martes, 31 de enero de 2023

TODAVÍA QUEDAN CRIOLLOS

 

Gauchos a caballo frenaron la marcha kirchnerista hacia Lago Escondido

 

Claudio Andrade

 

Clarín, , 31/01/2023

 

La columna principal de la llamada 7° Marcha por la Soberanía de Lago Escondido, compuesta por unas 500 personas integrantes de diversas organizaciones kirchneristas, fue frenada por un grupo de baqueanos a caballo a la entrada del camino de Tacuifí que conduce directamente al lago y a la propiedad del empresario inglés Joe Lewis.

 

Los baqueanos, muchos de ellos jóvenes y adolescentes, cerraron con candado la gruesa reja negra y se ubicaron detrás de ellas utilizando incluso sus caballos para que no exista la menor posibilidad de que los militantes ingresen. "No pueden pasar esto es propiedad privada", le indicaron a los militantes.

 

Mientras tanto, la segunda columna continúa avanzando por el escarpado camino de montaña y que también conduce a las orillas del lago.

 

A su vez, la policía de Río Negro dispuso un operativo que incluye a unos 70 agentes, pero la consigna de los efectivos de seguridad parece ser no intervenir a menos que resulte indispensable.

 

Entre los dirigentes y militantes que se vieron en la entrada del camino directo estaban Magdalena Odarda, Sergio Maldonado (hermano de Santiago), mientras que Jorge Rachid, médico personal de Milagro Sala lideraba al grupo que iba por el sendero de montaña.

 

Vecinos relataron que en los días previos a esta manifestación descubrieron en la zona vehículos que pertenecerían al ministerio de Seguridad de la Nación que conduce Aníbal Fernández.

 

Alrededor del mediodía, miembros de la columna principal utilizaron sus kayak para navegar por el lago Soberanía que está en el recorrido y encendieron fuego en sus orillas, dos acciones prohibidas por la Secretaría de Ambiente de Río Negro.

 

Entre ellos se vio a Jorge Rachid, funcionario de Axel Kicillof en la Provincia de Buenos Aires. Fue en el Lago Soberanía. Forman parte de la nueva marcha de militantes kirchneristas hacia Lago Escondido.

 

En uno de los videos que circulan se observa a Rachid recostado en una embarcación mientras pregunta: "¿cuanto sale el viajecito hasta acá?".

 

Los manifestantes instalados en el camino de Tacuifí llevaban numerosas pancartas, una de ellas decía: “Fuera ingleses de la Patagonia y Malvinas”. En rigor, Lago Escondido es mucho más accesible ahora que cuando estaban los antiguos dueños, los Montero, cuentan los vecinos de la zona. Entonces, en los 90, el camino de Tacuifí se llamaba Montero y era básicamente una huella.

 

A lo largo de los años, Lewis inició numerosas acciones tendientes a sostener vínculos con los vecinos que incluyen visitas guiadas de escuelas y otras organizaciones, permisos de pesca, y hasta una pista de vehículos que construyó especialmente para los fanáticos de El Bolsón.

 

Durante la noche y la madrugada previa a la marcha los gauchos de la zona utilizaron mensajes en Whatsapp para alertar a la población de El Bolsón y Bariloche por la avanzada de la columna.

 

"Queridos vecinos de la comarca, soy propietario de un campito en El Foyel, dónde somos agredidos por gente que viene de Buenos Aires, hoy llegaron un montón de micros a querernos atropellar, a tirarnos el portón abajo, y necesitamos su apoyo. Vienen patotas, vienen barras bravas, viene sindicalismo, les agradecemos si alguno puede ayudar”, indicó un conocido productor, Pablo Puchi en uno de los audios que circuló.

 

De acuerdo a los datos entregados por los propios organizadores, hasta la zona de El Foyel llegaron 30 vehículos, muchos colectivos, transportando a unos 500 militantes listos para ingresar por el camino de Tacuifí.

 

También informaron que llevan consigo 1 tonelada de pertrechos para asegurarse un largo acampe, algo que no pudo llevar adelante Juan Grabois y los suyos que en diciembre partieron después de una noche muy fría y debido a la falta de agua y alimentos.

 

Cada año la marcha es impulsada por la Fundación Interactiva para Promover la Cultura del Agua (Fipca). Entre las organizaciones que participan, se estima que en total serán 120, figuran La Cámpora, Mesa Coordinadora por la Defensa por la Soberanía del Río Paraná, Movimiento Popular Los pines, Movimiento Socialista de los Trabajadores, Frente de Izquierda, Grupo Bolivar, Grupo por la Soberanía, entre otros.

 

El año pasado la Cámara de Apelaciones de Bariloche confirmó un fallo de 2013 para que se habilite el camino de Tacuifí, la empresa apeló al Superior Tribunal de Río Negro.

MADURO


el Cartel de los Soles y una nueva ola represiva

 

Laureano Pérez Izquierdo

 

Infobae, 31 de Enero de 2023

 

Nicolás Maduro parece haber despertado súbitamente. El sueño no le duró demasiado, pero fue profundo. Tan real que creyó poder materializarlo. Cuando por fin volvió en sí supo que había estado más cerca de ser una pesadilla. Luego, lo interpretó a su manera. Sin ayuda psicoanalítica.

 

El dictador venezolano se entusiasmó con la idea de volar fuera de su país para participar en la cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), un arma política regional del chavismo y de Cuba.

 

No visita una nación sudamericana desde hace más de cinco años. Cuando decide subir a un avión se asegura que la tierra que vaya a pisar sea lo suficientemente firme como para que le garanticen que no será detenido. Esos regímenes son, por lo general, autocracias y dictaduas: Rusia, Irán, China, Cuba, Turquía. Y algún otro con instituciones amordazadas, lábiles o cooptadas por organizaciones criminales.

