martes, 30 de agosto de 2022

DÍA DEL NIÑO EN PARAGUAY

 

 y la batalla de Acosta Ñu

 

22 de Agosto de 2022


Autor: Ana Pais (@_anapais) BBC News Mundo

 

La Guerra de la Triple Alianza tuvo un saldo devastador no solo para el ejército de Paraguay, sino para el país en general.

Hace 150 años Paraguay fue el escenario de Acosta Ñu, “una de las más terribles batallas de la historia militar del mundo”.

Así lo afirmó el periodista brasileño Julio José Chiavenato en su famoso “Genocidio americano: guerra de Paraguay”, un libro publicado hace cuatro décadas que reescribió la historiografía regional.

Y si bien muchos de su datos han sido matizados o desmentidos, el texto sirvió para echar luz sobre lo que hoy sí es ampliamente reconocido como el enfrentamiento internacional más sangriento de la historia de América Latina: la Guerra de la Triple Alianza.

 

Esta guerra, que duró de 1865 a 1870, enfrentó a Paraguay contra los ejércitos aliados de Brasil, Argentina y Uruguay.

 

Se calcula que en esos 5 años murieron entre 200.000 y 300.000 paraguayos, que entonces equivalían a la mitad de la población del país y de los cuales el 80% eran hombres.

 

La fascinante historia de las mujeres que donaron sus joyas para financiar al ejército de Paraguay en la Guerra de la Triple Alianza

 

Entonces, ¿qué pasó en Acosta Ñu para convertirse en “el símbolo más terrible de la crueldad de esa guerra”?, como escribió Chiavenato.

La diferencia con el resto de las batallas es que aquella del 16 de agosto de 1869, donde este viernes el gobierno paraguayo inaugura un monumento, fue peleada por niños y adolescentes.

Tanto marcó al país esta batalla que es también la fecha en que se conmemora el Día del Niño.

 

“El año 1869 marca definitivamente el concepto de guerra total”, dijo el historiador paraguayo Fabián Chamorro a BBC Mundo.

“Guerra total -continuó- es cuando la población civil es alcanzada por los combates”.

Había niños en ambos bandos de la Guerra de la Triple Alianza, pero en Acosta Ñu hicieron algo que no era normal: pelearon.

Con el ejército paraguayo ya exterminado, explicó Chamorro, varias figuras importantes dentro de las fuerzas aliadas empezaron a señalar que la guerra ya estaba terminada y que era tiempo de retirarse.

De acuerdo con Chiavenato, una de estas figuras era el general Luís Alves de Lima e Silva, luego duque de Caxias, quien lideraba las tropas brasileñas en Paraguay.

“¿Cuánto tiempo, cuántos hombres, cuántas vidas y cuántos elementos y recursos necesitaremos para terminar la guerra, es decir, para convertir en humo y polvo a toda la población paraguaya, para matar hasta el feto en el vientre de la mujer?”, reclamó al emperador de Brasil.

Pero la orden era que el fin de la Guerra de la Triple Alianza llegaría solo tras la muerte del presidente de Paraguay, el mariscal Francisco Solano López, algo que pasaría el 1 de marzo de 1870.

“No había necesidad de hacer esta operación de cacería, donde la peor parte se la llevó la población civil”, afirmó Chamorro.

Por su parte, Solano López cada vez reclutaba soldados más jóvenes.

“Primero tenían 16 años y luego 14, 13 años”, dijo a BBC Mundo Barbara Potthast, profesora de historia ibérica y latinoamericana en la Universidad de Colonia, Alemania, quien llegó a encontrar registros de enrolamientos de niños de 11 años.

No obstante, los detalles sobre el enfrentamiento en sí de nuevo difieren.

Potthast contó que, para que los soldados aliados no se dieran cuenta de que peleaban contra niños, se pusieron barbas falsas. Chamorro aseguró que no pueden haber tenido tiempo para preocuparse por esos detalles.

Incluso se dice que los pequeños iban armados con palos que simulaban ser rifles.

“Los niños de 6 a 8 años, en el calor de la batalla, aterrados, se agarraban de las piernas de los soldados brasileños, llorando, pidiendo que no los matasen. Y eran degollados en el acto”, escribió Chiavenato en su influyente libro, según la traducción del Portal Guaraní.

Por la tarde, agregó, cuando las madres recogían los cuerpos de sus hijos y aún había heridos, los brasileños quemaron el lugar.

En cambio, el general brasileño Dionísio Cerqueira, quien estuvo en la batalla, dio otra perspectiva: “¡Qué lucha terrible esa entre la piedad cristiana y el deber militar! Nuestros soldados decían que no daba gusto pelear con tanto niño”.

