domingo, 28 de julio de 2024

LA OTRA CARA

 


 del intervencionismo ambientalista

 

Claudio Gianni

 

Infobae, 28 de julio de 2024

 

El cuidado del ambiente es una tarea vital, imprescindible, obligada. Pero otra cosa es aprovechar esta necesidad para complicarle la vida a la competencia que genera productos agrícolas con una eficiencia superior a la del mundo desarrollado. Por eso está muy cuestionada la disposición de la Unión Europea que prohíbe importar alimentos cuya producción contribuya supuestamente a la deforestación; la metodología pensada para alcanzar este objetivo ha despertado rechazo en buena parte del planeta.

 

Muchos productores tienen serias dificultades para cumplir estas exigencias. En casos como el de las pampas argentinas resulta ridículo, aquí no había arboles cuando el hombre empezó a cultivar y criar hacienda. Se obliga a pagar al vendedor una certificación que no tiene sentido.

 

Ahora la novedad es que los ganaderos europeos temen quedarse sin la soja necesaria para alimentar sus aves y cerdos, porque la medida comentada tiene impacto sobre la oferta de países que pueden ser ampliamente alcanzadas por esta limitación. Brasil es el principal proveedor del poroto, y la inflexibilidad de la medida plantea problemas organizativos para las plantas de fabricación de alimentos balanceados en el Viejo Continente, al tiempo que crea riesgos de interrupciones en el suministro y de aranceles más altos.

 

Los detalles de cómo se aplicará la norma aún no están claros, en particular de qué manera se certificará que la soja importada no contribuye a la deforestación, señala el sindicato francés de la industria de la nutrición animal. “La consecuencia es que “la mayoría de los importadores y proveedores han suspendido sus cotizaciones, mientras que sus clientes, los fabricantes de forrajes para animales, solo tienen información muy parcial e insuficiente sobre las cantidades disponibles”, apunta la organización.

 

Francia sigue importando más del 90% de la soja que consume para la alimentación animal, principalmente de Brasil, según una cooperativa agrícola. La misma preocupación empieza a recorrer las zonas agropecuarias de España, un gran productor de carne de cerdo.

 

Si no cumplen con las nuevas reglas, las empresas pueden ser sancionadas hasta con un 4% de su facturación o incluso se les puede prohibir el acceso al mercado, dicen desde la Federación de Productores de Semillas Oleaginosas y Proteínas de Francia. Por eso no quieren correr ningún riesgo.

 

El ambientalismo mal entendido fue objeto de rechazo por parte del ministro de Agricultura y Ganadería de Uruguay, Fernando Mattos, en el tercer Foro de Ministros de Agricultura China-CELAC. “No somos el problema que causa el cambio climático, somos las víctimas que debemos trabajar conjuntamente para que los grandes emisores tomen conciencia de cómo descarbonizar sus economías”.

 

América Latina es responsable de casi un tercio de la oferta global de alimentos y productos agropecuarios. “Las tendencias proteccionistas crecen de la mano de los aspectos geopolíticos y los problemas logísticos; las cuestiones ambientales se introducen como un nuevo factor de protección al comercio agrícola”, afirmó.

 

El ministro hizo un llamado a la complementariedad en la producción y en la lucha contra el cambio climático, y pidió enfrentar conjuntamente las tendencias proteccionistas en los foros internacionales. Destacó la importancia de evitar que las tareas impulsadas por factores ambientales, se convertirán en una excusa para dificultar el libre comercio.

 

“Nadie defiende más el tema del ambiente que los productores rurales de América Latina, quienes son grandes proveedores de alimentos al mundo y tienen una enorme incidencia en el negocio global”, expresó el funcionario. Subrayó asimismo que los países desarrollados deben asumir su responsabilidad en la descarbonización de sus economías y colaborar para mitigar los efectos del cambio climático, que impactan negativamente en el sector agropecuario.

 

Respecto de este tema, la Bolsa de Comercio de Rosario considera que entre los principales exportadores globales del Complejo Soja, la Argentina es la más expuesta a las regulaciones mencionadas. La Unión Europea (UE) es la principal importadora global de harina de soja, producto del cual Argentina es el primer exportador mundial.

 

Tanto en volumen como en valor exportado, la Argentina es el país que más orientado tiene su complejo soja al mercado de la UE. En este sentido, el 21% del volumen exportado de poroto, harina y aceite de soja en 2022 se embarcó con este destino.

 

Esta participación se encuentra por encima de los otros grandes exportadores del Complejo Soja del mundo. En este sentido, cerca del 15% del poroto, harina y aceite de soja exportados por Brasil van a la UE, una participación que desciende al 11% en el caso de Paraguay y al 7% para Estados Unidos.

 

Nuestra elevada participación en la demanda del bloque europeo se explica principalmente por las exportaciones nacionales de harina de soja. La Argentina responde por casi un tercio de las compras de este derivado por parte de la UE. El punto es que a partir de la nueva normativa, la geolocalización y la trazabilidad de la producción emergen como insumos esenciales para el acceso al mercado estratégico europeo.

 

La UE es además el principal destino de exportación del biodiesel argentino, producto actualmente excluido de las medidas europeas ligadas a la deforestación. No obstante, la norma dispone que no más allá de junio de 2025 se hará una revisión de impacto, prestando especial atención a la posible inclusión de biocarburantes.

