanos de la ONU en 2024.

 

Vera Jourová, vicepresidenta de la Comisión Europea para Valores y Transparencia, dijo que la UE se está “centrando en mejorar el sistema para que la gente obtenga los datos correctos”. Elogió las funciones de verificación de datos en línea y dijo que “[La UE] tiene a toda la gran tecnología bajo el compromiso… [de luchar contra] la desinformación”.

 

En sus conversaciones, Leyen y Jourová también hicieron referencia a la Ley de Servicios Digitales, una propuesta legislativa de la UE que establece reglas para regular las plataformas y servicios en línea en toda la UE. La Ley incluye una sección sobre “mitigación de riesgos, como manipulación y desinformación”. A partir del 17 de febrero, se espera que la Ley sea vinculante para todas las entidades reguladas y se pedirá a los estados miembros de la UE que establezcan Coordinadores de Servicios Digitales.