Por Juan Manuel de
Prada
Foro Patriótico
Manuel Belgrano, 16/11/2025
La elección de
Zohran Mamdani como alcalde de Nueva York ha servido, una vez más, para que la
prensa divulgue las más variopintas farfollas obsolescentes, tan necesarias
para mantener a las masas cretinizadas prisioneras en la jaula de las
distorsiones cognitivas. Mientras la prensa derechoide lamentaba que un
musulmán y « marxista radical » vaya a regir los destinos de la ciudad más
populosa de Estados Unidos, la prensa progre celebraba al ascenso de un ‘rojo’
que «asusta a las élites».
Me ha entrado la
risa floja leyendo tales paridas para retrasados mentales. Mamdani es un títere
más de la plutocracia, encargado de ejecutar su agenda, mientras engaña a las
masas cretinizadas con gallofas grotescas como esos «supermercados públicos»
que a la postre serán expendedurías de carne sintética y harina de cucarachas
para alimento de la plebe. En diversas ocasiones hemos citado aquellas palabras
clarividentes de Pasolini que denunciaron, hace más de cincuenta años, la
connivencia de las fuerzas de una falsa izquierda y la plutocracia capitalista.
En nuestra época este contubernio ha adquirido expresiones descaradas: Mamdani
fue el candidato más votado en el distrito financiero de Manhattan; y su
campaña fue financiada por magnates de los fondos de inversión y capital riesgo
con cantidades astronómicas, aunque no tanto como los 37 millones de dólares
con que la sufragaron las organizaciones controladas por el abuelito George
Soros y sus vástagos.
Mamdani es el último prototipo diseñado por el reinado plutocrático mundial para imponer su agenda, asegurándose la paz social que sólo los candidatos de una falsa izquierda pueden garantizar, mientras se extiende la pobreza, los sueldos pierden capacidad adquisitiva y las grandes fortunas concentran mayor riqueza (exactamente como ocurre en España bajo el mando del doctor Sánchez). Y todo ello, como también denunciaba Pasolini, mientras «se pierden los antiguos valores populares, campesinos, tradicionales, regionales»; o sea, cristianos. Pues la finalidad última del reinado plutocrático mundial no es otra sino demoler la civilización cristiana. De ahí que no tenga empacho en promover líderes musulmanes al estilo de Mamdani, como hacía lord Ivywood, el maligno aristócrata liberal que protagonizaba ‘La taberna errante’.
En la novela de
Chesterton, Ivywood veía en el islam un catalizador que facilitase, una vez
rotas todas las barreras cristianas, una síntesis fundada «sobre la evolución,
la relatividad y la expansión progresiva del pensamiento». Y esto es lo que
pretenden lograr Soros y sus vástagos con personajillos como este Mamdani, que
no es ningún rojo ni marxista radical ni parecidas zarandajas, sino el nuevo
prototipo de títere que el reinado plutocrático mundial necesita para imponer
sus designios sobre las masas cretinizadas, mientras las nutre con farfollas
ideológicas obsolescentes y las mantiene prisioneras en la jaula de las distorsiones
cognitivas.