ACUEDUCTO SANTA FE-CÓRDOBA

 

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sábado, 27 de julio de 2024

LA IGLESIA CATÓLICA DE FRANCIA

 

 deploró “las escenas de escarnio y burla al cristianismo” en la apertura de los JJOO

 

Claudia Peiró

 

Infobae, 27 Jul, 2024

 

La Conferencia de Obispos de Francia (CEF, por sus siglas en francés) emitió un comunicado en el que lamenta “las escenas de escarnio y burla al cristianismo” durante la ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos de París, a la vez que rescata “momentos de belleza, alegría, rico en emociones y universalmente saludados”. En efecto, la inauguración de los juegos combinó, a lo largo de excesivas cuatro horas, algunos momentos de belleza muy logrados -realzados por el escenario de la siempre hermosa capital francesa- con otros francamente antiestéticos e incluso chocantes en su contenido.

 

La escena que motivó el comunicado de la CEF es por otra parte absolutamente gratuita, innecesaria, nada tiene que ver con el espíritu olímpico que apunta a la concordia y a la fraternidad universal.

 

Es llamativo que, en una ceremonia pretendidamente diversa e inclusiva, y en un evento tan universal como lo son las Olimpíadas, los organizadores hayan dedicado una parte del desfile a intentar ridiculizar a una religión. Y no a cualquiera, sino a la fe de sus mayores, a la religión fundante de la nación francesa. Recordemos que Francia considera al jefe franco Clovis (Clodoveo), como su primer rey. Éste, con su conversión al catolicismo logró imponerse y unificar a diversos pueblos dando nacimiento al Reino franco y a su primera dinastía, la merovingia. Clovis tuvo por principal consejero a lo largo de todo su reinado al obispo de Reims, el futuro San Remigio.

 

A diferencia de Napoleón, que se ponía al hombro toda la historia de Francia -”De Clovis al Comité de Salvación Pública (Léase Robespierre), me siento solidario con todo”, decía-, el espíritu de buena parte de la elite francesa de los últimos tiempos pasa por la negación de sus raíces cuando no su cuestionamiento.

 

Es llamativo el entusiasmo por denigrar a la fe mayoritaria y fundante de los franceses en un país que no ha podido ponerle a una escuela el nombre de Samuel Paty, el docente decapitado por un musulman por haber supuestamente ofendido al Islam. Y el cobarde motivo es, justamente, evitar herir la susceptibilidad de los practicantes de esa fe. Casi un aval al crimen cometido.

 

Por otra parte, los organizadores de esta inauguración parecen ignorar el rol desempeñado en la concepción de los modernos juegos olímpicos por el fraile dominico Henri Louis Rémy Didon, (1840-1900), creador del lema de los JJOO: “Citius, Altius, Fortius” (“Más rápido, más alto, más fuerte”). El Barón Pierre de Coubertin, fundador de los JJOO de la era moderna, se inspiró en las enseñanzas de este director del colegio San Alberto Magno de París, cuya pasión por el deporte se combinaba con la vocación educativa y que fue uno de los primeros en subrayar la importancia de esta actividad en la formación juvenil. De él tomó la divisa de los JJOO.

 

Alguien destacó, entre los muchos comentarios que suscitó la grotesca escena, una breve nota de Ferghane Azihari, analista político y ensayista, de familia musulmana, investigador en dos destacados think tanks franceses: el Instituto de Investigaciones Económicas y Fiscales (IREF) y en el Instituto Económico Molinari. Aun reconociendo la “incuestionable proeza técnica” de la ceremonia, Azirahi apuntó contra la manía de ciertos artistas, o pretendidos artistas, de destacarse no por su obra en sí sino por la capacidad de “provocar”.

 

“Leyendo los comentarios de observadores que se deleitan por ‘haber puesto a los fachos y a los reaccionarios en PLS (impotentes)’, se entiende que para algunos el éxito de una performance artística está en función de su capacidad de asquear y no de convocar en torno a una estética universal”, escribió.

 

Azihari se preguntó por la concepción del arte que yace detrás de este “placer venenoso de burlarse del prójimo”. También señaló que son más los turistas que vienen a Francia para admirar los cuadros del Louvre que para admirar un árbol inflable en place Vendôme, en alusión a la manía de colocar objetos modernos en ruptura con la armonía estética que caracteriza a París. Y otras ciudades.

 

“No es por casualidad que, pese a las evidentes dificultades logísticas, nos esforzamos en colocar algunas infraestructuras deportivas en el corazón de nuestros más hermosos monumentos históricos”, dice Azihari, destacando el clasicismo de la belleza perdurable.

 

“La parodia de la Cena es ‘irreverente’ sólo en la medida en que distorsiona la obra inmortal de Leonardo Da Vinci. ¿Cuál de estas obras quedará en la memoria en cien años?”, pregunta.

 

De paso, señala que los ecologistas que arrojan salsa de tomate o sopa sobre las obras de arte no lo hacen por ejemplo con las de Marcel Duchamp…

 

En una gran mesa varias personas disfrazadas de modo extravagante, algunas estilo drag queens, parodiaban “La última cena”, de Leonardo Da Vinci. Una de las obras más clásicas de un tema recurrente en la pintura: la celebración de la Pascua por Jesús junto a sus discípulos, horas antes de ser entregado por Judas a las autoridades.