 

Maduro está encerrado. Las fronteras de su país son su celda. No puede moverse fuera con la libertad que desearía. Pesan sobre él acusaciones por los delitos más aberrantes. En la Corte Penal Internacional de La Haya se lo acusa de los peores crímenes por ser la cabeza de un estado que secuestra, tortura y asesina. Por ser responsable de una maquinaria atroz que persigue a quien piensa distinto. Su régimen ha expulsado en un puñado de años a 7.100.000 venezolanos que debieron buscar refugio y una nueva vida en otras partes del mundo.

 

Pero no sólo La Haya está investigando a Maduro y sus cómplices. El jefe de estado es buscado por la DEA en los Estados Unidos, el organismo encargado de perseguir y desarticular carteles de la droga. Las pruebas para activar la captura fueron reunidas por la Fiscalía del Distrito Sur de Nueva York. El encargado es el fiscal Geoffrey Berman.

 

Berman dice que desde 1999 hasta 2020 Maduro, Diosdado Cabello y Hugo Armando Carvajal Barrios, “El Pollo”, entre otros “participaron en una conspiración narcoterrorista corrupta y violenta entre el Cartel de Los Soles y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC)”. Para el fiscal, Maduro “ayudó a dirigir y, en última instancia, a liderar el Cartel de Los Soles a medida que ganaba poder en Venezuela”. De esos tres, el que más cerca está de ser extraditado a los Estados Unidos es “El Pollo” Carvajal, quien está detenido en España a la espera de subir a un avión.

 

El Departamento de Justicia norteamericano puso un precio a su cabeza: 15 millones de dólares. El premio por aportar información que conduzca a su aprehensión está al mismo nivel que el que se puso sobre Ismael Zambada García, conocido como “El Mayo”, socio del más conocido Joaquín Guzmán Loera, “El Chapo”, quien ya fue sentenciado por narcotráfico en los Estados Unidos y terminará su vida en Florence, una prisión de máxima seguridad de Colorado.

 

Una denuncia activó las alarmas en la embajada norteamericana en Buenos Aires cuando se supo que Maduro quería aterrizar allí para participar de la CELAC. La DEA estaba avisada. El jefe de Miraflores temió ser protagonista de un proceso internacional que lo colocara frente a un juez de Nueva York. Prefirió seguir encerrado en Venezuela. Para sus fanáticos esgrimió una explicación más romántica: iba a ser víctima de un complot de la derecha neofascista. Resulta interesante: en los últimos 10 años, Maduro denunció 335 conspiraciones, un récord paranoico.

 

Fue una derrota absoluta para el sucesor de Hugo Chávez. Tanto ruido hizo su ausencia que la estadía de otro dictador en la capital argentina, Miguel Díaz-Canel, pasó casi inadvertida. Un regalo entre camaradas.

 

Pero la cancelación de su viaje se tradujo en días de furia en Venezuela. El martes 24 de enero el parlamento chavista dio media sanción a un proyecto de ley para ilegalizar a las ONG que trabajan en el país. Las acusarán de ser “agentes extranjeros”, una excusa para poder concluir sus actividades. Pero no sólo eso. Amnistía Internacional advirtió que las medidas que impulsa el régimen “incluyen revelar información sobre financiación, personal y gobernanza”, y que de concretarse se “violarían los derechos de asociación, privacidad y otros, poniendo a las ONG y a sus beneficiarios en grave riesgo de criminalización y represalias”.

 

Al día siguiente, agentes policiales irrumpieron en la casa del jefe de redacción del diario El Nacional, José Gregorio Meza. Fue interrogado por hacer su trabajo: un reportaje publicado sobre los testaferros del hijo de Nicolás Maduro, “Nicolasito”, el próspero hijo del comandante caraqueño que ama viajar por el mundo. Otros cuatro periodistas debieron dar explicaciones, también.

 

El miércoles 25, grupos de tarea de la Dirección General de Contrainteligencia Militar, la temible DGCIM, allanaron las viviendas particulares en Caracas de las diputadas opositoras Dinorah Figuera y Auristela Vásquez. Apenas 24 horas después, fue el SEBIN -el Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional- el encargado de irrumpir en la casa del dirigente opositor Luis Bustos.

 

El viernes 27 de enero, en tanto, agentes no identificados detuvieron a la defensora de derechos humanos María Fernanda Rodríguez. Fue un día después de que participara en una reunión con el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Volker Türk, quien en ese momento estaba en la capital venezolana. Durante ese encuentro 90 ONG le pidieron al austríaco mayor firmeza en el monitoreo.

 

El informe de Türk fue claro aunque diplomático: habló de torturas, de persecución política, de violaciones, de detenciones arbitrarias. También agradeció el haber sido recibido por Maduro. El Alto Comisionado -reemplazante de Michelle Bachelet- se mostró con actores sociales y dirigentes que pudieron contarle en detalle qué ocurre en Venezuela. Su presencia coincidió con una declaración dramática del nuevo arzobispo de Caracas, Baltazar Porras. “Que desaparezca todo abuso y tortura”, dijo el enviado del Papa Francisco en el país.

 

Nada indica que ese clamor eclesiástico fuera a suceder en el corto plazo. Tampoco que Maduro visite un país sin temor a ser detenido por ser señalado como el jefe del Cartel de los Soles.

