domingo, 17 de enero de 2010

EL EMPLEO PÚBLICO CRECIÓ MÁS DEL 40 % EN LOS ÚLTIMOS SIETE AÑOS



Ismael Bermúdez

Por el crecimiento del Estado, el pase de beneficiarios de los planes sociales al plantel de personal tanto de Planta Transitoria como Permanente, la regularización de los contratados y, en menor medida, la estatización de empresas y las AFJP, el empleo público creció en los últimos siete años el 43,2%. Son 940.000 personas más que en 2002, según los datos que maneja FIEL (Fundación de Investigaciones Económicas Latinoamericanas).

En total, el sector público emplea ahora a 3.125.000 personas contra las 2.182.868 que tenía contratadas en 2002.

"La mayor contribución a este crecimiento corresponde a las provincias, que son responsables de casi dos tercios del empleo público total, seguido por el incremento en municipios", sostiene Juan Luis Bour, de FIEL.

Las provincias son responsables de las áreas de Educación y Salud que antes estaban en la órbita del gobierno federal. De los 940.000 nuevos puestos públicos, 665.000 son provinciales.

Bour precisa que esta suba del empleo público "tuvo su mayor aceleración en los municipios en 2007 y 2008, mientras que en las provincias la mayor expansión fue en la primera mitad de 2008 y, nuevamente, a fines de 2009.

En empresas públicas se registran saltos a partir de 2004, con la reestatización de empresas, en particular el Correo Argentino y Aerolíneas Argentinas. También incidió la eliminación, a fines de 2008, de las AFJP ya que más de 5.000 empleados de esas administradoras fueron absorbidos por el Estado, fundamentalmente con el pase a la AFIP y a la ANSeS.

Estos datos se ven corroborados por las cifras de la Seguridad Social, que marcan que -entre el primer trimestre de 2006 y el tercero de 2009 (menos de 4 años)- los puestos de trabajo en las provincias que transfirieron sus Cajas al sistema nacional crecieron un 38,3% y en los municipios se incrementaron el 22,9%. Estas cifras no incluyen las más numerosas, como la provincia de Buenos Aires, Córdoba y Santa Fe.

Bour agrega que mientras en la segunda mitad de los 90, el empleo público era responsable del 16,8% del empleo total, ahora alcanza al 21,2%, "nivel que todavía es inferior al máximo -22,9%- de fines de los 80".

El Estudio de FIEL señala que si hubiera crecido a una tasa similar a la expansión de la población, el empleo público debería contar con 2.639.600 personas, casi medio millón menos, pero en ese caso "la desocupación se ubicaría en el 15,7%, es decir 4,8 puntos por encima del nivel del 2009".

Por ejemplo, "en las provincias de Tierra del Fuego, Catamarca, Neuquén y Santa Cruz, el crecimiento del empleo público por encima del crecimiento poblacional contribuyó a reducir el desempleo en más de 5 puntos". Bour enfatiza que "en algunas provincias el empleo público contribuyó a reducir sustancialmente la tasa de desocupación".

Con estos números, FIEL asegura que las provincias de Santa Cruz y Tierra del Fuego tienen la mayor proporción de empleos públicos con relación a la población: "más de 11 de cada 100 habitantes trabajan en el sector público provincial, mientras que la menor proporción se encuentra en Córdoba, donde sólo 3,4 de cada 100 habitantes trabaja en el sector público". Y agrega que "Córdoba, Santa Fe y Buenos Aires son las provincias con menor empleo público relativo", con menos de 4 empleados públicos cada 100 habitantes.

En proporción al total de ocupados, Catamarca encabeza el ránking con el 25%, seguido de Tierra del Fuego y Formosa. En la otra punta, con menos de la mitad, se ubican Buenos Ares, Santa Fe y Córdoba.

El Secretario de Empleo del Ministerio de Trabajo, Enrique Deibe, le dijo a Clarín que hubo un proceso de crecimiento normal del Estado, al que en los últimos años se agregó un reclamo muy generalizado: la regularización del empleo público, "blanqueando" personal contratado que figuraba como "locador de servicios" o monotributista, pero que en la realidad se desempeñaba como personal en relación de dependencia.

También a niveles provinciales y municipales se regularizó la situación de miles de beneficiarios de planes sociales que realizaban "contraprestaciones laborales", en especial en hospitales y escuelas. Y se incorporó gente en organismos de control e inspección que fueron desmantelados en los 90.

Si se compara con la experiencia internacional, FIEL señala que la dispersión es grande: mientras en Noruega y Suecia el sector público contiene más del 28% del empleo total, en Japón y Corea el sector público absorbe menos del 6% de los ocupados.

Clarín, 17-1-10