 

En las redes, la inclusión de esa escena grotesca y ofensiva hacia la fe católica fue duramente criticada. Inevitablemente muchos coincidieron en preguntarse qué habría pasado si la parodia hubiese tenido por blanco a otra religión, como la judía o la musulmana.

 

“La Última Cena” es una de las obras más célebres del pintor renacentista, realizada entre 1495 y 1498 en el refectorio del convento de Santa Maria delle Grazie en Milán, Italia. Durante esa cena, Jesús anuncia lo que va a suceder y el pintor refleja en el cuadro las reacciones de los discípulos, de la incredulidad a la desazón.

 

 

QUINTETO IRREVERENTE


Por Ariel Corbat 

La Prensa, 25.07.2024


El 11 de julio, los diputados nacionales de La Libertad Avanza Beltrán Benedit, Guillermo Montenegro, Alida Ferreyra, Lourdes Arrieta y María Fernanda Araujo, a quienes en lo sucesivo llamaré Quinteto Irreverente visitaron en el Penal de Ezeiza a algunos de los hombres que se encuentran privados de su libertad por causa del más alevoso prevaricato de la historia judicial argentina. No hace mucho yo también estuve en Ezeiza visitando al capitán Alfredo Astiz y otros presos políticos, que bien pueden considerarse prisioneros de guerra, oportunidad en la que pude apreciar la grande y alta dignidad con que sobrellevan la injusticia que padecen.


Como era de esperar, el kirchnerismo y el resto de la izquierda se contorsionaron en un espasmo feroz cuando trascendió la visita. Porque el punto no es la visita en sí, sino el miedo a que expongan el prevaricato sistematizado surgido a partir de la inconstitucional anulación de las leyes de Obediencia Debida y Punto Final.


Igual que el mago usa a la chica bonita para que la mano sea más rápida que la vista, Néstor Kirchner necesitaba una cortina de distracción para su proyecto totalitario de corrupción estructural, y los derechos humanos tal como los difundían minorías hiperactivas afines a las organizaciones terroristas, Montoneros y ERP principalmente, le venía de perlas para montar un show distractivo de revancha disfrazada de justicia. "Roban pero encarcelan", es la brillante síntesis formulada por Jorge Asís sobre la lógica en esa alianza entre la izquierda y el kirchnerismo.


Y así el proceso de pacificación iniciado por Carlos Ménem, que parecía estar resuelto junto con la caída del Muro de Berlín, el colapso de la URSS y el fin de la Guerra Fría pudo ser revertido por esas minorías hiperactivas operando sobre la frustración de una sociedad que tocando fondo por sucesivas crisis necesitaba desde su hipocresía cobarde dar con chivos expiatorios. Los Kirchner, que nunca se habían interesado por los derechos humanos, hicieron del odio su fortaleza.


Pero puesta a rodar la sobreactuación kirchnerista fue tan grosera que los derechos humanos en lugar de servir de telón para la corrupción se convirtieron en la corrupción misma, las madres de los terroristas comenzaron a ser vistas como “las chorras de la plaza”, y aunque desde el uso faccioso de todos los recursos del Estado se pretendía ocultarla, la estafa con los desaparecidos quedó a vista de todos más allá de la certera investigación de José D’Angelo.


Con la sociedad cobrando conciencia del engaño, los políticos y jueces cómplices del prevaricato siguen a aferrados a su pacto de impunidad desde el poder que conservan. Mucho más poder del que puede cambiar una sola elección.


CLIMA DE FIN DE EPOCA


Sin embargo, por aquello de que es posible engañar a uno todo el tiempo y a muchos mucho tiempo, pero no a todos todo el tiempo, hoy ya es evidente un clima de fin de época en la sociedad. Las urnas decidieron un Presidente, Javier Milei, que prometió el camino duro del ajuste económico y a una vicepresidente, Victoria Villarruel, que representa la defensa de las victimas del terrorismo castrista. Y en esa misma campaña electoral, la candidata presidencial del tercer espacio, Juntos por el Cambio, Patricia Bullrich prometió a los militares “salida justa” al trato “inequitativo y en ocasiones inhumano” que reciben a consecuencia de los juicios del prevaricato.


En ese devenir histórico que hace al actual contexto, es sumamente interesante lo que la visita del Quinteto Irreverente a militares presos ha dejado en evidencia.


Lo que en otro momento hubiera terminado en un linchamiento institucional, como fueron los atentados contra la representatividad del sufragio en impedir que asuman sus bancas Domingo Bussi y Luis Patti, esta vez presenta un desarrollo completamente distinto.


Así pasó diluyéndose en la indiferencia de la gente la primera oleada (que no será la última) del ataque del kirchnerismo y demás izquierdas contra los cinco diputados de La Libertad Avanza.


Queda claro pues que la gente, nosotros, la sociedad ya se hartó del relato sobre los 70's con la mentira que quiso ser consagrada como verdad dogmática de los 30.000 desaparecidos y la negación de la misma guerra que Montoneros y ERP alardeaban de haber declarado. Solamente los cómplices del prevaricato y las minorías hiperactivas, sostenidas desde sectores ideológicos afines al terrorismo castrista, pretenden hoy continuar con esas farsas de jucios.