SOBRE LOS DOS SIGNIFICADOS

 

 natural y sobrenatural del término Salus

 

SE Mons. Giampaolo Crepaldi

obispo de trieste

 

Observatorio Van Thuan, 31-1-2023

 

[Este es el EDITORIAL que escribió el Arzobispo Giampaolo Crepaldi para el número actual del "Boletín de la Doctrina Social de la Iglesia" dedicado a: SANAR LA SALUD. SALIDA DE LA SOCIEDAD DE PACIENTES PERMANENTES].

 

La palabra salus significa tanto salud como salvación. El primer sentido tiene un significado natural, terrenal, médico, fisiológico y psicológico, mientras que el segundo tiene un significado sobrenatural, sobrenatural y espiritual. Para la Doctrina Social de la Iglesia, los dos términos están relacionados, y mucho menos que opuestos entre sí. Basta pensar en el siguiente fragmento de la Caritas in Veritate de Benedicto XVI; "Sin la perspectiva de la vida eterna, el progreso humano en este mundo se ve privado de un respiro". (núm. 11).

La salud, en el sentido sanitario del término, ciertamente debería incluirse también en la noción de progreso humano. La relación no se trata sólo de lo que todo el mundo admite hoy, es decir, la interpenetración psicofísica de los fenómenos humanos, de cuerpo y psique en psicosomática: la admisión de este vínculo nos mantendría en el nivel terrenal de la 'salud' como cuidado de la salud, sin elevarnos a un nivel superior. En el cuidado de la salud hoy hay una nueva forma de materialismo. que reduce lo espiritual a lo psíquico que queda en algo material, degradando la identificación de lo espiritual con lo psíquico.

Por el contrario, la perspectiva de la Doctrina Social de la Iglesia respecto a la relación entre la salud en sentido asistencial y la salud en sentido espiritual remite a dos niveles de realidad, el de la naturaleza y el de la supranaturaleza. La salus que interesa en última instancia a la Iglesia es la salus animarum , en vista de la bienaventuranza eterna como fin último del hombre. Sin embargo, esta perspectiva ctiva también arroja nueva luz sobre la salus en el sentido de la atención de la salud. Así lo demuestra la historia de los esfuerzos de la Iglesia en este campo, especialmente de tantas órdenes religiosas, y la propuesta cristiana sobre el sentido de la enfermedad y el sufrimiento.

 

En nuestro tiempo, sin embargo, y mucho más en la actualidad, estas cuestiones se han vuelto más complicadas. Por un lado, la medicina ha ampliado su campo de acción, invirtiendo al conjunto de la sociedad. La medicina ya no se ocupa sólo de la enfermedad en el sentido estricto de la palabra, sino también de la prevención, la educación a ciertos estilos de vida, la corrección estética de los cuerpos, la cosmética, las prácticas a realizar en el tiempo libre y el culto al cuerpo. Hoy en día, los usuarios acuden a las farmacias para una gama de propósitos y servicios mucho más amplia que en el pasado. Por otro lado, la medicina se ha integrado plenamente en un sistema económico y político que, mientras tanto, se ha globalizado y coordinado. Esto da lugar a un verdadero "poder terapéutico" que determina la medicina y muchas veces la hace recorrer caminos por razones que no son estrictamente médicas sino económicas y políticas.

Si la sociedad en su conjunto es ahora un 'hospital' o una 'farmacia', no entendida en el sentido tradicional sino como expresión de todas las nuevas funciones sociales de la medicina, este 'hospital' no está dirigido por médicos sino por tecnócratas subordinados a los poderes reales. Es en este punto cuando el cuidado de la salud se convierte en una ideología que tiende a ser totalizadora o, en otras palabras, potencialmente totalitaria. La razón última de este cambio degenerativo es la secularización del cuidado de la salud que se ha desprendido de la salus entendida en un sentido espiritual y sobrenatural.

 

Como podemos ver, este es el resultado tan fácilmente evidente en cada ámbito de la vida social que se separa de la dimensión trascendente. En este caso es la sanidad la que se absolutiza, convirtiéndose en una nueva religión. Muchos son los signos de ello: el carácter ritualista de las prácticas sanitarias, la voluntad de hacer grandes sacrificios personales como antes se hacía por devoción religiosa, la idolatría de las vacunas, el dogmatismo con el que acatamos las normas impuestas por el poder sanitario. intermediarios, el simbolismo pseudorreligioso de actitudes como el uso indiscriminado de la mascarilla, la confianza en los nuevos 'sacerdotes' en la persona de médicos selectos sobreexpuestos por los medios de comunicación, etc.

 

Un capítulo interesante de esta conversión de la salud en un absoluto y la creación de una estructura de poder del cuidado de la salud verdaderamente omnipresente y que lo abarque todo consiste en sus relaciones con la ciencia, como señalaron hace mucho tiempo tanto pensadores ateos como Faucault como teólogos como Ivan illich. La posmodernidad ha reducido un poco el poder de la ciencia, destacando su carácter hipotético y muchas veces muy aproximado, así como la dificultad de recopilar datos objetivos como tal, condicionada como está por las políticas sanitarias, el error humano y la influencia arrolladora de las grandes industrias farmacéuticas. que financia el 90% de la investigación.

El positivismo científico ha sido completamente derrotado a nivel teórico, aunque muchos científicos y médicos, para hablar de nuestro caso, argumentarían lo contrario. La autoridad de la ciencia ahora ha sido revestida de humildad. Sin embargo, tal vez incluso más que antes, todavía somos testigos de la pretensión de utilizar a los científicos y la ciencia, la medicina y los médicos como oráculos de verdades absolutas. El cientificismo se ha vuelto político y no solo epistémico, por lo que la ciencia se utiliza para dirigir el comportamiento social, ejercer formas de control sobre los ciudadanos, apuntar a categorías no alineadas, inducir el engaño, crear miedo generalizado y apoyar una serie de narrativas públicas que tienen poco que ver. con la medicina y la ciencia, pero abundan las prosopopeyas.