“El campo quedó lleno de muertos y heridos del enemigo, entre los cuales nos causaban gran pena, por el abultado número, los soldaditos, cubiertos de sangre, con las piernecitas quebradas, algunos de los cuales ni siquiera habían llegado a la pubertad”, agregó.

Y continuó: “¡Cuán valientes eran para el fuego los pobres niños!” Potthast, por su parte, encontró relatos que afirmaban que estos pequeños no lloraban, aún al ser heridos.

En palabras de la historiadora alemana, el único punto en común entre los observadores e historiadores de todos los bandos era “el valor y coraje de la lucha de los paraguayos, inclusive los niños soldado”.

 

La batalla de Acosta Ñu se desarrolló cerca de lo que hoy es la ciudad de Eusebio Ayala, en el centro de Paraguay, y fue, en palabras de Chamorro, “una verdadera masacre”.

 

“De un lado estaban los brasileños con 20.000 hombres”, escribió Chiavenato. “Del otro, en el medio de un círculo, los paraguayos con 3.500 soldados de 9 a 15 años, no faltando niños de 6, 7 y 8 años”.

PESCA ILEGAL Y SU CONTROL

         

Oscar E. García

 

Informador Público, Ago 30-2022

 

El Mar Argentino se convierte en una verdadera ciudad flotante con los innumerables buques pesqueros provenientes de países extranjeros, principalmente de bandera china, que se instalan de manera creciente para llevar a cabo la captura de las distintas especies marinas, actividad que se realiza comúnmente de forma ilegal porque los buques navegan de modo prohibido dentro del límite territorial de las 200 millas marinas realizando la pesca en aguas en las que el país ejerce soberanía con derechos de exploración, explotación, conservación y administración sobre los recurso vivos y no vivos.

 

Solamente la pesca ilegal de calamar le produce al país una pérdida anual superior a 2.000 millones de dólares, cifra que se acrecienta significativamente con el resto de las especies capturadas a lo largo de un año.

 

Además, la pesca se desarrolla poniendo en serio peligro la sustentabilidad de los recursos marinos porque la actividad se despliega de manera desaprensiva y sin respetar los tiempos de desarrollo de las especies que habitan el mar.

 

La Armada Argentina adquirió últimamente cuatro patrulleros para fortalecer el control de la pesca ilegal de las flotas pesqueras chinas que navegan dentro de los límites marítimos argentinos depredando sus recursos ictícolas.

 

Sin embargo, el presupuesto del gobierno para el año 2022 disminuyó los gastos en defensa en un 18.50% lo que obliga a la Armada a reducir su funcionamiento a la mínima expresión impidiéndole cumplir con sus funciones básicas, lo cual compromete la apropiada defensa del mar territorial ya que los recursos disponibles no permiten que la totalidad de la flota lo patrulle adecuadamente, con el consiguiente perjuicio económico y político para la Argentina.

 

A raíz de ello, recientemente Alberto Asseff, presidente de la Comisión de Defensa de la Cámara de Diputados, manifestó que los buques oceánicos adquiridos a Francia continuarían amarrados en la Base Naval de Mar del Plata en vez de estar controlando la pesca ilegal y que, además de los extranjeros, hay pesqueros argentinos que cruzan la milla 201 para vender su producto a precio de dólar real para luego regresar a puerto argentino con escasa pesca para consumo interno, lo que redunda en problemas para la economía regional y el normal provisionamiento de tales alimentos en el país.

 

Los ministros de Defensa y de Economía deberían prestar especial atención a este serio problema y focalizarse en la ejecución de las acciones necesarias para dotar de los recursos necesarios a la Armada Argentina para que la totalidad de la flota pueda operar completamente en el territorio marítimo de modo de preservar los recursos ícticos y evitar la exportación ilegal con la consecuente pérdida de divisas tan necesarias en la actualidad para las reservas del Banco Central de la República Argentina.

PRIMER VUELO

 

 de un argentino a las Islas Malvinas

 

El piloto Miguel Fitzgerald era hijo de padres irlandeses, nació el 8 de septiembre de 1926 y falleció el 25 de noviembre de 2010, fue el primer argentino en volar a nuestras Islas Malvinas y plantar la Bandera Argentina el 8 de septiembre de 1964. Lo hizo solo y el día de su cumpleaños, piloteando un avión monomotor Cessna 185 (260HP), matrícula LV-HUA.

 

En sus narraciones de este hecho histórico, dice que fue solo una ocurrencia que tuvo, sin darle demasiada importancia, hizo algo que creía que debía hacerse, que solo lo llevó a cumplir un sueño que tuvo.

 

Decía que ser piloto civil, es una vocación, a los seis años tenía esos sueños, a los 16 años voló planeadores y a los 20 años, aviones con motor.