Hay un fin de ciclo donde a la enorme mayoría de la ciudadanía no le interesa mantener a los militares presos y que, además, considera absurdo desperdiciar recursos estatales en revolver falseado un pasado ya lejano juzgando ancianos que no son una amenaza para nadie mientras tanto criminal delinque impunemente.


Por ese clima de fin de ciclo, lo que hace poco hubiera sido el fin de 5 carreras políticas, ahora las potencia. Desde que asumieron sus bancas, Beltrán Benedit, Guillermo Montenegro, Alida Ferreyra, Lourdes Arrieta y María Fernanda Araujo, nunca recibieron tanto apoyo de su base electoral como en estos días.


Borges lo sabía: el coraje siempre es mejor.


El cambio cultural es imparable. Y el Quinteto Irreverente lo demuestra.


Ariel Corbat

* Periodista. Experto en seguridad y temas militares. Editor de la página web http://plumaderecha.blogspot.com

viernes, 26 de julio de 2024

CONFERENCIA

 El Ateneo Cívico "José de San Martín" ha organizado una conferencia sobre "Finanzas públicas", a cargo de la Lic. María Rosa Marcone, que será dictada el sábado 3 de agosto, a las 10 horas. 

Se realizará en La Rioja 532, siendo la entrada libre.

jueves, 25 de julio de 2024

GUILLERMO MORENO


 reveló que el peronismo se está preparando para la caída del Gobierno de Milei

 

Por Alexis Montefiore

Tribuna de periodistas, 25/07/2024

 

Consultado por Noticias Argentinas sobre las tensiones entre Villarruel y el mileísmo, y el desmarque que la primera viene profundizando, el dirigente peronista afirmó que “es obvio” que la vicepresidenta “se tiene que preparar” ante “el fracaso (del presidente Javier) Milei”.

 

“El fracaso de Milei es evidente. Este Gobierno está terminado y por eso todo el mundo está así. Al estar terminado el Gobierno de Milei es obvio que Villarruel se tiene que preparar”, expresó Moreno.

 

No obstante, el líder del partido Principios y Valores resaltó que Villarruel “no tiene densidad” y por eso “no tiene presente”. “Ha demostrado ser una mujer que se va a destacar en futuro. Pero no tiene presente, porque no tiene densidad”, evaluó el economista.

 

Para Moreno, el recambio del gobierno, cuyo final intuye “próximo”, se decidirá en una Asamblea Legislativa, y confía en que el peronismo estará preparado para tomar la posta. “Nos estamos organizando”, ponderó el ex funcionario kirchnerista, que este jueves será anfitrión de un segundo encuentro con referentes económicos de las principales tribus del peronismo. Según aseveró, el reemplazante de Milei será “un presidente de lobby que sale de la Asamblea Legislativa”.

martes, 23 de julio de 2024

ARTISTAS LIBERTARIOS

 

Milei nombró a su ex novia de Las Primas en Desarrollo Humano y al Dipy en Cultura

 

LPO, 23-7-24

Javier Milei nombró a su ex novia Daniela Mori, cantante de Las Primas, como directora de ceremonial y protocolo de Capital Humano y también quiere que le den un cargo en Cultura a El Dipy.

 

Mori, mundialmente conocida como Daniela, La Cantante, integra desde los 80 el grupo de cumbia que saltó a la fama con hitos como Saca la Mano, Antonio y Lo Nene Con Lo Nene. Ahora estará a cargo del protocolo del traumático ministerio de Sandra Pettovello.

 

El presidente confirma con estos movimientos su debilidad por la farándula. Su nostálgica devoción por el menemismo tendría otro capítulo que fue revelado en Intrusos: Milei tiene un romance con Amalia "Yuyito" González, que lo fue a ver al Luna Park en la presentación de su libro.

 

El desembarco de artistas libertarios en el gobierno no termina ahí. El cumbiero Adrián Martínez, conocido como El Dipy, también recalará en el ministerio de Pettovello.

 

El autor de Par-Tusa y Chorro de Agua fue candidato de Milei en La Matanza y ahora podrá explotar su experiencia en el mundo de la cultura dentro de la secretaría que encabeza Leo Cifelli.

 

Cifelli tendrá que aceptar de mínima la intrusión del cumbiero porque ya se veía venir un huracán por los movimientos de Hernán Lombardi, el ex ministro de Cultura de Mauricio Macri. Cifelli, productor de teatro de calle Corrientes, está en la otra vereda de Lombardi desde que era ex jefe de gabinete del ministro larretista Ángel Pittito "Mahler".

 

Para salvarse de la voracidad de Lombardi, el secretario de Cultura se acercó de manera deliberada a Karina Milei. Casi a diario se saca una foto con Pilar Ramírez, la legisladora porteña que responde directamente a la hermana presidencial.

 

La secretaria general de la Presidencia, enfrentada a Pettovello, decidió no intervenir de manera directa en el ministerio de Capital Humano pero quiere sacarle áreas a Cultura y llevarlas bajo su órbita, en un sector que además maneje la Marca País.

