Alberto Buela (*)
Gioja, el rey del cáncer, por la
contaminación de las aguas del río Jachal en San Juan por la minera
judeo-canadiense Barrit Gold, y ahora presidente del Partido Justicialista, nos
viene a enterar que el PJ ha hecho migas con el PCC, el partido comunista
chino.
Las diferencias entre el peronismo y el
comunismo chino son abismales. No existen puntos de contacto más allá de las
simpatías personales. Cuando el despistado filósofo Carlos Astrada fue a
visitar a Mao (circa 1968) y le dijo que él era maoísta, Mao le contestó, que
si él fuera argentino sería peronista.
Cuando fueron autoridades del PJ Cafiero,
Duhalde, Menem o Kirchner siempre pretendieron adscribirnos a algunas de las
internacionales políticas: a la socialdemócrata, a la socialcristiana, a la
liberal o al socialismo del siglo XXI. Y siempre fracasaron. ¿Y saben por qué?
Porque el peronismo es otra cosa distinta de todas ellas pues posee rasgos
ideológicos particulares y propios. El un movimiento más comunitario que
estatal y otorga poder a las organizaciones intermedias entre el individuo y el
Estado; privilegia la justicia distributiva y tiene al pueblo como sujeto
política principal. Estos tres rasgos , entre otros que podríamos mencionar, lo
distancian infinitamente del Partido Comunista Chino que es estatista,
totalitario y tiene al pueblo como
sujeto manipulable.
Es una irresponsabilidad ideológica la de Gioja
hacer migas entre el Pj y el PCC. No solo por la desnaturalización del
peronismo sino porque alienta la confusión política de los compañeros.
Cuando en este momento la principal tarea del
PJ tendría que ser el marcar las diferencias entre peronismo y kirchnerismo
para evitar el embaucamiento, sobre todo de los jóvenes militantes a los que le
vendieron gato por liebre.