 

Era un avezado piloto, en el año 1962 había realizado otra hazaña, fue un vuelo de Nueva York a Buenos Aires sin escalas con un monomotor Cessna 210 (260HP).

 

Trabajó en Aerolíneas Argentinas, hizo fotografía aérea, taxi aéreo, remolque de carteles y aclara que no hizo fumigación ni contrabando, pero hizo de todo.

 

Ese año, 1964, Malvinas estaba en la agenda de la Naciones Unidas, no por iniciativa del gobierno argentino, sino por decisión de la Asamblea, se estaba por tratar el tema de las colonias en América y en los hangares del país, en las charlas entre pilotos, aparecía y reaparecía el sueño de cruzar a Malvinas y plantar nuestra bandera Argentina.

 

Fitzgerald decidió que lo haría y a través de un amigo suyo que trabajaba en el diario La Razón averiguó si les interesaba la cobertura periodística y a él a su vez le interesaba la difusión, para protegerse, porque podía ser sancionado por la Fuerza Aérea con una suspensión severa.

 

Al editor del diario, no le interesó la propuesta y como acababa de salir el diario Crónica, su joven director se entusiasmo con la misma.

 

Le ofreció el avión, el combustible, los gastos, si viajaba con él un fotógrafo del diario, pero ese viaje Fitzgerald lo quería solo para él, solamente requería un Avión Cessna 182 similar al que utilizó y que le hicieran, para cubrirse, una nota cuando volviera.

 

Esto no prosperó y el Cessna se lo prestó finalmente el señor Siro Alberto Comi, Presidente del Aeroclub de Monte Grande, que era representante de esa marca de aviones.

 

Fue redactada la proclama que reivindicaba a las islas como argentinas y Fitzgerald partió al sur, rumbo a Río Gallegos, a cumplir con su hazaña personal.

 

Era el 8 de septiembre de 1964 y ese mismo día él cumplía 38 años de edad, cumplió esta proeza, con un pequeño avión Cessna 185, motor de 260 HP, matrícula civil LV-HUA, al que él bautizo "Luis Vernet".

 

Decía que cuando uno está volando y está haciendo algo arriesgado, no piensa en nada más que en eso, está concentrado en lo que está haciendo, manifestaba que para el era así, porque es muy cerebral, como si haber hecho lo que él hizo no exigiera al menos un impulso fenomenal.

 

La pista de despegue fue la del Aeroclub de Río Gallegos, que no tenía torre de control monitoreada por la Fuerza Aérea.

 

Voló mar adentro y a las tres horas y quince minutos estuvo en contacto visual con el archipiélago de Malvinas.

 

Desde arriba veía un rectángulo como de cientos de islas e islotes, pero cuando sobrevoló el archipiélago, una capa muy densa de nubes le impide ver y no podía descender entre las mismas, porque en alguna parte se sabia que había un cerro de seiscientos metros de altura, entonces esperó un claro y cuando lo vio inició el descenso hacia debajo de la capa de nubes e identificó Puerto Argentino (Puerto Stanley), visualizando la pista de cuadreras, donde aterrizó normalmente.

 

Se bajó del avión y colgó la Bandera Argentina en el enrejado de la cancha; se le acercó un hombre de los que se habían juntado a ver el aterrizaje, quien le pregunto si necesitaba combustible; porque no se le había ocurrido que era argentino.

 

Entonces le dá la proclama escrita en español y le dijo: "Tome, entréguele esto a su gobernador"; se subió al avión y despegó normalmente volviendo a Río Gallegos, todo esto llevó unos quince minutos."

 

Cuando llegó a Río Gallegos el señor Héctor Ricardo García, el director de Crónica, empezó a jugar su papel, Crónica tenía la primicia.

 

El título en letra catástrofe fue: "Malvinas: hoy fueron ocupadas" y ese día, 8 de septiembre de l964, no se habló de otra cosa y La Razón registró uno de los días de más bajas ventas de su historia, su competidor llamó la atención e inauguró un estilo periodístico.

 

Cuenta la leyenda que hasta ese día los diarios no aceptaban devoluciones, pero los canillitas presionaron tanto a La Razón para devolverle sus ejemplares, que este antecedente después pudo modificar la relación entre los dueños de los diarios y los repartidores.

 

Al volver a Buenos Aires, en el Aeroparque de la Ciudad de Buenos Aires, lo esperaban del Movimiento Nacionalista Tacuara, quienes lo subieron a un jeep y lo llevaron a dar vueltas por la ciudad, como a un héroe.

 

Ese recibimiento y el festejo popular hicieron que la Fuerza Aérea no suspenda la matrícula de piloto y se le aplicó solamente apercibido.

 

Miguel Fitzgerald no estuvo en la tapa de los diario y es de extrañar que un hombre que hizo lo que hizo, ni por un momento se lamentó de no tener una foto que hubiese registrado la hazaña.