 

En ese puesto quiere recalar Lombardi, como un trampolín a una candidatura a senador por la Capital en 2025. Pero la Marca País ya está en manos de Diego Sucalesca, que en 2018 protagonizó con el presidente y Karina una obra de teatro llamada "El consultorio de Milei", dirigida por Nito Artaza.

LA UNIÓN EUROPEA

 


una construcción artificial e ideológica


Stefano Fontana,

Brújula cotidiana, 22_07_2024

 

La elección de una von der Leyen 2 que desafía por completo el voto del Europarlamento saca a la luz el peligro que supone la Unión Europea: no un gobierno sino una gobernanza que se aleja de la política basada en el bien común.

 

Una evaluación completa de las elecciones europeas y de sus complejos resultados requiere que no nos detengamos en la necesaria crítica a la nueva mayoría y a la Comisión von der Leyen 2, sino que ampliemos nuestra mirada a la propia naturaleza de la Unión que se ha puesto aún más al descubierto tras los últimos acontecimientos. Todos los ingredientes de estas últimas elecciones que han dejado estupefactos a muchos europeos, declaran sin sombra de duda que la Unión es una construcción artificial que tal y como está planteada no puede durar mucho o que, como mínimo, producirá graves daños.

 

La retórica del europeísmo, la complejidad y la pesadez de las normas de procedimiento, la falta de representatividad de los votos nacionales, la influencia de personas y grupos no elegidos, el regreso a la escena europea de individuos que ya han sido rechazados en sus propios países, el desprecio por la falta de unidad cívica previa y constitutiva del momento electoral, la vacuidad de la noción de un bien común europeo, la peligrosa primacía del derecho europeo sobre el derecho nacional, la insidiosa mezcla de lo público y lo privado en la gestión administrativa y no política de la Comisión... Todos ellos son aspectos inquietantes que ha puesto al descubierto la reciente fase electoral.

 

El hecho de que tengamos un duplicado del gobierno europeo precedente, incluso más a la izquierda de lo que estaba el anterior, mientras que de las elecciones había surgido un evidente deseo de cambio (no suficiente en términos de escaños pero políticamente muy significativo), “desnuda” una vez más la propia naturaleza de la Unión y la muestra como lo que es: un artificio antinatural y una construcción ideológica.

 

En la Unión Europea no hay gobierno en el sentido político clásico de este término. Hay gobernanza, es decir, una red de actores que se van poniendo de acuerdo sobre las cosas que hay que hacer en una complejidad de relaciones que parece diseñada para desorientar.

 

Desorientar, en primer lugar, a los electores, incapaces de hacerse una idea clara de la relación de su voto con ese conglomerado de planes entrelazados. Esta gobernanza no sólo incluye actores institucionales, como los Estados miembros en sus articulaciones, o parlamentarios electos, o “expertos” nombrados por los distintos gobiernos, sino también actores privados, agentes que van por libre, técnicos de distintas especialidades, fundaciones y centros de influencia privados, grupos de presión y lobbies.

 

La Unión Europea no es un sujeto político por derecho propio porque combina el juicio político con el juicio aparentemente neutral de la “competencia”, la “experiencia” o la “técnica”. Se recurre a organismos independientes para que emitan una valoración que se considera objetiva a fin de “escapar” a los resultados electorales. En cualquier momento puede llegar un Draghi cualquiera para “entrar” en el sistema y dar las directrices, o una ramificación del Foro de Davos que presione para que continúe con el Green New Deal (o “Nuevo Acuerdo Verde”, en castellano) como instrumento fundamental de un “reseteo” general de la economía e incluso de la alimentación.

 

Los electores votan a sus candidatos, pero saben que contarán poco -como confirmó von der Leyen 2- y acabarán desapareciendo en la insignificancia dentro de esta gobernanza entrelazada de intereses públicos y privados. Por eso puede decirse que la Unión no es un sujeto político en el pleno sentido de la palabra, ya que en su gobernanza tienen mucho que decir los actores impolíticos, los llamados expertos o técnicos orientados por una ideología funcionalista y economicista.

 

Esta configuración de la gobernanza europea no debe verse como un momento de transición hacia una unificación política más clara tras la unificación de los mercados y de la moneda única, ni como algo que ha ocurrido por casualidad, sino como un proyecto deliberado de alejamiento de la política real, la que se basa en el bien común entendido de forma realista.

 

Aquí nos encontramos con otros elementos preocupantes de la naturaleza de la Unión Europea. Nadie sabe qué es el bien común europeo. Cuando los protagonistas hablan de “nuestra civilización” se refieren a pocas cosas: una libertad sin criterios y sólo bienestar material. Nada trascendente, pero tampoco nada verdaderamente humano. La gobernanza europea no contempla una unidad civil, una amistad cívica basada en valores objetivos. Utiliza conceptos abstractos y vacíos como Estado de Derecho o democracia, que significan todo y nada.

 

Para dar contenido a esta unidad cívica ausente no sólo no hay un Dios, sino que ni siquiera hay una visión de la persona humana que sea el resultado de una antropología fundamentada de forma realista. Por el contrario, las instituciones europeas adoptan una visión del hombre como algo polisémico y polivalente, como una realidad cambiante dependiente de los cambios sociales y económicos.

