jueves, 8 de julio de 2021

ACERCA DE LA ALIANZA

 


NOS-LIBERTARIOS EN LA PROVINCIA DE CORDOBA

Fernando Romero Moreno

8-7-21

 

Vale la pena conocer los 11 puntos del acuerdo entre NOS y el Partido Libertario (Córdoba) que, en líneas generales, son respetuosos del Orden Natural y Cristiano. En mi libro sobre la Nueva Derecha Argentina le dediqué varias páginas al fenómeno del movimiento libertario. Aquí, como comentario a la presentación que les comparto, me parece importante entender la diferencia entre paleo-libertarios y libertarios progresistas, para ver sus aportes, sus diferencias y conocer también los errores que tienen, los cuales no parecen haber influido en las bases de esta alianza electoral.

Ante todo vale la pena saber que el fenómeno "libertario" está teniendo un importante impacto, sobre todo en la juventud universitaria, tanto en la Argentina como en el resto de Hispanoamérica y España. En sí mismo considerado se trata de la expresión más radicalizada del liberalismo, con una tendencia que aspira al anarco-capitalismo (una sociedad con libre mercado y sin Estado) y otra a al minarquismo (un Estado que sólo se ocupe de Justicia y Seguridad), siendo en lo filosófico iusnaturalistas de corte individualista (Locke). En la práctica, la mayoría suele ser anarco-capitalista "en tesis" y "minarquista" en hipótesis (si se entiende la analogía). Aunque "stricto sensu" no es tanto el poder político lo que critican sino el Estado moderno (sea liberal, socialista o nacionalista).

Entre sus referentes intelectuales hay de todo, pero fundamentalmente siguen a Murray Rothbard y Robert Nozick. En la Argentina el intelectual más ligado a ellos es Javier Milei. Hasta allí no habría mucho más que decir, pues los errores desde la Doctrina Social de la Iglesia son más que claros.

Sucede sin embargo que, en los años 90 y a propuesta de Rothbard (que también fue cambiando algunas de sus ideas), surgió una tendencia llamada "paleo-libertarismo", esto es, libertarios culturalmente conservadores, enfrentados a los libertarios progresistas. Esa tendencia se manifestó defensora del cristianismo, de los cuerpos intermedios, de la nación en sentido histórico-cultural, de la familia fundada en el matrimonio heterosexual, del orden y la seguridad, de las autoridades infra-políticas, etc. y contraria no sólo al sector progresista de los libertarios (muy influenciados por Aynd Rand) sino también a los neoconservadores) Huntington, Fukuyama, Kristol, Podhoretz, etc), sobre todo por la tendencia de los últimos a pretender exportar el "american way of life" por medio de guerras en nombre de la democracia y el capitalismo.

Y se decantaron, mayoritariamente al menos, en contra del aborto, el relativismo moral, la ideología de género, el macro-capitalismo globalista, la izquierda cultural, el multiculturalismo, el arte moderno, el globalismo, los organismos internacionales y algunos también del sionismo y el Estado de Israel. Representantes de esta tendencia son Lew Rockwell, Thomas Woods, Ron Paul, Paul Gottfried, Hans- Hermann Hoppe (políticamente monárquico) y, en el mundo hispánico, Miguel Anxo Bastos y Pablo Victoria, entre otros. Eso los llevó a tejer una alianza (por momentos inestable) con los paleo-conservadores (conservadores tradicionalistas en la línea de Edmund Burke y Russell Kirk). Por eso apoyaron en la primera mitad de los 90 a Pat Buchanan (pese a que este político es económicamente proteccionista) y en los últimos años a Donald Trump.

En Hispanoamérica los paleo-libertarios siguen más a Agustín Laje y en cambio los progresistas a la guatemalteca Gloria Alvarez. A principios de este año hubo un debate muy demandado y varias veces postergado, entre Laje y Alvarez (seguido desde las redes sociales por un gran número de personas, principalmente jóvenes), en el cual literalmente Agustín destrozó con una argumentación silogística impecable a la referente liber-progre. Un fenómeno similar se ha dado en un sector del tradicionalismo carlista, dentro de la CTC. Se advierte en algunos pensadores que escriben en las páginas web Ahora Información y Navarra Confidencial (como Ángel Manuel García Carmona), aunque hay también carlistas muy críticos de cualquier influencia paleo-libertaria.

Dentro de nuestro país, Milei tiene una postura intermedia, pues si bien está en contra del aborto, de la izquierda cultural y del feminismo de género, defiende (o al menos lo hizo en el pasado) errores respecto a la despenalización de estupefacientes para consumo personal, la prostitución y la tolerancia con la poligamia. Respecto del anarco-capitalismo o el minarquismo, creo que siendo tan utópico, no es algo peligroso desde el punto de vista político-electoral. En todo caso ayudarán en la necesaria reforma del Estado, con ciertas medidas más o menos opinables, pero que no son de suyo contradictorias con el Orden Natural y Cristiano.

Lo qué sí importa son esos valores tradicionales compartidos con el paleo-libertarismo, que parece ser la tendencia del Partido Libertario en Córdoba, si vemos los fundamentos antropológicos del acuerdo con NOS como la noción de persona humana, la defensa de la familia y los cuerpos intermedios, del federalismo, de los principios de bien común y subsidiariedad, la crítica a la ideología de género, al aborto, etc.