 

Por gentileza del Correo Argentino, se realizó un matasellos especial alusivo al Cincuentenario del Vuelo de Miguel Fitzgerald a las Islas Malvinas el 8 de septiembre de 2014, en la sede central del Correo Argentino estuvieron presente en ese lugar la esposa del piloto, Palmira, junto con amigos y familiares.

(Fuente: Fundación Marambio)

 

domingo, 28 de agosto de 2022

MAX WEBER


 y la política como vocación


POR ELENA VALERO NARVÁEZ

 

La Prensa, 28.08.2022

 

Por política entiende, el reconocido sociólogo Max Weber, la aspiración a participar en el poder, o influir en su distribución entre los distintos grupos que componen un Estado, considerado a éste, como la asociación política que tiene dentro de cierto territorio, como medio especifico, el monopolio legitimo de la violencia. Para subsistir necesita que se acate la autoridad que pretenden tener quienes en ese momento gobiernan. Esa dominación se apoya en el principio de legitimidad, el cual puede basarse en la costumbre, el carisma personal, o en la legalidad, orientación a la obediencia de las obligaciones legalmente establecidas. Estos son los tres tipos puros de dominación, se encuentran raramente en la realidad, por lo general se dan combinaciones, sin ellos viviríamos en la anarquía.

 

De los tres tipos ideales, el que le interesa a Weber para explicar la política como vocación, es el de la legitimidad basada en el carisma, porque en ella arraiga en su más alta expresión la idea de vocación. Se obedece no porque lo marque la costumbre o una norma legal sino porque hay confianza, es a una persona, a sus cualidades, al que se le entrega el sequito, el partido. En Occidente, dentro del marco constitucional, lo representa el jefe de partido, es un producto específico de la cultura occidental. Los políticos profesionales, viven para y por la política, gozan con el ejercicio del poder que poseen o le dan con ello un sentido a su vida, al ponerla al servicio de una causa. Cual ha de ser la causa para cuyo servicio busca y utiliza el político poder, es ya cuestión de fe. Puede servir finalidades nacionales o humanitarias, sociales, éticas o culturales, seculares o religiosas, lo que importa es que siempre ha de existir alguna fe, cuando falta, incluso los éxitos políticos aparentemente muy sólidos, llevan en sí, la maldición de la trivialidad.

 

EL PODER COMO MEDIO

Quien hace política, explica Weber, aspira al poder como medio para la consecución de otros fines, ya sean idealistas o egoístas, o solamente para gozar del sentimiento de prestigio que él confiere. Toda lucha entre partidos persigue no solo un fin objetivo sino también, y ante todo, el control sobre la distribución de los cargos. La militancia espera la ansiada retribución, a esta tendencia se opone la evolución del funcionario moderno que se va convirtiendo en un trabajador, altamente especializado, mediante una larga preparación y, cuyo valor supremo, es la integridad, cuando ello no existe, se cierne sobre la sociedad, una terrible corrupción y una incompetencia generalizada.

 

La actividad del político -manifiesta Max Weber- está bajo un principio de responsabilidad distinto, y aun opuesto, al que orienta la acción del funcionario, el cual se honra con su capacidad de ejecutar precisa y concienzudamente, como si respondiera a sus propias convicciones, una orden de la autoridad superior, sobre la cual descarga, toda su responsabilidad; sin esta negación de sí mismo, se hundiría toda la máquina de la Administración. El estadista dirigente, por el contrario, asume personalmente la responsabilidad de todo lo que hace, no la puede rechazar o arrojar sobre otro.

 

Los partidos modernos son hijos de la democracia, del derecho de las masas al sufragio, de la necesidad de hacer propaganda y organizaciones de masas y, de la evolución hacia una dirección más unificada, y una disciplina más rígida. La empresa política ha quedado en manos de profesionales, formalmente se ha producido una acentuada democratización, el partido designa candidatos y delega el poder a quienes sigue la mayoría.

 

LAS CUALIDADES

La conciencia de tener una influencia sobre los hombres, de participar en el poder sobre ellos y, sobre todo, el sentimiento de manejar los hilos de acontecimientos históricos importantes, elevan al político profesional, incluso al que ocupa posiciones fundamentalmente modestas, por encima de lo cotidiano.

 

La cuestión que entonces se plantea es cuáles son las cualidades que le permitirán estar a la altura de ese poder y de la responsabilidad que sobre él arroja. Aquí entramos en el terreno de la ética, pues a ella le corresponde determinar, qué clase de hombre hay que ser para tener el derecho a poner la mano en la rueda de la Historia.