 

Este número del "Boletín" examina el sistema de salud a la luz de la Doctrina Social de la Iglesia. Se critica la presunción útil al poder político de que todos estamos enfermos hasta que se demuestre lo contrario (mientras se debería pensar todo lo contrario, es decir, que todos estamos sanos hasta que se demuestre lo contrario), la advertencia sobre el peligro de "matar con medicamentos" bajo la bajo la apariencia de curar, el injerto en la sociedad de un sistema de control político basado en el miedo inducido, y el paso de experimentos de control social por razones de salud a otros ámbitos de la vida pública.

Los artículos de este número apuntan a diferentes formas de estructurar un sistema de salud más libre y responsable, aumentando la participación activa de los médicos "en la ciencia y la conciencia" y los enfermos, desenredando la medicina de sus vínculos demasiado estrechos con la economía y la política, y organizar las cosas según los principios del bien común y la subsidiariedad.

 

Por los dos significados de la palabra salus que mencioné al principio, un aspecto nada secundario es la actitud de la Iglesia en este campo. Desde este punto de vista, tiene una gloriosa historia detrás, que no debe desconocer para convertirse en parte integral del nuevo sistema de control estatal y supraestatal que considera a la medicina como un instrumento del poder político globalista que persigue la prevención social. control.

 

 

lunes, 30 de enero de 2023

BUENA NOTICIA

 

 

Alcoholizado y tirado sobre un montón de ropa: así detuvieron a Facundo Jones Huala en El Bolsón

 

Federico Etienot

 

Infobae, 30 de Enero de 2023

 

Ante la información de su presencia en la zona, la Policía de Río Negro y el Ministerio de Seguridad de la Provincia desplegaron un amplio operativo del que participaron unidades especiales y la Brigada de Investigaciones, en busca de limitar los movimientos de líder mapuche. Finalmente lograron dar con su paradero, tras el llamado de una mujer que alertó a la Policía: detectaron que estaba en el quincho de la casa particular, a la que ingresó luego de romper un vidrio, y donde se encontraba atrincherado.

 

En ese marco, fuentes de la Policía de Río Negro revelaron el estado en el que se encontraba Huala al momento de la captura: “Procedemos a revisar el lugar y observamos una persona en una habitación, tirado sobre un montón de ropa, presumiblemente dormido quien vestía una pollera de jeans hasta la rodilla y una blusa color negro con tachas doradas y una remera manga larga floreada debajo de la misma, al consultarle quien era, dijo ser JONES HUALA”.

 

Detención de Jones Huala en Río Negro

Una vez que se constató su identidad, y con la presencia del fiscal Marcos Sosa Luckman, se le realizaron chequeos médicos y el control de alcoholemia correspondiente, el cual arrojó un resultado de 1.31 g/l. A partir de allí, el gobierno provincial comenzó a articular con la Justicia Federal y con la Justicia Ordinaria los pasos procesales a seguir, teniendo en cuenta que Jones Huala se encontraba prófugo de la Justicia de Chile desde el 11 de febrero de 2022.

 

“Había rumores de personas que lo habían identificado en la zona desde hace varios meses y finalmente pudimos dar con él. Estaba en estado de ebriedad, en buena condición física, sólo, escondido y en una situación de delito común”, amplió la gobernadora Arabela Carreras a Infobae.

 

El detenido fue inmediatamente trasladado de El Bolsón a Bariloche, donde el Juzgado Federal local mantiene comunicaciones con el Juzgado de origen Chile que emitió la alerta, para que en el término de 4 horas informe si transformará la misma en alerta roja para habilitar la captura internacional y el correspondiente pedido de extradición.

 

Actualmente, Jones Huala presenta vigente una ALERTA AZUL de INTERPOL, destinada a conseguir más información sobre la identidad de una persona, su paradero o sus actividades delictivas en relación con una investigación penal.

Asimismo, en el marco de una causa provincial podría ser imputado por distintos cargos.

DROGAS


 multitudes como 'marea'

 

"El hombre es tal cuando reconoce que es un `animal inestable y frágil'''. (Dante Alighieri)

 

POR JUAN ALBERTO YARÍA

 

La Prensa, 29.01.2023

 

Jorge murió, mientras escucho los lamentos de sus padres en una consulta. Era un joven de 30 años que se sentía en la plenitud de su poder. La unión de fiestas inacabables con el alcohol y las drogas estimulantes acabaron con una vida que se desgranaba en la omnipotencia del ''a mí no me va a pasar''. Es uno de los tantos que no fue noticia periodística, pero sucedió como cientos en los fines de semana.­

 

El 'homo festivus', como hoy se llama en Europa al hombre que surge de la posmodernidad con orfandad de sentido, es un gran negocio para muchos: miles de personas entran a la diversión nocturna, hay oferta escandalosa de drogas (confesión de varios pacientes o habitués a estos locales), los tragos tienen precios siderales, las mesas en los lugares vips superan los cientos de miles de pesos, las entradas para entrar a esos lugares de diversión van de 2 mil a 4 mil pesos. Muchos caen luego del consumo 'avivado', todo esto por música a todo volumen y luces estroboscópicas (destellos breves y con distintos colores en rápida sucesión) que anulan más la conciencia. El cuerpo, la naturaleza tienen leyes. No las podemos desafiar. Dante Alighieri nos enseñaba que si reconocemos esta 'fragilidad' sobreviviremos infinitamente al cambio y a la destrucción. Lecciones olvidadas hoy en medio de 'las mareas humanas y las multitudes aglomeradas' que hacen de su fragilidad ignorada un blasón que los lleva al descenso a los 'infiernos' (en el sentido del Dante). Dio señales, pero no fueron escuchadas por sus allegados. Choques automovilísticos, sobredosis, deudas, etc. Lo permisivo triunfa hoy.­

