POR ANA BARON
Esta vez no hubo
postergación. El FMI emitió una declaración de censura contra la Argentina por la falta
de credibilidad de sus estadísticas. El comunicado en que el Fondo anunció su
decisión menciona concretamente el índice de Precios al Consumidor del Gran
Buenos Aires y la medición del PBI. Habla de la necesidad de alinearlos con los
estándares internacionales. Y de que son “inexactos”.
El directorio del
Fondo decidió castigar a la
Argentina con una moción de censura en base al duro y crítico
informe que les presento en diciembre la directora gerente Christine Lagarde.
Una fuente del FMI dijo a Clarín que en ese informe Lagarde hizo una detallada
descripción de la falta de progresos realizados por el Gobierno en la
instrumentación de las medidas acordadas con los técnicos del Fondos para,
entre otras cosas, elaborar un nuevo índice de precios. Cabe recordar que la
presidenta Cristina Kirchner aceptó que dos misiones del Fondo viajen a la Argentina en 2011
justamente para brindar asesoramiento sobre el tema.
Cumpliendo con las
reglas previstas en el artículo 8 de la Carta Orgánica del
FMI para sancionar a los países que no cumplen con la obligación de presentar
regularmente estadísticas fidedignas, Lagarde recomendó entonces la declaración
de censura.
Brasil fue el mejor
aliado que tuvo Argentina en sus intentos por obtener una nueva postergación.
Pero cuando EE.UU. y Europa en general se declararon a favor de la declaración
de censura fue imposible pararla. “El argumento que prevaleció es que lo que
estaba en juego era la credibilidad del Fondo” dijo la misma fuente del FMI.
Es la primera vez que
un organismo financiero internacional de peso formula a un país una moción de
censura por la mala calidad de sus estadísticas. La medida alimenta la mala
imagen que tiene la
Argentina en Washington y favorece la posición de los fondos
buitres en las cortes de Nueva York, donde han venido afirmando que es un país
que no cumple con sus obligaciones internacionales.
También puede dar
lugar a una serie de nuevos juicio de quienes tiene bonos ligados a la
inflación. Pero eso no es todo. La declaración de censura del FMI deja muy mal
parada a la Argentina
en el seno del G-20.
Cabe recordar que un
senador estadounidense Richard Lugar y dos diarios, el Washington Post y el
Wall Street Journal ya pidieron que nuestro país sea suspendido del G-20 por no
pagar su deudas y no actuar de buen fe a nivel internacional.
La declaración de
censura es de hecho el primer paso formal del proceso previsto por el FMI para
sancionar gradualmente a un país cuando manipula sus estadísticas. Ese proceso
culmina con la expulsión del país en cuestión del organismo De acuerdo al
comunicado ayer, la
Argentina tiene ahora hasta el 29 de setiembre próximo para
“adoptar la medidas correctivas para resolver el problema de la inexactitud del
CPI-GBA y el PBI, sin mas postergaciones. De acuerdo al planteo estos dos
índices deben alinearse con los estándares estadísticos internacionales y con
las guías para asegurar mediciones exactas. Los miembros del directorio le
pidieron a la Lagarde
que les vuelva a informar sobre el estado de las estadísticas argentinas antes
del 13 de noviembre próximo.
Si la Argentina no concreta
progresos, Lagarde estaría en condiciones entonces de recomendar que se le
niegue a la Argentina
el acceso a los créditos del fondo.
A partir de ese
momento comienza la cuenta regresiva. Si el país persiste en su incumplimiento
durante seis meses el Fondo podría retirarle su derecho al voto y al año puede
expulsarla del organismo.
Clarín, 2-2-13