 

Puede decirse que son tres las cualidades decididamente importantes para el político: pasión, sentido de la responsabilidad, y mesura. Pasión en el sentido de entrega apasionada a una causa, al dios o al demonio que la gobierna, no en el sentido de esa actitud interior de excitación estéril, propia de un determinado tipo de intelectuales, que giran en el vacío y están desprovistos de todo sentido de responsabilidad objetiva. Pero, no todo queda arreglado con la pura pasión, por muy sinceramente que se la sienta, la pasión no convierte a un hombre en político si no está al servicio de una causa, y no hace de la responsabilidad para con esa causa, la estrella que oriente la acción.

 

Se necesita, y esta es la cualidad decisiva para el político, mesura, capacidad para que la realidad actúe sobre uno sin perder el recogimiento y la tranquilidad, es decir, para guardar la distancia entre los hombres y las cosas. El no saber guardar distancias es uno de los pecados mortales de todo político y una de esas cualidades cuyo olvido condena a la impotencia.

 

El problema es precisamente cómo puede conseguirse que vayan juntas, en las mismas almas, la pasión ardiente y la mesurada frialdad. Solo el hábito de la distancia, en todos los sentidos de la palabra, hace posible la enérgica doma del alma que caracteriza al político apasionado y lo distingue del simple diletante político, esterilmente agitado.

 

El político, por ello mismo, debe vencer cada día, y a cada hora, un enemigo muy trivial y demasiado humano, la muy común vanidad, enemiga mortal de toda entrega a una causa y de toda mesura, en este caso, de la mesura frente a sí mismo. El pecado comienza en el momento en que esta ansia de poder deja de ser positiva, deja de estar exclusivamente al servicio de la causa para convertirse en una pura embriaguez personal.

 

En último término, no hay más que dos pecados capitales en el terreno de la política: la ausencia de finalidades objetivas y la falta de responsabilidad, que frecuentemente, aunque no siempre, coincide con aquella. La vanidad, la necesidad de aparecer siempre que sea posible en el primer plano, es lo que más lleva al político a cometer uno de esos pecados o, los dos a la vez. La ausencia de finalidad objetiva le hace proclive a buscar la apariencia brillante del poder, en lugar del poder real; la falta de responsabilidad lo lleva a gozar del poder sin tomar en cuenta su finalidad.

 

El poder es el medio ineludible de la política, el ansia de poder es una de las fuerzas que la impulsan, no hay deformación mas perniciosa de la fuerza política que el baladronear de poder con un advenedizo, o complacerse, vanidosamente, en el sentimiento de poder, es decir, adorar el poder puro en cuanto tal, de hecho, actuar en el vacío y sin sentido alguno.

 

¿Cuál es el lugar ético que la política ocupa? La ética puede surgir a veces con un papel extremadamente fatal, una ética que, en vez de preocuparse por lo que realmente corresponde al político, el futuro y la responsabilidad frente a él, se pierde en cuestiones políticamente estériles, como por ejemplo, sobre cuales han sido las culpas en el pasado.

 

LA ETICA

Weber analiza la verdadera relación entre ética y política, les responde a quienes piensan que no tiene nada que ver la una con la otra, o que es cierto que hay una sola ética válida para la actividad política como para cualquier otra actividad. Se cree que solo puede ser cierta una o la otra, o que es indiferente para las exigencias éticas, que la política tenga, como medio especifico de acción, el poder, tras el que está la violencia. Para Weber, la política se rige por la ética que tiene en cuenta más que las intenciones, las consecuencias, por eso se refiere en su análisis a los medios. Nos dice que la ética acósmica nos ordena no resistir el mal con la fuerza, pero para el político, lo que tiene validez es el mandato opuesto: "Has de resistir el mal con la fuerza pues de lo contrario te haces responsable de su triunfo".

 

Toda acción éticamente orientada puede ajustarse a dos máximas fundamentalmente distintas entre sí, e irremediablemente opuestas: puede orientarse conforme a la ética de las intenciones o conforme a la ética de la responsabilidad. Hay una diferencia abismal entre obrar bien dejando el resultado en manos de Dios, u obrar según la ética que tiene en cuenta las consecuencias previsibles de la propia acción.

 

Ninguna ética del mundo, explica el eminente sociólogo, puede eludir el hecho de que para conseguir fines buenos hay que contar, en muchos casos, con métodos moralmente dudosos o, al menos peligrosos, con la posibilidad, e incluso la probabilidad, de consecuencias laterales malas. Ninguna ética del mundo puede resolver, tampoco, cuando y en qué medida, quedan santificados por el fin moralmente bueno, los medios y las consecuencias laterales, moralmente peligrosas. Quien hace política, asegura Weber, pacta con los poderes diabólicos que acechan en torno de todo poder.

