viernes, 23 de julio de 2010

MAFIA

La ´Ndrangheta 2.0, la mafia que crece en las sombras
Elisabetta Piqué

Bares, pizzerías, discotecas, restaurantes, garajes y empresas de construcción utilizadas como instrumento para inflar los precios de las licitaciones. Actividades cotidianas, insospechables, locales y compañías en apariencia normales.

Todo esto tenía en sus manos la ?Ndrangheta 2.0., es decir, la última versión de la mafia calabresa salida a la luz hace unos días en la operación más imponente de todos los tiempos contra la organización criminal más poderosa y sanguinaria del país, y una de las más fuertes del mundo.

El operativo dejó al desnudo que tiene una estructura similar a la de la Cosa Nostra -no horizontal, como en otros tiempos, sino piramidal, con un patriarca en la cúspide- y que ha "colonizado" virtualmente la rica zona de la Lombardía (región del Norte, cuya capital es Milán, que tiene el PBI más alto de Europa). Pero la revelación más inquietante sobre la nueva ?Ndrangheta es la de su capacidad de penetración en actividades normales, un factor que ha descolocado a las fuerzas del orden.

En el gran blitz coordinado una semana atrás por la policía de Reggio Calabria y Milán después de años de investigaciones y escuchas telefónicas, quedaron incautados bienes por un valor de 60 millones de euros.

Si bien estos 60 millones de euros en propiedades inmobiliarias, empresas, dinero y terrenos no significan demasiado en la próspera economía lombarda, reflejan a las claras cuál es el circuito del dinero de la temible ?Ndrangheta. Demuestra cómo la mafia calabresa -que mueve un volumen de negocios estimado en 56.000 millones de euros- recicla todo ese río de dinero que gana con el tráfico de drogas -su principal negocio- en actividades aparentemente normales: pizzerías, locales nocturnos, restaurantes, etcétera.

Imagen formalmente limpia
Así, gracias a empresarios y políticos complacientes -entre las más de 300 personas arrestadas cayeron insospechables funcionarios, médicos, managers y hasta miembros de las fuerzas del orden-, la "nueva peste" ofrece una imagen formalmente limpia.

Ya no se trata solamente de una red criminal, sino de un verdadero sistema de poder que entra en relación con otros poderes (económicos, políticos, empresariales), según destacan los expertos.

"Uno de los puntos fuertes de la ?Ndrangheta fue y sigue siendo su capacidad de actuar y crecer en las sombras. Sin listas de homicidios clamorosos, como sucede con la Cosa Nostra siciliana, sino con una estrategia de no visibilidad", explica Giuseppe Pignatone, fiscal de Reggio Calabria, capital de la región de Calabria, cuna de la ?Ndrangheta, una mafia antigua, con más de 100 años de historia sobre sus espaldas.

"Los clanes trabajan para crear la menor alarma posible hacia afuera, pero después uno cae en la cuenta de que el fenómeno es de una peligrosidad excepcional como en Calabria, o que puede contar con números importantes como en Lombardía, donde hay 500 afiliados", agrega.

También en el Norte
Si bien para Pignatone resulta normal que en Calabria, al Sur, por motivos históricos y culturales casi nadie llegue a denunciar a la ?Ndrangheta, resulta "inquietante" que en el más próspero e instruido norte haya pasado algo muy parecido.

"Es un eufemismo definir de no colaborativa la actitud de los operadores económicos de Lombardía: hubo una virtual ausencia de denuncias y fueron poquísimas las víctimas que hicieron declaraciones útiles para las investigaciones", destaca.

Para Francesco Forgione, ex presidente de la Comisión Parlamentaria Antimafia y autor de Mafia export, un libro que reconstruye la presencia de las mafias italianas en el planeta, todo esta situación se debe a una difusa actitud "minimalista, negacionista y autoabsolutoria".

"[Una actitud muy] útil para fingir no saber que, cuando en territorios diversos y lejanos de los que tienen una tradicional presencia mafiosa, llega el dinero de las mafias, llegan también los mafiosos, sus lógicas criminales y de muerte, sus chantajes, su violencia, su poder de condicionamiento sobre la sociedad", afirma.

"No sería pensable esta fuerza económica de las mafias, la capacidad de invertir en la economía legal, las adquisiciones en sectores de restaurantes, de bares -como, por ejemplo, el legendario Café de París de la Via Veneto, en Roma-, de crecimiento de grandes centros comerciales, sin la connivencia de un estrato burgués de escribanos, contadores, profesionales, inmobiliaristas", explica.

"Esta es la otra cara de las mafias. Por un lado, las mafias necesitan un control casi obsesivo de su territorio, pero, por otro, para proyectarse en una dimensión global, económica y financiera también necesitan un pedazo de burguesía. Por lo tanto, por un lado la coppola y la lupara , pero por otro el maletín, la computadora, la dimensión global".

Por eso, a Forgione no lo sorprende para nada que los tentáculos de la mafia calabresa, bautizada ?Ndrangheta 2.0., hayan penetrado en bares, pizzerías, discotecas, restaurantes, actividades y empresas en apariencia normales.



La Nación, 20-7-10