viernes, 21 de julio de 2017

RATISBONA

¿una venganza contra Benedicto XVI por sus palabras sobre Meisner?

INFOVATICANA, 20 Julio, 2017

La coincidencia en el tiempo entre las palabras de Benedicto XVI sobre el cardenal Meisner y la publicación en todos los medios del mundo del informe sobre abusos en Ratisbona, una historia conocida hace años, enciende las alarmas de una cacería contra Benedicto XVI.

El sábado 15 de julio, en el funeral del cardenal alemán Joachim Meisner, se leyó un mensaje del Papa emérito Benedicto XVI. En su mensaje, traducido por InfoVaticana, el Papa emérito se mostraba conmovido por el hecho de que el purpurado “en este último período de su vida había aprendido a dejarse ir y a vivir con la profunda confianza de que el Señor no abandona a su Iglesia, aunque a veces parezca que está a punto de zozobrar”.


Estas palabras del Papa emérito en el funeral de uno de los cuatro firmantes de las “dubia” fueron interpretadas por algunos como una referencia a la situación actual de la Iglesia e incluso como una crítica velada al pontificado de Francisco. Interpretaciones que han sido rechazadas por el secretario personal de Benedicto XVI, el arzobispo Georg Gänswein.

“El papa emérito ha sido deliberadamente manipulado, con esa frase no se refería a nada específico, sino que hablaba de la situación de la Iglesia tanto hoy como en el pasado como un barco que no navega en aguas tranquilas”, asegura Gänswein en declaraciones recogidas por Il Giornale.

Dos días después de que se leyese el mensaje de Benedicto XVI en el funeral de Meisner, la diócesis de Ratisbona hizo público el informe final sobre los casos de malos tratos y abusos a niños del coro de la catedral en el que se afirma que “un total de 547 antiguos alumnos del coro de la catedral fueron clasificados con alta verosimilitud como víctimas de la violencia física (500) y / o violencia sexual (67)”.

La publicación de este informe puso en el punto de mira mediático al hermano del Papa emérito, Georg Ratzinger, que fue director musical del coro entre 1964 y 1994. Periódicos de todo el mundo como El País, La Tercera o Il Corriere ilustraron la noticia sobre el informe con la imagen de Benedicto XVI y su hermano, mientras medios como Aciprensa indicaban que el abogado encargado de la investigación había explicado que Georg Ratzinger “no tenía conocimiento de los abusos sexuales”.

El nombre del hermano de Benedicto XVI no es el único que ha aparecido en los medios en relación con el informe sobre malos tratos y abusos en Alemania. Quien fuera obispo de Ratisbona de 2002 a 2012, Gerhard Ludwig Müller, también ha sido acusado de no actuar con la debida diligencia para investigar estos casos.

Hace apenas unas semanas trascendió que Müller no sería renovado en su cargo de prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe. Poco después, el Vaticano anunciaba que el jesuita Luis Ladaria era el elegido para suceder a Müller al frente de Doctrina de la Fe.


El corto periodo transcurrido entre el cambio en la dirección de Doctrina de la Fe, el mensaje de Benedicto XVI y la publicación del informe de Ratisbona ha suscitado no pocos recelos. Y sin duda es una interesante coincidencia que pocos días después de que el Papa emérito envíe un mensaje que ha sido interpretado como una crítica a la actual situación de la Iglesia, su fotografía acabe ilustrando las noticias que relacionan a su hermano con un escándalo.