Esperar es matar
por Carlos E. Viana
Informador Público, 15-2-17
“Presupongo tres tipos de pensamientos en mi, es a
saber, uno propio mío, el cual sale de mi mera libertad y querer, y otros dos
que vienen de fuera, el uno que viene del buen espíritu y el otro del malo”.
San Ignacio de Loyola, Ejercicios Espirituales.
Esperar es matar
La Comisión Episcopal de Apostolado Laico y Pastoral Familiar,
a través del Área de Niñez y Adolescencia, rechazó la propuesta del gobierno de
bajar la edad de imputabilidad de los menores de 16 a 14 años, esgrimiendo
entre otros argumentos que es una solución “inmediatista y de cortoplacismo”.
Le recordamos que en el largo plazo los niños criminales seguirán violando el
5to Mandamiento de la ley de Dios: No matar.
Deberían tener en cuenta que estamos en una emergencia
y que no se puede esperar a que el país elimine la pobreza y mejore los
institutos penales y que además es dudoso que esa sea la principal causa de la
delincuencia. ¿No será la crisis moral?
La solución que da la Comisión es: "Acompañemos a
nuestros niños y adolescentes a vivir sus etapas de crecimiento, en un contexto
familiar sano y seguro". ¿Sano y seguro… como el menor peruano que mato y
sus padres eran narcotraficantes? Todo lo que propone la Comisión significa
esperar.
Esperar significa matar, lo cual no tiene reparación
posible, esperar implica mayor sufrimiento para los futuros victimas y
familiares incluyendo los pobres, que la Comisión dice defender, pero que son
los más atacados por la inseguridad.
Delincuente en prisión no puede reincidir, como lo
están haciendo actualmente los menores asesinos.
Desde 1983 ha habido mas de 40.000 asesinatos. ¿Estas
víctimas no tenían derecho a la vida? Este problema necesita precisamente
inmediatez en el plazo más corto posible. Esto es una lógica incontestable. ¿Es
tan difícil entenderlo?
San Ignacio: Libertad y responsabilidad
Del epígrafe, vemos como San Ignacio de Loyola cree en
la libertad humana, el “libero arbitrio” y por ende en la responsabilidad que
cada hombre tiene de sus actos. Sobre esa base otros dos grandes pensadores de
la Compañía de Jesús, los padres Luis de Molina (S. XVI) y Francisco Suárez (S.
XV), defendieron la doctrina del libre albedrío, oponiéndose a la de la
predestinación de las almas de Martín Lutero. A esta última y para ser justos
solo en este sentido, se acerca el determinismo marxista, que afirma que el ser
humano no es libre, sino que esta determinado por la sociedad, es decir que las
víctimas son los culpables.
Según el determinismo social, un niño con conciencia
del bien y del mal, asesina y el no tiene ninguna responsabilidad. Aclaremos
que una cosa es el perdón cristiano y otra dejar suelto a un salvaje que va a
volver a matar. Esto es falta de amor por el prójimo.
Para la comisión el gran
mensaje de Jesús “ama a tu prójimo como a ti mismo”, ha sido superada por la
teología de la liberación, elaborada en su momento en las oficinas de la KGB y
que hizo pecar mortalmente apoyando asesinatos a padres como Mujica o
Angelelli.
La pobreza estigmatizada
La comisión episcopal aclaro que se estigmatiza a los
pobres como "sinónimos de delincuencia", con lo cual la Comisión mete
a todos los pobres y a los asesinos en la misma bolsa. La mayoría de los pobres
son honestos, pero la responsabilidad de un asesino no es social, como ya
fundamentamos, sino su decisión individual de matar. La condición social puede
ser una atenuante, pero nunca un justificativo. Con esta posición es la
Comisión quien está estigmatizando a los pobres.
Crisis espiritual
Aclaran los miembros de la comisión, que hay una “corresponsabilidad
de todos los sectores de la sociedad" y en esto tienen en parte razón
porque ellos que deberían estar a la vanguardia de la defensa del 5to
Mandamiento, están favoreciendo inconscientemente su violación.
Argentina vive una profunda crisis moral con bases
espirituales que ha sido y es el principal factor de pobreza y delincuencia.
La Iglesia fue creada por Cristo para evangelizar y
salvar almas. “No sólo de pan vive el hombre”, expresó el Salvador, lo cual no
quiere decir que no debamos afrontar la superación de la pobreza.
Pero precisamente se le ha robado a los pobres y la
Comisión no reaccionó contra esto. Tanto Milagro Sala como Hebe de Bonafini
están acusadas de robarles a los pobres ¿Por qué entonces si se está con los
pobres se las apoya? Robarles a los pobres fue una innovación del kirchnerismo.
Con lo que se robó y despilfarró en estos últimos doce años se podría haber
superado la pobreza. ¿Por qué no se condenó este hecho aberrante?
En definitiva, ¿la Comisión tiene una preocupación por
los pobres o una intención ideológica?
Nos queda una gran esperanza. Parece que una parte de
la Iglesia no está con Argentina, pero Dios sí.