¿hasta cuándo?
por Malú Kikuchi
Informador Público, 25-7-18
¡Qué cansancio! Otra vez los mapuches son noticia. Y
lo seguirán siendo mientras los gobiernos, el nacional, los provinciales y
municipales, le tengan miedo a utilizar las leyes que amparan la propiedad
privada.
Habría que recordarles a los magistrados en particular
y a las Fuerzas de Seguridad, que en la Constitución Nacional, artículo 17,
dice que: “La propiedad es inviolable y ningún habitante puede ser privado de
ella, sino en virtud de sentencia fundada en ley.”
Pero… con respecto al ¿pueblo? Mapuche, no tiene
vigencia. Desde que volvió la democracia, existe una lamentable confusión entre
autoridad y autoritarismo. También entre víctimas y victimarios, teoría
Zaffaroni.
El seudo pueblo originario, aprovecha la confusión. De
un tiempo a esta parte las ocupaciones de territorios que no les pertenecen,
que tienen dueños que pagaron por ellos, son permitidas por las autoridades.
Grave error. Esto empieza a ser incontrolable, y hasta
la integridad de la nación, de seguir así, se verá comprometida. Hay que volver
al principio. Los mapuches no son un pueblo originario, son inmigrantes
araucanos.
Pueblo nómade, algunos de sus miembros cruzaron la
cordillera en tiempos de la conquista. Muy pocos y acá, no eran precolombinos.
La primera invasión real fue en 1830, con Yanketruz y unos cien capitanejos.
La Argentina ya era un país independiente. Los
invasores comenzaron el genocidio de los tehuelches, real pueblo originario. En
1834, Calfulcurá, con un ejército bien armado y numeroso, venció al ejército
nacional.
Las armas y municiones les llegaban desde Chile.
Calfulcurá se conviertió en el emperador de la pampa. Firmó en 1836 la paz Del
Pino con Rosas, que lo tuvo controlado hasta Caseros. A partir de 1852, se
desmadraron.
Invadieron el sur de Buenos Aires, Santa Fe, San Luis,
Córdoba y Mendoza. Mitre fue derrotado en 1855 en Sierra Chica por Calfulcurá.
Así siguieron, malón tras malón; en 1872, 35 malones; en 1873, Calfulcurá
perdió la batalla de San Carlos. Después, murió. Lo sucedió Namuncurá, su hijo.
Alsina y su famosa zanja. Los malones continuaron.
Namuncurá, como antes su padre, envió a Chile el ganado robado y recibió
Remingtons a cambio. En 1878, presidencia de Avellaneda, por ley del congreso
Nº 947, el General Roca fue enviado a la Campaña del Desierto, mientras Chile
estaba en guerra con Bolivia y Perú y el suministro de armas a los araucanos
era menor. Y la Patagonia dejó de ser araucana y volvió a ser Argentina.
Hoy, después de muchas ocupaciones ilegales en Neuquén
y Río Negro, luego de violentas tomas de puestos de estancias, de cortes de
ruta, de reclamos delirantes, todo ha sido permitido por las autoridades.
El año pasado después de quemar la trochita de un
emblemático tren turístico, vino el caso Maldonado. Artesano “huinca”* amigo de
los mapuches, que se ahogó en el río Chubut, mientras se acusaba a gendarmería.
Las ONG de DDHH están hermanadas con los mapuches.
A fines del 2017 ocuparon un hotel vacío en Villa
Mascardi y prácticamente toda la zona, lugar turístico y bellísimo. Con el
cuento de que es una tierra sagrada, no permiten que los “huincas” la visiten.
Ahí murió Rafael Nahuel, 22 años, de un disparo hecho
por un gendarme. Hace varios días cortaron durante 4 horas la ruta nacional 40,
en plenas vacaciones de invierno. Detuvieron el tránsito, repartieron
panfletos.
Gendarmería puso dos puestos para avisar del corte,
una ONG de DDHH puso el grito en el cielo, aduciendo que eso generaba tensión y
la tensión podía derivar en disturbios. No se impidió el corte. La autoridad no
existe.
Parques Nacionales denunció la toma del hotel, la
reacción fue el corte de ruta. La fiscalía, acompañada por FFSS, intentó hacer
una revisión ocular del hotel y los recibieron a piedrazos. La fiscal renunció
a la revisión.
El domingo 15/7/2018, en Córdoba capital, al finalizar
la misa de 11 en la iglesia del Sagrado Corazón (capuchinos), 4 mujeres
vestidas de mapuches, avanzaron hasta el altar, desplegaron una pancarta
exigiendo la libertad de Jones Huala y del machi (líder espiritual) Celestino
Córdova.
Micrófono en mano, contaron los horrores que los
españoles, ayudados por la Iglesia, habían cometido en contra de sus pueblos.
Estaba presente el ministro de seguridad de la provincia. Los feligreses las
llevaron fuera.
Ahí esperaba la policía que las trasladó a la
comisaría y después de multarlas por la contravención, las dejó ir. Jones Huala
está con prisión preventiva (en su casa), esperando si se lo extradita o no a
Chile.
La justicia chilena lo reclama por el incendio y la
muerte de los dueños de una estancia que quemaron, el responsable directo fue
Celestino Córdova, chileno, preso desde hace 5 años. Las autoridades no
responden a la justicia de Chile. Las autoridades le tienen miedo a las ONG de
DDHH, a la prensa de izquierda (casi toda), a la opinión pública manipulada por
los medios. Las autoridades permiten lo que la ley no permite.
Con autoridades temerosas de casi todo, menos del
cumplimiento de los mandatos de la Constitución Nacional, los mapuches avanzan.
La pregunta es ¿hasta dónde y hasta cuándo?