domingo, 30 de mayo de 2010

GASTARON $ 1.600 MILLONES EN LA COMPRA DE TRENES QUE NO FUNCIONAN



Por Antonio Rossi

Desde 2005, el ex presidente Néstor Kirchner prometió revertir el déficit en el transporte ferroviario que venía de los 90. Para eso, el patagónico (y luego, su esposa) hicieron que el Estado gastara 1.600 millones de pesos en la compra de 96 formaciones dobles y triples, más 536 coches de pasajeros y locomotoras, todos usados, provenientes de España y Portugal. A cinco años de esa decisión, el 70 por ciento de esos trenes no funciona y está abandonado en playones ferroviarios del conurbano y la provincia de Buenos Aires.

El Gobierno admite que no tiene ninguna solución inmediata al respecto (ver Las reparaciones ...) y algunos especialistas estiman que, en realidad, los trenes que no funcionan correctamente llegan al 90% de lo adquirido.

La reparación de esas formaciones, que está en estudio por el secretario de Transporte, Juan Pablo Schiavi, demandará -al menos- la inversión de otros $ 500 millones.

La compra de estos coches, que Kirchner presentó como “la gran solución” para los servicios urbanos de pasajeros en la región metropolitana y los trenes al interior, se hizo mediante una adquisición directa.

Fue una operación abrochada en el marco de las relaciones “Estado a Estado”, sin licitaciones que transparentaran los precios pagados.

El procesado ex secretario de Transporte, Ricardo Jaime, cerró las operaciones con una cláusula especial. Los trenes tenían que ser remodelados y arreglados en talleres locales . ¿Quiénes tienen esas instalaciones? Las empresas vinculadas a TBA (del grupo Cirigliano), Ferrovías (Emepa-Gabriel Romero) y Metrovías (del grupo Roggio). Todas firmas de aceitado diálogo con el Gobierno. No obstante, allí también surgieron fricciones con el Poder Ejecutivo.

Del total de las unidades que arribaron al pais, sólo se encuentran en funcionamiento algo menos del 30% . Están desperdigadas en las líneas Roca, Sarmiento, Belgrano Norte y Belgrano Sur. En larga distancia, las escasas unidades permanecen activas se encuentran en los servicios que presta Ferrocentral desde Retiro a Córdoba y Tucumán y los que opera Ferrobaires en los ramales bonaerenses.

La mayor parte de las locomotoras y coches permanecen inmovilizados y en estado de abondono en los talleres de Remedios de Escalada, Chascomús, San Martín y Retiro.

Falta de planificación, desacertada distribución de los equipos y problemas presupuestarios a la hora de las reparaciones se conjugaron para que la mayor parte de estos trenes importados se encuentren hoy varados en las vías.

Los trenes usados, que los españoles sacaron de circulación por antiguos y antieconómicos , fueron despachados a la Argentina en un “acuerdo de cooperación” que suscribieron en enero de 2005 los presidentes Néstor Kirchner y José Luis Rodríguez Zapatero.

El primer envío se efectuó en 2005 y consistió en 11 coches motores triples, 36 coches de pasajeros de larga distancia, 10 furgones y 10 locomotoras. Para los restantes años, el cronograma preveía la incorporación de los siguientes equipos: 2006: 100 coches de pasajeros, 25 locomotoras diesel-eléctricas, 20 trenes diesel y 10 furgones.

2007: 150 coches de pasajeros, 35 locomotoras, 25 coches eléctricos, 20 trenes diesel y 10 furgones.

2008: 40 locomotoras, 25 coches eléctricos y 20 trenes diesel.

2009: 50 coches eléctricos, 20 trenes diesel y 10 locomotoras.

En el caso de Portugal, la provisión de trenes usados arrancó en 2004 con la compra de 17 duplas autopropulsadas para la línea Belgrano Norte. Un año después se amplió a 24 trenes eléctricos de tres unidades, 6 coches motores, 39 locomotoras diesel y 60 coches de pasajeros de larga distancia.

“La mayoría de lo que se compró está en muy malas condiciones . La lista de aspectos a arreglar es interminable: desde problemas de trocha (no estaban adaptados para las vías argentinas), ruedas, ventanas, puertas, pintura y problemas de instalación eléctrica y suspensión, que son los más caros para reparar ”, señala Jorge Edelmiro, uno de los mayores especialistas en trenes del país.

“Es como haber comprado una casa vieja que nadie quiere y que encima no tiene gas, electricidad, agua, las paredes están descascaradas y no anda nada”, agrega el especialista.

En el entorno del secretario Schiavi no se hacen cargo del problema. “ Es de la gestión anterior (la de Jaime), estamos buscando la solución”, apuntan.

Pero esa misma versión no es del todo corroborada por las mismas concesionarias a las que se les entregaron los trenes comprados. A TBA, por ejemplo, le dieron 13 formaciones triples (en la jerga, las llaman “triplas”).

Hay tres que fueron cedidas listas para funcionar. Las otras 10 nunca se arreglaron.

Aunque la Comisión Nacional de Regulación del Transporte (CNRT) autorizó $ 100 millones para ese fin, “al día de la fecha, la Secretaría de Transporte no adjudicó la partida presupuestaria correspondiente”, observan en la empresa.

Clarín, 30-5-10