operación
policial en Italia y preocupación en Francia
por Luis Santamaría
En estos días pasados
ha vuelto a ser noticia el consumo ritual de ayahuasca, sobre todo por los
miembros de las sectas en torno a la denominación “Santo Daime".
Ahora no se trata de
sucesos que han terminado con la muerte de los que consumen la planta
alucinógena en el continente americano, sino de la preocupación existente en
Europa en torno a este culto sincrético. Traducimos varias informaciones de
prensa gracias a la labor del equipo de voluntarios traductores de la Red Iberoamericana
de Estudio de las Sectas (RIES).
Detención en Italia
Un templo bajo la
casa. Ritos sagrados en honor del Santo Daime en el sótano, donde el “santón”
se reunía con sus fieles. Supuestamente, nada malo durante la ceremonia si el
líder de la secta no suministraba ayahuasca, una bebida de color marrón hecha
de una planta que contiene un poderoso principio alucinógeno. Éstos son los
últimos hallazgos de la brigada móvil de Ancona (Italia) después de la
detención de Gianluca Cursi, presunto líder de la comunidad -de apenas una
docena de fieles- inspirada en el ritual del Santo Daime, una “religión
sincretista” arraigada principalmente en Brasil, según cuenta Il Messaggero.
Un paquete sospechoso
había llegado por vía aérea desde Brasil al gurú de la secta. El aeropuerto
avisó a la brigada del paquete extraño que, como se descubrió más tarde,
contenía la planta de ayahuasca. Cuando los policías han llegado a la casa de
Cursi, las hojas habían sido transformadas en 15 litros de brebaje alucinógeno.
El hombre, imperturbable, explicó que la infusión se utiliza durante el rito,
ya que promueve la meditación y la lleva a los fieles a Dios. Esto fue durante
una ceremonia de oración, con cantos y bailes místicos. Sin embargo, en Italia
la ayahuasca se encuentra en la lista de drogas y se debe considerar
estupefaciente a todos los efectos. Así que el hombre fue detenido, y el
interrogatorio tuvo lugar el pasado 23 de noviembre.
Según informa Romagna
Noi, el gurú, de 46 años de edad, fue detenido en Jesi, tras ir a recoger su
paquete al aeropuerto de Ancona-Falconara. El hombre, que se autodenomina
“asesor religioso”, es ahora el foco de la investigación para determinar su
posible relación con la secta brasileña dedicada al consumo de drogas que
contienen la dimetiltriptamina, el principio activo de la ayahuasca. Este grupo
es la llamada “iglesia de Santo Daime", una práctica religiosa sincrética
fundada en los años 30 en el Estado de Acre (Amazonas). La doctrina del Santo
Daime se basa en el conocimiento de sí mismo y la unión con Dios por medio de
la investigación espiritual y el uso de drogas alucinógenas que permiten a sus
seguidores acercarse a la divinidad.
En Italia hay algunas
comunidades de Santo Daime, y la más grande se encuentra en Asís. La policía
ahora tendrá que determinar si el hombre era el jefe o participaba en algún
grupo que se basa en ese tipo de espiritualidad y en sus prácticas, tales como
beber Daime: una sustancia que, según la legislación italiana es considerada
una droga ilegal.
Francia: la situación
del turismo iniciático es grave
Agosto de 2012: un
turista norteamericano muere en América del Sur como resultado de la absorción
de la ayahuasca, una planta alucinógena. En 2011, el mismo destino para un
turista francés en el Perú, siempre en el contexto de las experiencias
chamánicas. Lo cuenta Valérie Parlan en el medio Ouest France.
Para la MIVILUDES (Misión
interministerial de vigilancia y lucha contra las derivas sectarias, organismo
gubernamental francés), la situación es grave. En su informe anual de 2010 la Misión Interministerial
alertó: “Se constata un rápido desarrollo en Occidente de propuestas inspiradas
en las tradiciones chamánicas… A veces estas experiencias tienen devastadoras
consecuencias en personas débiles y sin preparación, incluso si están sanos”.
Se constata,
entonces, una proliferación de pseudo-sanadores del denominado“neochamanismo”,
donde por un puñado de dólares se promete un contacto con el mundo de los espíritus
a los viajeros que buscan emociones fuertes. Jean-Marc Rozé, secretario general
de la Unión Nacional
de Agencias de Viajes, recomienda: “El viajero deberá asegurarse de que la
estructura que ofrece este tipo de experiencia es legal”.
Éric Grange, fundador
de la agencia Oasis, líder francés en este género de viaje espiritual e
iniciático, asegura que “la experiencia chamánica no se reduce a las plantas
alucinógenas. Pero no podemos evitar que los charlatanes hagan creer que una
sesión con una pluma en sus orejas, una noche de luna llena y un medicamento
psicotrópico logren el truco”. Por ejemplo, su agencia ofrece un viaje a México
en febrero, con la práctica de varias técnicas como baños de vapor,
meditaciones ante una calavera de cristal y vibraciones, pero sin prometer
explícitamente que se llegue al trance.
Para Olivier Chambon,
psiquiatra y defensor del chamanismo, “quien conozca la cultura de los chamanes
sabe bien que el chamanismo no es más peligroso que otras formas de
experiencias de alteración de la conciencia, como la hipnosis”. Sólo que
algunos turistas tendrían acceso instantáneo a estas experiencias, y podrían
quedar atrapados sin posibilidad de volver atrás.Corine Sombrun, bañada por
diez años en la cultura chamánica mongola, insiste: “Entender el chamanismo
requiere tiempo. No se capta en un viaje y no da igual con quién se aprende.
¡En Mongolia, en pocos años, se ha pasado de 30 chamanes a más de 300! Algunos
han descubierto el filón”.
Fuente: Ries
(30/11/12)