domingo, 25 de noviembre de 2012

FRAGATA: COMPLEJO ESCENARIO JURÍDICO PARA LA ARGENTINA




POR NATASHA NIEBIESKIKWIAT

El viernes, el Tribunal Internacional del Mar ya tenía abierta en su sitio online la carpeta por ahora incompleta de su último caso: “ARA Libertad (Argentina vs Ghana)”. El jueves y viernes próximos representantes de los dos países se enfrentarán en las primeras audiencias en que las que Argentina busca la liberación inmediata de la Fragata Libertad , tras casi dos meses en el Puerto de Tema. Allí está detenida, en una inédita situación internacional, por el pedido de embargo del fondo estadounidense NML, que acogió la justicia ghanesa. Es además una situación relacionada al fallo que el miércoles emitió el juez Thomas Griesa en Nueva York para que nuestro país le pague la totalidad de su deuda a los llamados fondos buitres.

La misión oficial ante el Tribunal del Mar, opinaron todos los analistas consultados por Clarín, no es imposible pero sí compleja. Pero lo más difícil es que está llena de lagunas que el Gobierno no quiere o no puede explicar .

Una de ellas radica parte del primer pedido que realizó el Gobierno al Tribunal de Hamburgo: que expida una medida cautelar (provisoria) ante las autoridades de Ghana para que “permita incondicionalmente al buque de guerra ARA Fragata Libertad dejar el Puerto de Tema y las aguas jurisdiccionales de Ghana, y que le permita reabastecerse para que ello (la partida) ocurra” El Gobierno nunca explicó que había solicitado al juez que lleva el caso (Richard Adjei Frimpong) que declare la incompetencia de Ghana para aceptar el embargo del buque escuela pedido por NML. La información llegó recién el miércoles cuando este denegó el pedido argentino. Y a cada crítica o pregunta incómoda, desde Cristina Kirchner a sus ministros, la tilda de “antipatriota”.

Uno de aspectos sin explicar y no muy difundido es la denuncia y pedido de informes al Ejecutivo efectuado por la diputada de la UCR Elsa Alvarez, que con su colega Julio Martínez, documentó hasta con fotos el registro de la Fragata ante la Organización Marítima Internacional. “Nuestro país aceptó voluntariamente la resolución (de la Organización y la Fragata Libertad tiene asignado un número de identificación IMO 6125398) y, por lo tanto, no es un buque militar, sino un buque de servicios bajo la matrícula Q2”. Pero ante los foros internacionales y el Tribunal del Mar, la Cancillería argumentó que es buque de guerra inembargable .

Nadie explicó tampoco si sigue vigente un decreto del ex presidente Fernando De la Rúa que estableció la misión de la Fragata: “incrementar los vínculos de amistad con los países visitados y sus armadas”. Esta “distinción honorífica”, tendrá “efecto exclusivamente protocolar” y “no” conlleva asignación “de la condición de misión diplomática en los términos de la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas del año 1961” y tampoco se le extiendan “al buque o su tripulación los privilegios e inmunidades”.

Otro bache responde al artículo 292 del Tribunal. Dice que podría haber condiciones para que se libere un buque cuando así la convención del mar lo considere pero al mismo tiempo habla de que a ello se procederá una vez que el Estado que lo pide deposite “fianza razonable o garantía financiera”. Hasta ahora el Gobierno se negó a pagar los 20 millones que se les ha pedido de fianza en Ghana para liberar la Fragata.

Clarín, 25-11-12