 

El hombre europeo debe desarraigarse y universalizarse, debe tener una naturaleza incierta y fluida, la transnacionalidad europea debe prevalecer sobre las identidades nacionales. La Unión desarrolla una verdadera reeducación y formación de masas con vistas a este tipo humano. Se promueven dimensiones post-identitarias y masificadoras en apoyo de un hombre europeo que no existe sino como abstracción construida, y todo esto se llama “europeísmo”. Ursula von der Leyen ha dicho que quería defender esta Europa del extremismo, entendiendo por “esta Europa” precisamente este europeísmo ideológico que también trata los momentos electorales como inconvenientes, porque el sistema se basa en otra cosa.

PROHIBIDO

 


 visitar a los cautivos

 

Por Carlos Bosch y Alberto Solanet *

La Prensa, 22-7-2024

 

Entre los cristianos –y también entre los que, sin serlo, son simplemente hombres y mujeres de buena voluntad- se tienen como normas de vida las llamadas obras de misericordia corporales, que son siete, a saber: visitar a los enfermos, dar de comer al hambriento, dar de beber al sediento, dar posada al peregrino, vestir al desnudo, visitar a los presos y enterrar a los difuntos.

 

Uno tiende a pensar que, más allá de que sean muchos o pocos los que las practican, no debe haber nadie en el mundo que se atreva a cuestionarlas o -peor todavía- que ose criticar a quienes las ponen por obra.

 

Pero ¡cuidado!; porque lo que sería imposible en cualquier país o lugar, en la Argentina puede hacerse plenamente real. Así nos va. Prueba de ello es que pocos días atrás seis diputados nacionales tomaron la decisión de visitar en el Penal de Ezeiza a tres cautivos condenados por los llamados delitos de lesa humanidad. Lo cual hizo que la runfla de los derecho-humanistas pusiera de inmediato el grito en el Cielo, un lugar donde precisamente parece que no les convendría meterse.

 

No vamos a reiterar ahora lo que venimos diciendo hace muchos años; esto es, que los llamados juicios de lesa humanidad constituyen una farsa y también una infamia deliberadamente planificadas, que se hicieron posibles, entre otras miserias, por el gigantesco y serial prevaricato en que incurrieron, con muy pocas excepciones, jueces y funcionarios judiciales de todas las instancias.

 

Y no vamos a hacerlo en esta oportunidad porque ahora, si cabe, se trata de algo peor, más perverso aún. Es algo que pone en evidencia procaz la horrenda catadura de estos energúmenos, profetas del odio, zafios sin remedio, que se rasgan sus finas y delicadas vestiduras ante un acto de misericordia. La reacción que ha provocado la visita a estos presos, despojados por jueces felones de todas las garantías y derechos que tienen hasta los peores criminales, muestra que a la cáfila de los derecho-humanistas les importa un ardite la verdad, el derecho, la justicia, el orden, la libertad y el bien común.

 

¡Y qué decir de mostrarse por lo menos misericordiosos!

 

Si no quieren ni siquiera misericordia para con los presos, mucho menos querrán justicia y concordia, como lo vienen demostrando hace décadas. Se advierte pues con nitidez y al mismo tiempo, tanto la vileza de esta jauría de derecho-humanistas, cuanto el trasfondo de este tan ficticio como ruin escándalo. Porque lo que han puesto en evidencia es el real significado de la llamada y cacareada política de derechos humanos. Lo que pretenden es despojarnos de nuestras creencias, de nuestra fe, de nuestras virtudes, de nuestros afectos, de la capacidad que todavía nos queda de saber distinguir entre lo bueno y lo malo y de saber ayudar y también perdonar. En fin, lo que realmente quieren y para lo cual trabajan es que dejemos de ser verdaderamente humanos; ellos quisieran convertirnos en bestias.

 

* Secretario y Presidente de la Asociación de Abogados por la Justicia y la Concordia.

lunes, 22 de julio de 2024

EL TRASNOCHADO PACTO


 de Mayo en Julio y los “apátridas” y el mar

 

César Augusto Lerena

 

STDP,  julio 21, 2024

 

La “forma apátrida” con la que la política nacional desprecia la soberanía argentina en el Atlántico Suroccidental tiene muy pocos precedentes desde la Argentina independiente que conmemoramos el pasado 9 de julio con la firma del llamado “Pacto de Mayo”, en cuyos puntos, no hay una sola línea referida a la soberanía nacional y, muy particularmente, sobre la única política de Estado, plasmada en la Disposición Transitoria Primera de la Constitución Nacional..

 

Mientras que la Declaración de Independencia de la Argentina del 9 de julio de 1816 ampliada declaró formalmente “la ruptura de los vínculos de dependencia de las Provincias Unidas del Río de la Plata con la monarquía española y con toda otra dominación extranjera”, el citado Pacto de Mayo, no refiere nada respecto a una política de recuperación de los 1,6 millones de km2 de la jurisdicción marítima argentina y los archipiélagos argentinos ocupados por el Reino Unido; tampoco tiene en cuenta la disputa de ese Reino de más 1,4 millones de km2 de la plataforma continental argentina, la Antártida y las aguas correspondientes. Mucho menos refiere nada con los buques españoles y de otras nacionales que extraen nuestros recursos en Malvinas. La Argentina, sin hipótesis de conflicto.

