que refiere al fracaso de la legalización de
la marihuana.
Todo el campo, Mar
10, 2023
Desde hace años la
sociedad uruguaya debate sobre la pertinencia de legalizar el consumo de
drogas, particularmente una que se supone es menos dañina, la marihuana, como
forma de controlar su distribución. Sin embargo los resultados no han sido en
el sentido de quienes impulsan esa media ya que todo indica que aumenta el
consumo y no reduce los mercados ilegales, además de que disminuye la
percepción del riesgo de consumirla.
El último “Informe
de la Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes para 2022”, (*)
un documento de más de 150 páginas al que accedió Todo El Campo señala que la
legalización de la marihuana no redujo, allí donde se aprobó, el consumo de
drogas ni los mercados ilícitos.
El documento sobre
drogas, publicado este jueves 9 de marzo, se elabora anualmente por la Junta
Internacional de Fiscalización de Estupefacientes (JIFE), un organismo
independiente y cuasi judicial constituido por expertos en la materia.
En el texto se
expresa preocupación por la expansión de la industria del cannabis, que
comercializa los productos a base de esa sustancia de una forma que atrae a la
juventud y le resta importancia a los daños que puede causar el consumo del
cannabis de potencia elevada.
Entrevistado por
Noticias ONU, el vicepresidente segundo de JIFE, César Arce Ríos, expresó:
“Vemos con preocupación la trivialización con respecto al uso no médico del
cannabis, la tendencia a su legalización, principalmente en Latinoamérica y
parte de Europa”.
Destacó que
legalizar drogas con fines recreativos contraviene la Convención Única de
Estupefacientes de 1961, en su artículo cuarto, que clasifica al cannabis como
una sustancia altamente adictiva y prohíbe todo uso no médico o científico.
La legalización
“parece dar lugar a un incremento del consumo, sobre todo en la juventud”. Arce
explica por qué se utiliza la palabra ‘parece’ que relativizaría la
contundencia del análisis. Dijo que se usa ese término porque “no tenemos datos
oficiales, tenemos datos oficiosos de países donde hay legalización y la información
no es congruente”.
Explicó esa
incongruencia: “Por ejemplo, tomamos los datos de un país que informa que se ha
estancado o ha disminuido el consumo, pero por el otro lado hay mucha venta e
importación de cannabis, es decir, no coinciden los datos. Y, por otro lado,
tenemos informes de ONG que indican que el consumo ha crecido. Por eso usamos
la palabra ‘parece’, hasta tanto no tengamos un informe oficial y congruente de
los países, no queremos afirmar que el consumo ha aumentado”.
No obstante, los
datos extraoficiales muestran que en las jurisdicciones donde se ha legalizado,
el consumo de marihuana ha aumentado entre 9% y 15% con respecto a los lugares
donde su uso lúdico sigue prohibido.
El informe de la
JIFE destaca que los mercados ilegales de marihuana siguen activos en las
jurisdicciones donde se ha legalizado el consumo, pese a que la legalización
apostaba a desarticularlos. Según los datos disponibles representan el 40 % en
Canadá, casi el 50 % en Uruguay y el 75 % en California.
Esos mercados
prevalecen porque venden a precios más baratos y un producto con mayor
contenido de THC, que es el componente psicoactivo del cannabis.
El estudio
sostiene que el incremento del consumo y de la potencia de algunos productos
del cannabis está trayendo consigo efectos negativos para la salud y comporta
riesgos sanitarios para las personas de todas las edades, y añade que entre
2000 y 2018 las admisiones relacionadas con la dependencia y la abstinencia esa
droga se multiplicó por ocho a nivel mundial, mientras que las admisiones
debidas a trastornos psicóticos relacionados con la marihuana se
cuadruplicaron.
NO SE HAN
ALCANZADO LOS OBJETIVOS.
El vicepresidente
de la JIFE insistió en que la legalización del cannabis no ha cumplido con lo
que se proponía: “El objetivo era disminuir o eliminar el crimen organizado
que se dedica a la venta de cannabis y no se ha logrado, inclusive ha crecido
en algunos países. También se pretendía tener un mercado regulado y controlado
para que el cannabis no llegara a los menores, y tampoco se ha cumplido”.
Respecto a
Latinoamérica, donde el principal problema es el consumo de pasta básica de
cocaína, Arce dijo que “podemos considerar que es una epidemia”, y añadió que
es popular porque es barata y muy adictiva, pero también “muy nociva”.
Uruguay, donde se
legalizó la marihuana con el argumento de sacarle mercado al narcotráfico, es
uno de los países que se fracasó, dijo Arce.