 

Quien busca la salvación de su alma y la de los demás, que no las busque por el camino de la política, el genio o demonio de la política vive en tensión interna con el dios del amor, incluso del dios cristiano en su configuración eclesiástica, y esta tensión, puede convertirse, en todo momento, en un conflicto sin solución.

 

De todos modos, aunque la política se hace con la cabeza, en modo alguno se hace solo con ella, pero, un político, no debiera inflamarse con concepciones románticas, es más maduro quien siente, realmente, esa responsabilidad por las consecuencias y actúa conforme a ella y al llegar a cierto momento, dice: Llego hasta aquí. me detengo.

 

De este modo, ambas éticas son complementarias, concurren para formar al hombre autentico, al hombre que puede tener vocación política, que no emprende una huida mística del mundo, sino que está a la altura de sus propios actos, a la altura del mundo como realmente es, y a la altura de su cotidianeidad.

 

Termino este incompleto resumen, Max Weber nos dijo que no se consigue lo posible si no se intenta lo imposible, una y otra vez, pero para ser capaz de hacer esto, no solo hay que ser un político, sino también un héroe, soportar la destrucción de todas las esperanzas sin quebrarse, cuando el mundo se muestra demasiado estúpido, demasiado abyecto, para lo que él le ofrece. Solo quien es capaz de responder frente a todo esto y es capaz de responder con un "sin embargo", solo un hombre de esta forma construido, asegura Weber, tiene vocación para la política.

 

* Miembro de Número de la Academia Argentina de la Historia.

REVISTA VIRTUAL

 

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sábado, 27 de agosto de 2022

URGE REFORMAR

 

 la ley de Salud Mental

 

Catalina Buitrago

Diputada bonaerense de Juntos por el Cambio


Infobae, 27 de Agosto de 2022

 

 

En los últimos meses se ha debatido mucho públicamente acerca de la Ley 26.657, también denominada " Ley de Salud Mental”, sancionada en el año 2010 en vistas de implementar una legislación que permita resguardar los derechos de aquellas personas que padecen trastornos psiquiátricos o adicciones. Esta normativa trajo aparejados grandes cambios para un grupo de la sociedad que fue víctima de diferentes abusos a lo largo del tiempo, del desamparo del Estado y de la segregación social.

 

Pero, y cómo un proceder al que el Congreso Nacional se ha ido acostumbrando, la sanción de esta Ley parece haber sido fundada en una realidad totalmente ajena a la de nuestro país, respondiendo a demandas de la agenda internacional más que a las que nuestra sociedad reclamaba. Al momento de su redacción y posterior sanción no hubo un consenso ni una participación activa con los profesionales de la salud involucrados en esta temática. Esto provocó numerosas falencias al momento de poner en práctica la norma, entre otras cosas, un rigorismo jurídico que dificulta el tratamiento psiquiátrico o de adicciones de quienes lo padecen. Específicamente ha presentado importantes inconvenientes en lo relacionado a las internaciones voluntarias e involuntarias en establecimientos psiquiátricos.

 

Esta ley adoptó, como una de sus metas, la finalización y erradicación de los hospitales monovalentes, es decir, los manicomios. Esto provocó que las personas que padecen una enfermedad mental o una fuerte adicción y requieren de una internación en un establecimiento con determinadas características para su atención, no tengan un lugar donde llevar a cabo su tratamiento

 

En el art. 27 de la ley 26.657, los legisladores prohíben taxativamente la creación de nuevos manicomios, neuropsiquiátricos o instituciones de internación monovalentes, sean públicos o privados. Asimismo, determina que dichas internaciones deberán realizarse en hospitales generales y que para tal efecto la red pública deberá contar con los recursos necesarios. En este sentido, el art. 14 señala que la internación es considerada un recurso terapéutico de carácter restrictivo y sólo puede llevarse a cabo cuando aporte mayores beneficios terapéuticos que el resto de las intervenciones. De esta manera, queda en evidencia uno de los errores más grandes de la norma, que es el concepto de que los establecimientos monovalentes son perjudiciales para el paciente y que las internaciones tienen que considerarse exclusivamente como restrictivas.

 

Resulta equivocado considerar que la solución para evitar abusos o el menoscabo de los derechos de los pacientes es a través de la erradicación de los establecimientos especializados en el tratamiento psiquiátrico o de adicciones. Por el contrario, lo que debe existir es una política de Estado que incentive la creación de entidades especializadas en la salud mental, ajustadas a la normativa actual y, por sobre todo, que abarquen prácticas multidisciplinarias que procuren acompañar al paciente y contener a su grupo familiar.

