La Voz del Interior, 18 de julio de 2017
Por Sergio Carreras
El Laboratorio de Hemoderivados de la Universidad
Nacional de Córdoba trabaja en un proyecto a largo plazo para que Córdoba
cuente con una planta productora de aceite de cannabis que ayude a abastecer el
mercado nacional.
El director ejecutivo del laboratorio, Pascual
Fidelio, contó que ya se llevan realizadas tres reuniones en la Administración
Nacional de Medicamentos (Anmat) con 22 laboratorios públicos argentinos para avanzar con el tema, y que
en Córdoba trabajan en el proyecto con la Facultad de Ciencias Exactas.
Desde marzo, cuando Argentina aprobó la ley que
legalizó el uso medicinal del aceite de marihuana, diferentes organismos
nacionales trabajan en la reglamentación de la norma y en la búsqueda del
autoabastecimiento del producto.
En la actualidad hay unas 800 familias argentinas que,
autorizadas por Anmat, importan un tipo de aceite para que lo usen pacientes
con epilepsia refractaria. Se trata de un producto muy caro y de una importación
restringida que no contempla el uso para otras más de 40 patologías para las
cuales también se está empleando el aceite cannábico.
La idea es que el Estado argentino siembre su propia
marihuana para fabricar remedios, con participación del Instituto Nacional de
Tecnología Agropecuaria (Inta) y del Conicet, siguiendo el modelo chileno.
No será pronto
Fidelio señaló que, en este momento, Argentina está
lejos de eso y que se trata de un proyecto a largo plazo, por lo cual no deberían
generarse expectativas engañosas entre los numerosos pacientes que hoy usan el
aceite.
“Anmat –dijo Fidelio– todavía no sabe qué variedad de
cannabis se elegirá, no sabemos cómo se va a regular, el Inta todavía no sabe
producir flores de marihuana, hay que hacer muchas pruebas, investigaciones y
alcanzar los estándares para ver si esto será o no algún tipo de medicamento”.
La planta de marihuana tiene diferentes componentes
activos y, según la patología por tratar, es conveniente que tenga, por ejemplo,
más THC o más CBD.
Hoy, miles de pacientes compran el producto en
laboratorios que funcionan ilegalmente en diversos lugares del país y no
existen controles oficiales ni privados sobre la calidad de lo que están usando
realmente.
La diputada nacional por Córdoba Olga Rista (UCR),
quien participó en la discusión del tema, dijo ayer que, “por suerte, el tema
está avanzando muy rápido”. “Le pregunté por esto al jefe de Gabinete, Marcos
Peña, y me aseguró que están trabajando a full para que la reglamentación de la
ley salga en poco tiempo”.
Uruguay y Paraguay dieron un paso más. A partir de
hoy, Uruguay comenzará a vender marihuana en flor en las farmacias. Y, desde
hace pocos días, en las farmacias de Paraguay también se puede comprar, con
receta, aceite de marihuana importado.