 

El límite no es 'políticamente correcto'. Ya desde los tiempos de Hitler y Stalin había palabras que ellos llamaban 'mordaza': 'cipayos', 'burgueses', etc. Eso discriminaba y acallaba al otro. Hoy poner límites es ser 'conserva', o 'represor'. Dimisión de los padres. Tiranía de los hijos. Miedo a los hijos. Muchos no tienen padres.­

 

Las historias de hoy no contadas forman parte de la serie de sucesos que ni siquiera están en los avisos fúnebres de los diarios. El ego pudo más en él que la escucha humilde de nuestra fragilidad. La permisividad socio-familiar también.­

 

Es la multitud como 'marea' lo que se impone con un gran 'neuromarketing' que parece triunfar. Reino de individuos sacrificados en el 'altar' de su ego que imponen por el imperio de lo masivo la peor de las dictaduras desde la ignorancia y la soberbia.­

 

Epocas de Barbarie. Veda a la ley que es a la escucha del otro. La salud mental en una de sus evaluaciones se mide por la capacidad de hablar, no actuar en forma impulsiva y, fundamentalmente, escuchar. No se puede llenar de policías los lugares de diversión o de playas, ya que lo que parece fallar es la principal ley de lo humano; escuchar y cuidar la salud como primer registro que es el de cuidar la vida.­

 

La interiorización de la ley, en muchos, parece fallar. La transgresión a la ley de la escucha es lo más importante. Las consecuencias no se evalúan porque los efectos de las conductas son repudiados, elididos, burlados, transgredidos. Más allá del ego, lo otro como diferente no existe o es no-yo. Es la ceguera de los que ven lo que se impone. Este ego omnipresente y omnipotente nos condena a la peor de las fragilidades que es el encuentro con la muerte.­

 

GLOBALIDAD DEL PROBLEMA­

 

Son problemas del cual participan todas las clases sociales; desde los sectores más vulnerables hasta las clases más acomodadas. Son momentos difíciles en nuestra comunidad. Las drogas y el abuso general de sustancias se inscriben en este contexto en donde parecería que el joven no encuentra un lugar en la sociedad.­

 

La escolarización está dañada desde hace años, incluso la universitaria. El empleo formal está en crisis. El PBI es similar al de 2004 pero con 7 millones más de habitantes. Hay un 50 por ciento de niños en situación de pobreza y un 45 por ciento con problemas de acceso a la educación. A menores posibilidades de empleo se deterioran dos vectores claves: la familia y la vida escolar (interrumpida en lo vincular durante la pandemia). La educación social está resentida y la 'vida de calle' se impone ante la ausencia o déficit de los vectores institucionales que son fundamentales en el proceso formativo y educativo.­

 

En la 'vida de calle' aparecen nuevos vendedores de ilusiones que permiten por un momento recrear paraísos de ilusión, como lo es el 'dealer' con sus redes que llegan a ser más importantes que los transmisores de cultura.­

 

La ley como tal que se interioriza desde ciertos 'porta-palabras' como lo son los padres, los maestros y las figuras significativas de la comunidad se notan débil en sus efectos. A esto hay que agregar el proceso de des-familiarización creciente de nuestra sociedad.­

 

En la otra punta de la escala social el consumo de alcohol es alto (el más alto de América) y al lado de eso la marihuana esta 'normalizada'. Nuestro país es el primer consumidor de cocaína de toda América, y no nos olvidemos que la mayoría de los países de América Latina son productores de drogas o distribuidores. La Argentina es un mercado apetecible. El 'neuromarketing' de las drogas facilita que todo espacio sea vivido como un desierto con 'oasis' fabricados con ilusiones paradisíacas sin ley.­

 

La transgresión de la ley o la veda de esta representan la vuelta de la barbarie. Heidegger dirá ''cuando los mundos se evaporan''; el filósofo Hobbes, cuando ''el hombre es el lobo para el hombre''. La veda de la ley nos muestra el derrumbe del mundo y la emergencia de lo in-mundo. En nosotros hay una pasión por la veda de la ley (todo vale y el poder lo marco desde el golpe brutal) desde mi ego, como ley única.­

 

'PERIFERIZACION' DE LAS CIUDADES­

 

Las periferias se dan alrededor de las ciudades o dentro de las mismas ciudades. Son circuitos con códigos diferentes y en donde lo informal e ilegal impone leyes. Reinan otros patrones y la ley formal pacta o directamente no entra.­

 

Las ciudades de hoy no pueden ser entendidas sin estos nuevos actores; uno de ellos es el narcotráfico que opera barrio por barrio con una clientela asegurada dadas las fallas de socialización de miles.­

 

La venta al menudeo de drogas se da la mano con la gente que vive en la calle y al mismo tiempo coches lujosos surten el paisaje en donde lo triste se une a lo pomposo de las ciudades más sofisticadas. Puerto Madero al lado de sus villas laterales. Al lado de esto está lo multi-étnico y los fenómenos masivos de migración desde el interior y las poblaciones marginalizadas que proceden en algunos casos del exterior (países vecinos).­

 