 

Ya sufrimos la política de Cavallo -uno de los principales referentes de este gobierno- para congraciarse con los británicos con la firma de los llamados Acuerdos de Madrid (1989/90) donde se consolidaron los permisos de pesca ilegales en Malvinas que constituyen -hasta hoy- el principal recurso económico de los isleños que, ahora da lugar a los joint venture con empresas gallegas que facilitan el acceso de los productos pesqueros a la Unión Europea sin pago de aranceles pese al Brexit.

 

El mismo Cavallo que acordaría con el Reino Unido la protección de la explotación de los recursos al este de Malvinas y las investigaciones pesqueras conjuntas en el Atlántico Sur; todos hechos que fortalecieron la posición británica en las Islas (John Barton, director de Pesca inglés en Malvinas, 2012).

 

También, el dictado de la ley 23.968 promovida por la Cancillería facilitó la delimitación de los archipiélagos ocupados por el Reino Unido, además de reducir en 1991 nuestra soberanía plena a 12 millas; aún antes de ratificar la Convención de la ONU sobre el Derecho del Mar en 1995.

 

El martes 13 de 2016 se firmaría el Pacto de Foradori-Duncan ratificatorio de los Acuerdos de Madrid bajo la consigna de “eliminar todos los obstáculos para el desarrollo de Malvinas”. Vergonzante. Aun así, la Argentina, no dejó en todos estos años, de reclamar la ocupación prepotente británica y los derechos sobre los archipiélagos invadidos; como ocurre en la actualidad.

 

Sin embargo, lo peor está por venir, porque no solo se resignan -a través de hechos aislados- derechos argentinos, sino, que bajo pretexto de una política “anarcocapitalista”, distintos “apátridas” desde el gobierno y fuera de él, llevan adelante un plan de sesión de los espacios territoriales argentinos y de enajenación de nuestros recursos naturales. En algunos casos, mediante el mero pago de algún canon desindustrializador y, en otros, por anomia geopolítica y desinterés de administrar el Estado, sus bienes patrimoniales y culturales e incluso “destruirlo desde adentro”, como manifestara el propio Milei.

 

El presidente que admira a Margaret Thatcher, la misma que ordenó el hundimiento del ARA General Belgrano y con ello provocó la muerte de 323 argentinos. La Canciller Mondino que sostiene que el tema Malvinas es una cuestión más en la relación argentina con el Reino Unido y ante el periódico inglés “The Telegraph” anuncia “los derechos de los isleños serán respetados”, dando por tierra la defensa de integridad territorial plasmada en la Constitución Nacional y termina agradeciendo, la visita del Canciller inglés David Cameron a Malvinas, como si su presencia no fuera una nueva manifestación inglesa de autoridad.

 

La política economicista monotemática es lamentable; hasta el propio presidente de la Comisión de Presupuesto de la Cámara de Diputados José Espert consideró que “Las Malvinas no son argentinas, porque las perdimos en la guerra”; ignorando, todas las Res. de la ONU; en especial la 37/9 del 9 de noviembre de 1982 que “le pidió a Argentina y al Reino Unido la reanudación de las negociaciones a fin de encontrar una solución pacífica a la disputa de Soberanía sobre dichas Islas”.

 

Igual opinión tiene la diputada Sabrina Ajmechet o, quienes consideran -como el presidente Macri- que la recuperación de las Islas significaría un déficit económico; desconociendo, que el producto bruto per cápita de Malvinas es de noventa mil dólares; cuatro veces superior al de la ciudad de Buenos Aires y 50 veces al de La Quiaca (ambas ubicadas a 1800 km de Buenos Aires); además, de la invalorable importancia geopolítica de las islas en la parte meridional del Atlántico Sur y en relación con la Antártida; el océano pacífico e índico, como ya sabían los españoles en el siglo XVIII.

 

En el gobierno no hay sustento intelectual ni convicción política alguna para cuidar nuestros derechos marítimos y mucho menos, respetar el sentimiento de los argentinos. No es posible con este marco moral esperar idénticas políticas a las sostenidas por los independentistas de 1816; razón por la cual, el Pacto de Mayo es letra muerta. El ministro español de ultramar y académico Adelardo López de Ayala (1828-1879) hubiese dicho en la oportunidad: “cuando la estafa es enorme toma nombre decente”.

 

Decenas de hechos muestran la alineación colonial de este gobierno en las cuestiones relativas al Atlántico Sur, sus archipiélagos y recursos, aunque nos limitaremos a indicar algunas para no agobiar al lector.

 

En la cumbre del MERCOSUR y con la ausencia del presidente de nuestro país, en un hecho inédito en treinta años, el gobierno argentino no reclamó la soberanía de Malvinas. Precisamente un ámbito central, donde la Argentina debería profundizar sus vínculos ante las relaciones amistosas y comerciales crecientes de los isleños en Uruguay, Chile y Brasil.

 

Pero, esto se ha transformado en una constante, porque todas las acciones militares británicas en Malvinas y de otro tipo, son ignoradas por la Cancillería argentina, como los recientes ejercicios militares de las Fuerzas de Defensa de las islas, la Royal Navy y la Real Fuerza Área británica.

 

Un debilitamiento de Argentina en los reclamos y un enfrentamiento diverso con los países que apoyan la posición argentina, que estarían demostrando la pérdida de apoyo en el Comité de Descolonización de las Naciones Unidas.

