Nicasio Villa
Rodríguez
Yo Influyo, 19 Agosto
2014
Al referirse a las
agresiones del autollamado “Estado Islámico de Irak y el Levante” (ISIS) contra
las minorías cristianas en Irak y las bombas estadounidenses, el Papa Francisco
dijo que, ¨en estos casos, en los que
hay una agresión injusta, sólo puedo decir que es lícito ´detener´ al agresor
injusto”.
La paz para medio
oriente
Pero aclaró de
inmediato que, el cómo detener a ese agresor injusto, no lo debe decidir una
sola nación, sino que debe discutirse en el seno de la Organización de las
Naciones Unidas.
Luego de su viaje
apostólico a Corea, el Papa Francisco concedió la habitual rueda de prensa en
el avión de regreso de regreso al Vaticano. Durante una hora, el Pontífice
respondió a las 15 preguntas de los 72 periodistas que le acompañaban en el
vuelo.
He aquí algunas de
ellas:
2) La agresión del
ISIS contra las minorías cristianas en Irak y las bombas estadounidenses
En estos casos, en
los que hay una agresión injusta, sólo puedo decir que es lícito «detener» al
agresor injusto. Subrayo el verbo «detener», no digo bombardear, hacer la
guerra, sino detenerlo. Los medios con los que se puede detener deberán ser
evaluados. Detener al agresor injusto es lícito. Pero debemos tener memoria:
cuántas veces bajo este pretexto de detener al agresor injusto las potencias se
han adueñado de los pueblos y han hecho la guerra de conquista. Una sola nación
no puede juzgar cómo se detiene a un agresor injusto. Después de la Segunda Guerra
Mundial nació la idea de las Naciones Unidas, es allí en donde se debe discutir
y decir: ‘¿Hay un agresor injusto? Parece que sí. Entonces, ¿cómo lo
detenemos?’. Sólo esto, nada más. En segundo lugar, las minorías. Gracias por
haber usado esta palabra. Porque a mí me hablan de cristianos, los que sufren,
los mártires. Y sí, hay muchos mártires. Pero aquí hay hombres y mujeres,
minorías religiosas, no son todos cristianos, y todos son iguales frente a
Dios. Detener al agresor injusto es un derecho que la humanidad tiene, pero
también es un derecho que tiene el agresor de ser detenido, para que no haga
mal.
3) La posibilidad de
una visita a Irak, en la zona de conflicto
Estoy dispuesto a ir
a Irak y creo poder decirlo: cuando con mis colaboradores supimos la noticia de
esta situación, de las minorías religiosas, y también en aquel momento que
Kurdistán no podía recibir a tanta gente, pensamos muchas cosas. Lo primero fue
escribir el comunicado que hizo el padre Federico Lombardi. Después este
comunicado fue enviado a todas las nunciaturas para que fuera transmitido a los
gobiernos. Después escribimos al Secretario General de las Naciones Unidas y
decidimos mandar un enviado personal, el cardenal Filoni. Al final, dijimos
que, si era necesario después del viaje a Corea, podía ir allí; era una de las
posibilidades. ¡Estoy dispuesto! En este momento no es lo mejor, pero estoy
dispuesto a ello.
4) Las relaciones
entre la Santa Sede
y China; la posibilidad de un viaje papal
Cuando, a la ida,
estábamos por volar a través del espacio aéreo chino, fui a la cabina y uno de
los pilotos me mostró un registro y me explicó que solo faltaban diez minutos
para entrar al espacio aéreo chino y que teníamos que pedir la autorización
(una cosa normal que hay que hacer siempre con cada país) y sentí cómo pedían
la autorización y cómo respondían; fui testigo de ese momento. El piloto dijo:
ahora parte el telegrama, no sé cómo haya hecho, pero lo hizo. Después me
despedí de los pilotos y volví a sentarme y recé tanto, por ese hermoso pueblo
chino: un pueblo sabio. Pienso en todos los grandes sabios chinos, pienso en la
historia de ciencia, de sabiduría… También nosotros los jesuitas tenemos
nuestra historia allí, con Matteo Ricci… ¿Que si quiero ir a China? ¡Pero
claro! ¡Mañana! Nosotros respetamos al pueblo chino. La Iglesia pidió solamente la
libertad para su ministerio, para su trabajo. Ninguna otra condición. Y luego
no hay que olvidar la carta fundamental para el problema chino, la que envió a
los chinos Papa Benedicto XVI. Esa carta hoy sigue siendo actual. Hace bien
volver a leerla. La Santa
Sede siempre ha estado abierta a los contactos, siempre,
porque tiene un verdadero afecto por el pueblo chino.