Lo periférico se une con lo central de las ciudades en estos momentos de intercambio. Son dos mundos que se tocan. Dos ciudades al mismo tiempo. Por eso, el profesor García Canclini definió a la ciudad de hoy como un palimpsesto, o sea un jeroglífico en donde viven distintos lenguajes.­

 

LA CAIDA DE LOS REFERENTES DE LA LEY ­

 

Los 'dealers' se convierten en guardianes del territorio y, de esta manera, es muy difícil trabajar. A todo esto, hay que agregar la dilución del papel simbólico del médico y de todo referente de autoridad en casi todos los sectores de la sociedad. El guardapolvo blanco o la chaquetilla ya no generan el mismo respeto y significado que antes. Esta dilución del papel de este profesional es paralela a la crisis del maestro, el político, y en general de todo aquel que representaba antes una referencia ética indudable. Sus palabras ya no son tan escuchadas. E incluso la violencia es el primer mensaje ante ellos. Ya no se espera la palabra de estos representantes. ­

 

Juan Alberto Yaría

* Director general de Gradiva - Rehabilitación en adicciones

domingo, 29 de enero de 2023

LEY MICAELA


 la instrumentación de un reclamo legítimo para imponer un dogma minoritario

 

Llama la atención la convicción que tienen algunos (y algunas) de estar haciendo algo para disminuir los femicidios en el país. En realidad legisladores y funcionarios hacen cosas inútiles, porque a malos diagnósticos, malos remedios

 

Claudia Peiró

 

Infobae, 29 de Enero de 2023

 

La Ley Micaela fue la respuesta de circunstancia a un problema que los poderes públicos no logran resolver. Por eso la cifra de femicidios no ha disminuido, ni disminuirá. El remedio es equivocado porque el diagnóstico también lo es. Nuestros legisladores votan siguiendo la corriente, mientras otros lobbies aprovechan las crisis -generalmente desencadenadas por casos particularmente impactantes- para colar su ideología, en este caso, la de género, queer, no binarie o como le quieran llamar, una ideología que no fue plebiscitada, ni siquiera votada.

 

Eso no impide que el gobierno la haya convertido en dogma y, en virtud de la Ley Micaela (27499, del 10/1/2019), obligue en el mejor estilo estalinista a decenas de miles de agentes de la administración, de las fuerzas de seguridad, de los planteles de universidades, hospitales y medios oficiales- a realizar cursos cuyos contenidos están inspirados en la ideología de género.

 

La historia de cómo se llegó a esta ley revela la extensión de la hipocresía de ciertos políticos que pasaron de negar la inseguridad, promover la excarcelación de presos peligrosos y defender a jueces prevaricadores, a rasgarse las vestiduras por los femicidios y señalar al fantasmagórico patriarcado como “culpable” de esta situación.

 

Recordemos primero que Micaela García (21 años) fue secuestrada, violada y asesinada el 1° de abril de 2017 por un criminal reincidente que gozaba de libertad condicional, concedida por el juez Carlos Rossi. Varios crímenes como el de Micaela, cometidos por delincuentes sexuales beneficiados por la ley, habían tenido lugar en los años previos sin que los funcionarios de turno se sintieran interpelados. Pero Micaela García era militante del Movimiento Evita y del NiUnaMenos; el caso fue tomado como bandera. Entonces, los mismos que pocos años antes habían evitado la destitución del juez Axel López -otro liberador serial de delincuentes peligrosos- pedían ahora a gritos el juicio político de Carlos Rossi. De la indiferencia pasaron a la sobreactuación. Pero no a la eficacia.

 

El caso de Axel López fue paradigmático. En dos ocasiones concedió beneficios a presos peligrosos, contra la opinión de peritos que le advirtieron del riesgo de reincidencia, lo que efectivamente pasó. Volvieron a violar y a matar: en 2009, a Soledad Bargna, y en 2012, a Tatiana Kolodziej. Sin embargo, cuando fue enjuiciado en el Consejo de la Magistratura, fue protegido por los mismos que hoy baten el parche con las cifras de femicidio; no para buscar soluciones sino para crear estructuras inútiles, enjuiciar a todos los varones por igual y ahondar la grieta de género.

 

Lo insólito es que también el feminismo protegió a Axel López, aunque cueste creerlo. El juicio político, en 2015, coincidió con la primera convocatoria bajo el lema NiUnaMenos. pero las referentes de esa marcha que buscaba poner fin a los femicidios se negaron a respaldar el pedido de destitución del juez. Les resultó más cómodo acusar al machismo que increpar a los políticos del Consejo de la Magistratura.

 

Si Axel López hubiese sido destituido en 2015, tal vez su par de Entre Ríos Carlos Rossi lo hubiera pensado dos veces antes de liberar al asesino de Micaela García.

 

Cuando los políticos tomaron este crimen como bandera no lo hicieron para adoptar medidas eficaces contra la violencia doméstica sino para convertir en doctrina oficial y obligatoria una ideología extremista, marginal, que sostiene que el sexo no es biológico, que la distinción varón-mujer no es natural sino una construcción social; en concreto, usaron el caso para promulgar una Ley por la cual todos los agentes de la administración pública deben someterse a una capacitación cuyos contenidos apuntan a estigmatizar a un género -el masculiino-, a enjuiciar la heterosexualidad y a devaluar a la familia.