 

Días antes, la Canciller Mondino, al firmar en la ONU el “Acuerdo sobre la conservación y el uso sostenible de la diversidad biológica marina en alta mar” (BBNJ) con una ignorancia supina, se refirió a “proteger nuestras aguas” y a “ser inflexible en la defensa de nuestro territorio”. Desconociendo que se tratan de aguas internacionales donde la Argentina no tiene jurisdicción, y que de ninguna manera ese Acuerdo resuelve la pesca ilegal como manifiesta.

 

Sino que por el contrario, a la ya presencia de una flota pesquera de más de 500 buques pesqueros extranjeros, a través de la creación que prevé este Acuerdo de “organizaciones regionales de integración económica” y su incorporación por parte del Reino Unido, se le habrá dado estatus de “Estado ribereño” a los isleños ocupantes de Malvinas, contrario a lo reglado en la Disposición Transitoria Primera de la Constitución Nacional.

 

Mientras firma Acuerdos contrarios al interés nacional y en forma ignara, los pondera, tolera la pesca ilegal anual de 250 mil toneladas de recursos pesqueros en Malvinas sin aplicar la legislación argentina y la Res. 31/49 de la ONU, con un comportamiento que se tipificaría -al menos- de incumplimiento de los deberes de funcionario, ya que se trata de la pesca ilegal más importante del mundo de un Estado a otro, ignorando, lo que ya en el siglo XVIII Manuel Belgrano sabía: “un Estado sin la pesca nada puede sobre la mar”.

 

La economista-canciller desconoce que las Áreas Marinas Protegidas (AMP) que ese Acuerdo promueve; las utiliza el Reino Unido desde el 2017 para controlar los territorios de ultramar. Es el caso de Malvinas del denominado “Blue belt” donde el proyecto de AMP Bentónica “Agujero Azul” promovida por la fundación Wildlife Conservation Society (WCS) completaría el cinturón azul al NORESTE de Malvinas facilitando la llegada de los recursos pesqueros a las islas. Igual, al SUR de Malvinas con la declaración unilateral británica de “santuario ecológico” de un millón de km2 alrededor de las Islas Georgias y Sándwich; al ESTE con el citado Acuerdo de Cavallo y al NOROESTE con el GAP de 1.400 Km2 de calamares.

 

Se agrega el proyecto 1258-D-2024 del Diputado Manes que pretende que el Congreso declare AMPs por 595.000 km2, sin mencionar que el Reino Unido -como indicamos- ya declaró un AMP de 1.070.000 Km2, es decir una reducción de las áreas de captura mucho mayor que la exigida en el acuerdo de biodiversidad. Un ejemplo patético de colonización y, una asombrosa mutación de la “neurología” a “oceanografia”.

 

La macro o microeconomía no sirve para elaborar una estrategia marítima: «El 85% de la pesca a distancia en alta mar la realizan China, España, Taiwán, Japón y Corea del Sur que, del total mundial de 37 millones de horas de pesca ocupan 25 millones».

 

Motivo por el cual, el mayor daño no lo ocasionan los 216 Estados restantes, sino que lo generan solo cinco, que son los mismos que operan en el Atlántico Suroccidental y, por lo tanto, hay que trabajar sobre esos países responsables del desequilibrio de los ecosistemas, juntos capturan 26 millones de toneladas de un total 84 millones/año (2019), el 31% de las capturas sobre «221 Estados que notificaron algún tipo de actividad en el comercio pesquero» (FAO, “Estado Mundial de la Pesca y la Acuicultura”, 2020) y, agregamos: el Reino Unido, que se lleva el equivalente al 30% de nuestros desembarcos.

 

Nada de ello hace la Cancillería Argentina y no se trata solo de ineptitud -que la hay- sino una política de desmalvinización, que es la apunta del iceberg de la sumisión y dependencia nacional, con la consecuente desatención de la soberanía territorial y de los recursos naturales argentinos.

 

De otro modo, no se podría entender el proyecto de reforma de pesca en la Ley de Bases sobre la extranjerización de la explotación del mar argentino; la permanencia de un radar británico en Tierra del Fuego; la designación de los embajadores Jorge Faurie en Chile -el socio estratégico británico- y de Carlos Foradori en Ginebra, ambos responsables del Pacto Foradori – Duncan que promovía “el desarrollo de Malvinas” en poder de los isleños; la desatención de los estratégicos Puertos de Ushuaia y Río Grande, mientras que en Malvinas se licita un nuevo puerto destinado a dar logística a los buques de transporte, militares, de turismo y ciencia vinculada a la Antártida.

 

El enfrentamiento con los presidentes de nuestros tres principales compradores de pescado: Brasil, China y España y, por supuesto la pelea con todos nuestros aliados naturales que “amenazan con hacer perder en la ONU de los apoyos históricos en la Causa Malvinas” (Taglioni, Augusto, LPO, 11/7/24); la tolerancia de que empresas de Israel exploten los recursos petrolíferos en Malvinas mientras se promueve el traslado a Jerusalén de la embajada argentina, etc. a lo que hay que sumar la paralización de todas las obras estratégicas, entre ellas la etapa norte del Gasoducto NK.