15) ¿La oración por
la paz con Mahmoud Abbas y Peres fue un fracaso?
La oración por la paz
no fue absolutamente ningún fracaso. Estos dos hombres son hombres de paz, son
hombres que creen en Dios y que han vivido muchas cosas feas, muchas cosas
feas, y están convencidos de que la única vía para resolver los problemas es la
de la negociación, del diálogo, de la paz. ¿Fue un fracaso? Yo creo que la
puerta está abierta. La paz es un don de Dios, que se merece nuestro trabajo,
pero es un don. Y hay que decir a toda la humanidad que la mesa de la
negociación es importante, pero también lo es la de la oración. Pero esto es
coyuntural. Ese encuentro no era una coyuntura; es un paso fundamental de la
actitud humana, una oración. Ahora, el humo de las bombas y de las guerras no
dejan ver esa puerta, pero la puerta permaneció allí, abierta, desde aquel
momento. Creo en Dios, creo en el Señor, esa puerta está abierta, y pidamos que
nos ayude.
Las víctimas de la
guerra
Hoy nosotros vivimos
en un mundo en guerra, ¡por todas partes! Alguien me decía: ‘Sabe usted, padre,
que estamos en la tercera guerra mundial, pero en pedacitos, en capítulos’. Es
un mundo en guerra en donde se hacen estas crueldades. Una vez se hablaba sobre
la guerra convencional, ahora ya no cuenta. No digo que las guerras
convencionales sean algo bueno, no. Pero hoy va la bomba y mata al inocente con
el culpable, al niño con la mujer, con la madre, mata a todos. Pero,
detengámonos a pensar un poco a nivel de crueldad, ¿a dónde hemos llegado? Esto
debería espantarnos. No es para dar miedo. El nivel de crueldad de la humanidad
en este momento espanta un poco.
La tortura
Hoy la tortura es uno
de los medios casi ordinarios en los comportamientos de los servicios de
inteligencia y en algunos procesos judiciales. Y la tortura es un pecado en
contra de la humanidad, un delito de lesa humanidad. Digo a los católicos:
torturar a una persona es pecado mortal, es pecado grave. Pero es mucho más: es
un pecado contra la humanidad. La crueldad y la tortura. Me gustaría mucho que
ustedes, en sus medios, hicieran una reflexión sobre cuál es hoy el nivel de
crueldad de la humanidad, y sobre lo que piensan sobre la tortura. Creo que nos
haría bien a todos nosotros reflexionar sobre esto.
Otros temas
Abordando su relación
con Benedicto XVI, Francisco ratificó que "tenemos una relación
normal". Y añadió que cree que "el Papa emérito sigue siendo una
institución, porque nuestra vida se alarga y a una cierta edad ya no se tiene
la capacidad para gobernar bien, porque el cuerpo se cansa… La salud tal vez
sea buena, pero ya no se tiene la capacidad de sacar adelante todos los
problemas de un gobierno como el de la Iglesia ". Y si él, Francisco, sintiera que
no puede seguir, aseguró que "haría lo mismo".
Sobre los viajes previstos
para el 2015, dijo que es seguro su viaje a Filadelfia, para el Encuentro
Mundial de las Familias, al que se podría agregar Nueva York y Washington. En
tanto que sus viajes a México y España son probables, pero no seguros aún.
Sobre el proceso de
beatificación del Arzobispo de San Salvador, Monseñor Oscar Arnulfo Romero
("para mí Romero es un hombre de Dios"), el Papa explicó que “está
desbloqueado”; la causa estaba bloqueada, se decía por prudencia, en la Congregación de la Doctrina de la Fe. Ahora está
desbloqueada y pasó a la
Congregación para la
Causa de los Santos y sigue el camino normal de un proceso,
depende de cómo se muevan los postuladores.
Con información de
Vatican Insider, News.va y AICA