 

Basta asomarse a esos contenidos para confirmar que poco y nada tienen que ver con los verdaderos motivos por los cuales en la Argentina la violencia no se frena: la ineficacia de las fuerzas de seguridad, del ejecutivo y de los jueces. Y de los legisladores. Todos ellos son corresponsables de la desprotección estatal que pone en riesgo a las mujeres, pero no sólo a ellas, sino a todos los argentinos, inermes frente al flagelo del delito y la violencia. ¿Qué medidas se han tomado en los últimos años para agilizar los juicios, evitar la salida anticipada de criminales peligrosos, mejorar el desempeño de las fuerzas de seguridad, hacer efectivas las medidas perimetrales y supervisar con eficacia las morigeraciones de penas?

 

En cambio, se les explica a los forzados auditorios de estas “capacitaciones” que el “sexo” es una “clasificación cultural binaria” y el “género” una “contrucción social”. ¿Sabrá esta gente que desde la prehistoria la humanidad se organiza en torno a la pareja humana varón-mujer, porque parece que la biología, la distinta función reproductiva de cada uno, tuvo algo que ver? Allí está la antropología para confirmarlo.

 

Los “estereotipos de género son modelos que se imponen a través del mandato social para que se cumpla con lo establecido como natural”, dice el dogma impuesto por ley. Un ejemplo es la asociación “mujer-madre” (muy antinatural, por cierto). El sexo es “asignado al nacer” y “se aprenden los roles de género, acorde a la sociedad patriarcal heteronormativa”, (sociedad que solo existe en las cátedras de Sociales).

 

Basta ver la definición que ellos mismos dan de patriarcado para confirmar que éste no existe en la Argentina: “...un tipo de organización social en la que los varones ejercen la autoridad en todos los ámbitos…; un orden social genérico de poder, basado en un modo de dominación donde el paradigma es el hombre”; esto dicen en un país que ya tuvo dos presidentes mujeres en los últimos 50 años y en el que ninguna norma, ni ley, consagra la superioridad del varón sobre la mujer. Ninguna.

 

El patriarcado, insisten, puede ser visto “como organización y estructura sociopolítica que asegura el poder de los hombres y subordina a las mujeres” y que se “impone por la fuerza y justifica la violencia contra aquellas mujeres que desobedezcan los mandatos de género, de la familia y la sociedad patriarcal”.

 

Nos vamos acercando al nudo de la cuestión: a los varones se les enseña a “ser hombres”, lo que consiste en “ser heterosexual”, “ser proveedor: sostener a la familia”, “ser fuerte”, “ser valiente o tener coraje”, etc. Estas cosas “terribles” que se enseña a los varones surgen del “binarismo de género”, de “la clasificación del sexo y el género en dos formas distintas y complementarias de masculino y femenino”. Un horror.

 

Los cursos refuerzan la idea de que la violencia es unidireccional; por eso hablan de violencia de género y no como debería ser de violencia doméstica o familiar, para abarcar todos los conflictos que pueden darse en ese ámbito. El objetivo es estigmatizar a un sexo.

 

El curso enumera varios tipos de “violencias por motivos de género”: “física, psicológica, sexual, económica y patrimonial, doméstica, institucional, simbólica. mediática”, etc. A esto se agregó la “violencia política”, que busca “menoscabar, anular, impedir, obstaculizar o restringir la participación política de las mujeres (...) en cualquier espacio de la vida pública y política...”

 

Traducción: una legisladora puede maltratar verbalmente a un colega en el recinto, pero si éste la increpa a ella es violencia de género.

 

Se afirma que “pensar que los agresores padecen una problemática de salud mental es desconocer la responsabilidad que tienen por las violencias que ejercen”. Claro que hay agresiones y abusos basados en el machismo, como en el desprecio por la otra persona, pero negar la posible existencia de un trastorno o una perversión detrás de estas conductas es lo que lleva a los jueces abolicionistas a liberar violadores, como se liberó al asesino de Micaela García, en cuyo nombre se niega la realidad.

 

En la misma capacitación se afirma que “la mayoría de las violaciones son ejercidas por varones que las personas agredidas conocen y/o en quienes confían”. De nuevo olvidan el caso que dio origen a la ley, porque lo importante es socavar la confianza entre los sexos y estigmatizar al varón.

 

Micaela García no fue víctima de un noviazgo violento ni de una relación tóxica. No importa. Se asocia su nombre a una ley que no es inocua, porque se está utilizando una preocupación legítima de la sociedad y un reclamo más legítimo aún de las familias de las víctimas, para operar una reingeniería social y promover un credo deformante de la realidad. A lo largo de toda la capacitación, la violencia tiene una sola dirección y divide la sociedad en un colectivo de víctimas -mujeres y lgbt- y uno de victimarios: los varones, todos.

 

“La violencia de género se basa en las desigualdades de poder que existen entre varones (lugar privilegiado) y mujeres y personas LGBTIQ+, pudiéndose ubicar allí el origen de todas las violencias, basadas en la discriminación y desigualdad”, sentencian.

 

¿El binarismo es violencia? ¿Toda la violencia deriva de la clasificación femenino-masculino? ¿Las mujeres no discriminan? Se termina asumiendo el credo del lesbofeminismo, que postula que lo más seguro para una mujer es “no estar casada” (con un hombre, se entiende), y que la heterosexualidad “no es la manera natural de vivir la sexualidad” sino “una herramienta política y social” destinada a “subordinar las mujeres a los hombres”.

 

Cada vez son más los organismos que deben someterse al adoctrinamiento. La sobreactuación no cesa. Un ejemplo lo ilustra muy bien: desde el 18 de noviembre del año pasado, en la provincia del Chaco, todo ciudadano (y ciudadana) que quiera presentarse a cargos públicos está obligado, como “requisito excluyente”, a someterse a esta humillación de género.

 

¿En qué tipo de violencia se encuadraría esta imposición estatal?

