jueves, 17 de julio de 2014

RUSIA QUIERE REABRIR UNA BASE DE ESPIONAJE EN CUBA



Como en los ríspidos años de la Guerra Fría, Rusia quiere volver a poner en funcionamiento un viejo centro de espionaje que tenía en Cuba. La medida fue acordada por el presidente Vladimir Putin durante su visita a La Habana el viernes pasado, según señaló el diario moscovita Kommersant, aunque hasta el momento el Kremlin no confirmó esas informaciones.

La base de radioescuchas “Lourdes” estaba ubicada en las afueras de la capital cubana, a unos 250 kilómetros de la costa de Estados Unidos. Rusia cerró ese centro de radares en 2000 por sus altos costos de mantenimiento. Ahora, el servicio secreto militar ruso GRU quiere volver a utilizarla en el marco de las nuevas tensiones con Washington, según el diario.

Los agentes de espionajes rusos y cubanos que operaban en la base llegaron a ser unos 3.000, un número que Moscú pretende reducir drásticamente con el desarrollo tecnológico actual.

El Gobierno de la antigua Unión Soviética construyó la base, por acuerdo con los cubanos, en 1964. El centro le permitía recoger información militar y de inteligencia en casi todo el territorio de los EE.UU. Además, la instalación servía de enlace entre de la Flota soviética en el Océano Atlántico con el centro de mando en la URSS.

Los soviéticos no pagaban por los servicios que recibían de Cuba, pero era una cuenta chica ya que el 85% de la economía cubana dependía de los rusos. Luego de las caída del campo socialista, Rusia llegó a desembolsar 200 millones al año hasta que levantó la base.

Según documentos publicados por la prensa rusa, “Lourdes” –que jugaba un papel importante en el balance estratégico entre Rusia y EE.UU.– fue cerrada en julio del 2000 a raíz de la aprobación por parte del Congreso de EE.UU. de un proyecto de Ley que prohibía la reestructuración de la deuda rusa hasta que en Cuba se cerrara el conocido centro de escuchas.

Durante la visita de Putin de la semana pasada, Moscú y La Habana firmaron una decena de acuerdos de cooperación y asociación económica. Putin se entrevistó con el presidente Raúl Castro y visitó también en su casa al histórico líder cubano Fidel Castro.

Una semana antes, el Parlamento ruso había aprobado en Moscú la condonación de una vieja deuda que Cuba tenía con la Unión Soviética por unos 35.000 millones de dólares. El texto aprobado por el Parlamento ruso prevé la quita del 90% de la deuda. Los analistas sostienen que parte del acuerdo contemplan la reutilización de la base “Lourdes”.


Clarín, 17-7-14