 

Uno de los logros de la legislación actual tiene que ver con la promoción de servicios de inclusión social y laboral, el acompañamiento de las personas y grupos familiares, y la creación de casas de convivencia y hospitales de día. En la actualidad los centros de salud mental no logran cubrir la amplia demanda existente ya que el estado nacional no implementó un proyecto o programa que gradualmente ponga en funcionamiento el desarrollo de este tipo de establecimientos . Otra ley inaplicable en la realidad. Así nos vamos llenando de leyes que no se aplican y que lo único que hacen que entorpecer el normal funcionamiento de la sociedad.

 

Lo cierto es que todas estas problemáticas han tomado mayor notoriedad producto de la pandemia COVID-19, y la enfermedad del coronavirus hizo estragos en los sistemas sanitarios del mundo, y especialmente en lo que refiere a la salud mental.

 

El impacto del COVID-19 en nuestro SSM reveló, una vez más, la falta de presupuesto destinado a este sector, así como la ausencia de políticas públicas que atiendan correctamente a quienes padecen trastornos psiquiátricos o adicciones. Así lo afirmó Martin Etchevers, secretario de investigación y coordinador de estudios de OPSA (Observatorio de Psicología Aplicada de la Facultad de Psicología de la Universidad de Buenos Aires), en una nota periodística: “Se debe llamar la atención sobre la poca entidad que las políticas públicas le han dado a la salud mental. En la pandemia se dio mucha importancia, con razón, a la infectología, pero no a la inmunidad psíquica; a la capacidad psíquica de poder sobreponerse a los efectos destructivos de la pandemia”, aseveró. Y concluyó: “Hay que crear la posibilidad de que haya dispositivos de salud mental que permitan acceder al mayor número de personas, independientemente de sus recursos”.

 

En este último tiempo surgieron diferentes hechos lamentables relacionados con personas que padecen trastornos psiquiátricos o, en su caso, adicciones. Estos sucesos de impacto mediático y de público conocimiento brindan una visión más clara sobre las problemáticas aquí planteadas respecto de la ley de salud mental. Todos estos hechos no son aislados y tienen un hilo conector, que es la necesidad de una reforma de la ley de Salud Mental. La dificultad de lograr una internación para el correspondiente tratamiento de aquellos pacientes que se encuentran en un estado de inestabilidad emocional, sea producto de trastornos psiquiátricos o de adicciones, es de suma notoriedad. Asimismo, en aquellos casos donde el paciente no cumple con el tratamiento prescrito por el profesional de la salud y no quieren continuar con aquél, no se lo puede obligar a hacerlo en contra de su voluntad.

 

Por otro lado, los profesionales de salud enfrentan una situación compleja al momento de determinar una internación, sobre todo cuando el contexto del paciente no llega a ser como los casos previamente mencionados. Principalmente, dado que al momento de mencionarle al paciente la necesidad de una internación, si aquellos no prestan su consentimiento, no se puede llevar a cabo. Por otro lado, también existe el temor de tener represalias judiciales en caso de determinarla sin su voluntad.

 

Lo expuesto deja en evidencia la necesidad urgente de una reforma que proteja a los pacientes,a los profesionales de la salud, a los establecimientos de salud mental, a las familias y a la sociedad en general; que a su vez sea consensuada con los sectores involucrados en la salud mental y que atienda verdaderamente las demandas del Servicio de Salud Mental.

LOS CURAS VILLEROS

 

 peregrinarán por todo el país contra la droga: “La política tendrá que dar respuesta”

 

Claudia Peiró

 

Infobae, 27 de Agosto de 2022

 

“Será una celebración pero también una acción para sensibilizar a la sociedad toda que se tiene que involucrar para resolver este problema”, dijo Pablo Vidal, coordinador de la Familia Grande Hogar de Cristo (FGHC) y del área de Desarrollo Humano Integral de Cáritas Argentina, en la conferencia de prensa en la que, junto al padre Pepe Di Paola y otros referentes, anunciaron la peregrinación que, con el lema “Ni un pibe menos por la droga”, recorrerá todo el país durante seis meses en una larga marcha que culminará en marzo de 2023, cuando se cumplirán 15 años de la creación de estos centros y 10 del pontificado de Francisco.

 

La función de los hogares de Cristo, explicó la referente María Elena Acosta, es “recibir al que no tiene lugar, compartir la mesa, vivir en comunidad, caminar juntos, recibir al chico o chica que viene con una mochila muy pesada, y a su familia, y ayudarlo a ponerse de pie”.

 

En la bandera con el lema de la peregrinación, se ven las fotos de algunos de los chicos que ya no están, esos que no se pudieron poner de pie. “La droga es una forma de esclavitud. En un país que se dice independiente, hay una esclavitud por la droga”, sostuvo el padre Pepe Di Paola, de la Pastoral Villera y párroco en el barrio La Cárcova, en José León Suárez.