 

Campaña anti-varones

Llama la atención la convicción que anima a tantos funcionarios (y funcionarias) de estar haciendo algo para disminuir los femicidios en el país, cuando es evidente que no es así (ellos mismos llevan la cuenta). O, en todo caso, hacen cosas inútiles, porque a malos diagnósticos, malos remedios. Detrás de casi cada femicidio hay una historia de desprotección, de denuncias desoídas, de lentitud judicial, de protocolos mal aplicados, etcétera. A nada de eso se le busca remedio efectivo.

 

El número de femicidios sólo es usado para amplificar el discurso andrófobo, porque aunque la ministra de las Mujeres diga que “no hay lugar para violencias de ningún tipo”, para el funcionariado feminista la violencia es de un solo tipo y es unidireccional.

 

En momentos en que un caso como el de asesinato de Fernando Báez Sosa está en el candelero, ¿qué campaña, qué medidas vimos para prevenir, disuadir, evitar, las peleas a la salida de los boliches? ¿Qué campaña vimos contra el consumo de alcohol y de drogas? Al contrario, se las promueve, se las banaliza. Se cumplieron tres años de ese hecho que entristeció a todos, y no pasa nada. Ya ha habido otros Fernandos y los seguirá habiendo.

 

En momentos en que un caso incalificable como el del pequeño Lucio Dupuy confirma lo que sabemos todos -salvo los y las feministas- que la violencia no es “de (un) género”, sino que atraviesa todas las relaciones familiares y humanas en general, el Gobierno esta enfocadísimo en lo esencial.

 

A través del Ministerio de las Mujeres ha lanzado una feroz campaña contra los “micro-machismos”, neologismo feminista que sirve para ver patriarcado hasta en la sopa. En realidad, son spots anti-varones, en los cuales éstos son presentados bajo una luz negativa; toda situación incómoda, fricción o desentendimiento en el seno de una pareja o familia es siempre y sin atenuantes culpa de los varones.

 

La campaña está unificada por el hashtag #ArgentinaSinViolencias, pero ese plural no debe confundir. La violencia es una sola, masculina. El violento es el varón; el único desagradable, chicanero, prejuicioso, discriminador, extorsionador afectivo, incumplidor de sus deberes parentales, etcétera.

 

Las detractoras del “estereotipo” mujer-madre, lo sustituyen por otros: “mujer-santa”, o “mujer-víctima”, “mujer-inimputable”, etcétera. Y su contracara: “varón-irresponsable”, “varón-desconsiderado”, “varón-discriminador”, etcétera.

 

En uno de los spots de la campaña, una parejita joven se junta a comer pizza y tomar algo, hay arrumacos -consentidos, aclaremos-, pero cuando van a pasar a mayores, ella se acuerda de que no tienen preservativos. Él dice “no importa”, ella se pone firme, él se decepciona y se lo reprocha mal. Una basurita el pibe.

 

En otro spot, situación parecida. Él se enoja porque ella no quiere tener sexo y se va.

 

En otro, un padre de familia se prepara para ir a trabajar y antes de salir le dice a ella: “¿Buscás vos los chicos en el colegio?” Ella pone cara de desagrado. Él replica, sobrador: “Dale, ¿si yo no laburo quién paga las cuentas en esta casa?” Un garca. Y encima se va diciéndole “te amo”. Extorsión afectiva a full…

 

Campaña "Argentina sin violencias"

Unos flacos juegan al fútbol en un campito. La pelota se les va y una pareja de dos varones, sentados en un banco, se la devuelven de una patada. Comentario de un jugador: “¿Viste? Hasta un marica patea mejor que vos…” Homofóbico, discriminador, prejuicioso…

 

Hétero, que ya va siendo un insulto.

 

De nuevo, sólo los hombres discriminan, sólo ellos se ponen desagradables cuando no consiguen lo que quieren, sólo ellos pasan factura por su aporte a la familia, etcétera.

 

En otro spot, se muestra una reunión de trabajo. Mientras una mujer está hablando, dos colegas se envían una foto de la dama tomada de su perfil -foto normal, nada raro- y se guiñan el ojo, cómplices… La mujer nota la distracción y se molesta. Pregunta: ¿las mujeres no comparten fotos de hombres? ¿No hablan de las características físicas de tal o cual señor?

 

Campaña "Argentina sin violencias"

Hace poco, el actor Luciano Castro, decía, al diario La Nación: “No me siento acosado, pero si yo hiciera lo que me hacen a mí, me denunciarían (...). Me tocan los abdominales, las tetas... (...) ¿Qué pasaría si yo le tocara la panza a una chica? Me comería una denuncia de cabeza”.

 

¿Micro-qué vendría a ser esto?...

 

Se niegan una binariedad para sustituirla por otra, una en la cual las mujeres no son violentas, no agreden, no matan. Es evidente que no pueden, por lo general, como un varón, matar de una piña o de una patada. Pero eso no les impide matar, mandar a matar o complotar para matar. La crónica policial está llena de casos.

 

Otro estereotipo, el de “madre-protectora” (ninguna madre maltrata, ninguna miente, ninguna hace falsas denuncias, etc), también está resquebrajado por el caso Lucio Dupuy, caso que ignoran porque no pueden cargarlo a la cuenta del machismo.

 

Pero además, ¿nunca vieron a una patota de chicas agredir a otra? Pregunten a los docentes de secundaria.

 

Todos los humanos tienen la tendencia a ser más violentos en grupo, a discriminar al diferente, a agredir para conseguir algo. Eso no se combate estigmatizando a un género, sino educando en valores, inculcando el respeto a la vida, propia y del otro.