 

Di Paola recordó que los Hogares de Cristo se crearon por inspiración del entonces cardenal Jorge Bergoglio, en sus tiempos de arzobispo de Buenos Aires cuando, como acto fundacional, lavó los pies al primer grupo de jóvenes que iniciaba el duro camino de salir de las adicciones y de la calle. “Hogares y papado son dos hechos muy ligados entre sí para nosotros”, dijo Di Paola y es por eso que se unirán también, en marzo próximo, ambas conmemoraciones.

 

A casi 15 años de aquel momento fundacional, hoy los centros están unidos en la Federación Familia Grande Hogar de Cristo y diseminados por todo el país.

 

La experiencia que nació en la Villa 31 de Retiro se fue replicando en otras localidades. Esto se hizo siguiendo dos ejes, dijo el Padre Pepe: “Un abordaje territorial, dando respuesta en el lugar, no derivando a la persona sino trabajando en comunidad. Y el otro eje es la complejidad, entender que todos pueden aportar”.

 

Es decir, no solo profesionales o especialistas, sino todos los integrantes de la comunidad, cocinando para los chicos, animando actividades recreativas, con donaciones, etcétera.

 

En el año 2016, por iniciativa de monseñor Oscar Ojea -hoy presidente de la Conferencia Episcopal, pero en ese entonces a cargo de Cáritas-, esta organización decidió tener un área dedicada a la problemática de las adicciones y coordinar esa acción con los Hogares de Cristo. “Fue casi una fusión”, explicó Beatriz Ballario, referente de Cáritas Argentina y de los Hogares, que también precisó que Cáritas es la Iglesia Católica, y que su misión es coordinar la obra social de la Iglesia.

 

Desde Buenos Aires saldrá un ómnibus con 60 personas, varones y mujeres de los Hogares de Cristo que irán brindando su testimonio. En cada punto del recorrido darán charlas y tendrán encuentros en escuelas, clubes, sindicatos; localmente, las parroquias y centros barriales organizarán sus propias actividades para los días -entre 3 y 4 según el cronograma- en los que la peregrinación esté en su localidad.

 

Todos los que lo deseen podrán acompañar la caravana, que luego de recorrer el AMBA, iniciará su itinerario nacional por el litoral del país.

 

“Nuestra idea es unir los lugares de dolor con todos los santuarios marianos del país, con los sitios de piedad popular”, dijo Pablo Vidal. La peregrinación llevará una réplica de la Virgen de Luján.

 

“Cada año, los Hogares festejamos nuestro aniversario en marzo en Luján. La madre es en general la primera y la que más se preocupa cuando sus hijos son atrapados por las adicciones. Por eso queremos la presencia de la Madre, de la Virgen María para estos chicos”, explicó Di Paola.

 

“María nos visita y nos abraza” es otro lema de la peregrinación.

 

Por otra parte, Cáritas también ha lanzado una campaña de recolección de firmas bajo el lema “Ni un pibe menos por la droga”, que puede firmarse en la página de la organización.

 

El próximo 4 de septiembre tendrá lugar el lanzamiento nacional de la peregrinación en el Luna Park. El resto del mes estará destinado a recorrer el conurbano. El 1° y 2 de octubre se hará la peregrinación juvenil a Luján. Y el 3 saldrá la caravana a recorrer el interior del país.

 

En un video exhibido durante la conferencia de prensa se mostraron los resultados de un estudio hecho por el Hogar de Cristo para medir el impacto de las adicciones a sustancias psicoactivas en personas en contexto de exclusión. Consultaron a 300 personas en 21 de sus centros barriales. Un 20 por ciento de las personas consultadas se encontraba en condiciones habitacionales precarias antes de consumir pero después de hacerlo ese porcentaje trepó a 47. El 40% de los que empezaron a consumir terminaron en la calle o en un parador. Antes de consumir el 50% ya había tenido problemas con la ley, pero después de consumir esa cifra trepó a 80 por ciento. Más de la mitad llegó a perder la libertad. El consumo duplica o triplica la presencia de enfermedades como el HIV y la tuberculosis, entre otros graves inconvenientes. Es a esta multiplicidad de problemas que enfrentan las personas con adicciones en contexto de exclusión que los Hogares de Cristo buscan dar respuesta.

 

Ahora, con la peregrinación que lanzan el 4 de septiembre quieren dar a conocer esa experiencia y al mismo tiempo interpelar a la sociedad y a la dirigencia.

 

“La política tendrá que dar respuesta -dijo el padre Pepe-. Por lo general, el mensaje es que no se puede hacer nada. Pero nuestra experiencia muestra que en los barrios se despierta un clima muy solidario, y se crea un círculo virtuoso. Esa realidad está, sólo que no se conoce. Lo que queremos con la peregrinación es que más gente tome conciencia de que desde su lugar puede cambiar esta situación”