Por Héctor GIULIANO
(3.3.2015).
La presidenta
Cristina Fernández de Kirchner (CFK) comenzó su extenso discurso del 1.3 ante
el Congreso con una serie de afirmaciones que son tan inexactas como
temerarias.
Una enfática frase
suya sintetiza claramente su planteo: “Señoras y señores legisladores,
compatriotas: hemos desendeudado definitivamente a la República Argentina.”
El objeto de este
trabajo – complementario de “¿Quién pagará la Deuda K ?” (28.2) - es
analizar los dichos de la presidenta en su discurso y demostrar su falta de
veracidad y/o su formulación engañosa en materia de Deuda Pública.
Según los datos del
Ministerio de Economía (MECON) – última información disponible al 30.6.14 – la Deuda Pública del
Estado Central era entonces de 210.800 MD (Millones de Dólares): 198.900 de
Deuda Performing y 11.900 MD de Holdouts (siempre en números con redondeo).
El gobierno Kirchner,
en sus 12 años de gestión, dice haber pagado 190.000 MD.
En el mismo período
el stock de la Deuda
aumentó en unos 100.000 MD: era de 150.000 MD en 2003 y ahora sería del orden
de los 240-250.000 MD.
A este último total
se llega sumando a los 210.800 MD declarados como Deuda los cupones PBI
(10-15.000 MD) - que son deuda en firme aunque no registrada como tal - y otro
tanto por diferencial de reclamos de los Holdouts (estimados entre 20-30.000 MD
contra los 12.000 del MECON); agregándole además las nuevas colocaciones que se
habrían realizado hasta la fecha y que rondarían otros 10.000 MD.
Ésta es Deuda por
Capital, a la que debe sumársele los Intereses a Pagar que - también según
cifras oficiales - es de 77.200 MD (en valores en dólares constantes del
período 2014-2089).
Ello daría así un
monto de Deuda Total actualmente superior a los 300.000 MD.
No se consideran aquí
las proyecciones de ajuste por indexación de la deuda en pesos actualizada por
inflación, que hoy equivale a 21.000 MD (y que está incluida en los totales
citados).
Estos datos están
tomados del MECON y pueden comprobarse en los tres Anexos que se adjuntan al
presente trabajo, que son cuadros editados en su página web por la Oficina Nacional
de Crédito Público (ONCP) de la
Secretaría de Finanzas (SF) del Ministerio y corresponden respectivamente
a la Deuda del
Estado Central, la Deuda
complementaria de los Holdouts y el Perfil de Vencimientos de la Deuda Pública por
Capital e Intereses.
Cabe observar que
estos números del MECON son siempre inferiores a los aprobados en los Presupuestos
anuales, de modo que los importes reales finales de endeudamiento estarían por
encima de las cifras citadas.
LOS DICHOS DE LA PRESIDENTA.
En el discurso CFK
hay aseveraciones presidenciales muy cuestionables o directamente engañosas:
a) DEUDA/PBI.
El gobierno aduce que
la Deuda
equivale a un 43 % del PBI y que está en descenso, pero la tendencia a la baja
ya no es cierta y, fundamentalmente, cualquiera sea su valor este indicador es
discutible desde el punto de vista de su significación financiera:
- Primero, porque compara dos
magnitudes de naturaleza diferente: un numerador que es un cifra financiera
cierta contra un denominador que es un dato económico estimado.
- Segundo, porque el cálculo del ratio
se hace en base a un total de deuda incompleto debido a que no incluye la Deuda no Registrada
(básicamente cupones PBI, Intereses a Pagar y Holdouts).
- Tercero, porque si la comparación se
hace contra el PBI, que es una cifra nacional, el numerador de la Deuda también tiene que
corresponder a la Deuda
Pública Nacional y no sólo a la del Estado Central.
El PBI considerado
como referencia al 30.6 pasado era de unos 465.000 MD y la Deuda tomada en cuenta para
el cálculo era sólo de los 199.000 MD de Deuda Performing, sin Deuda no
Registrada ni mucho menos Deuda Nacional.
El uso y abuso de la
referencia a un índice Deuda/PBI así manipulado constituye una práctica
engañosa sobre la naturaleza y magnitud de la Deuda Pública
Argentina.
b) PAGOS DE DEUDA.
La presidenta dijo:
“Luego de haber
pagado deuda expresada en millones de dólares, en pesos, desde el 2003 al 2014,
92.676 millones de pesos, más 112.346 millones de dólares que hemos pagado de
deuda que no había sido contraída por ninguno de nuestros dos gobiernos, deuda
externa y deuda interna.”
La presidenta vuelve
aquí a sus conocidas manifestaciones – discursos de Setiembre pasado y conexos
– acerca de montos extraordinarios de pago que el gobierno habría efectuado a
los Acreedores, aunque su gobierno no ha suministrado información desagregada alguna
sobre los mismos.
Se supone que estos
pagos constituirían el total abonado por concepto de servicios de Capital e
Intereses de la Deuda
con Terceros – Organismos Financieros Internacionales (FMI, Banco Mundial y
BID) y Acreedores Privados – pero – repetimos - el MECON no ha dado noticias al
respecto.
Estos pagos récord de
la administración Kirchner, sin embargo, no han disminuido el stock de la Deuda.
Lo que la presidenta
omite decir aquí es que toda esta masa de pagos no ha significado una reducción
del endeudamiento porque los mismos fueron realizados íntegramente con nuevas
deudas – básicamente con Deuda intra-Estado – pasándole así el fardo de una
deuda impagable al propio Sector Público y, por ende, al Pueblo Argentino.
Y esto es exactamente
lo contrario de lo que dice el discurso CFK.
Un párrafo específico
agrava todavía más esta afrenta a la verdad y a la lógica de la acción del
gobierno CFK:
“Ya nunca más
gobiernos que tengan que tomar deuda para pagar deuda – agregando - si nos
endeudamos que sea para obras de infraestructura, para proyectos de crecimiento
del país, para que puedan disfrutar los argentinos, pero no para ganancia del
sector financiero internacional.”
Esta frase completa
merece un comentario aparte.
c) CRÉDITOS PARA INFRAESTRUCTURA.
Siguiendo la lógica
del Partido de la Deuda ,
según la cual nuestro país carece de Ahorro Interno y debe apelar
“necesariamente” al Ahorro Externo - que vendría a través de Inversiones
Extranjeras Directas (IED) y Préstamos del Exterior - la presidenta introduce
aquí una variante de razonamiento: ya no es que la Argentina se
“des-endeuda” sino que está tomando nueva Deuda Externa.
La variante en el
discurso consistiría entonces en que ahora el endeudamiento para Obras Públicas
e Infraestructura sería económicamente útil o productivo y no para contraer
deudas financieras.
Sin embargo, este
planteo presenta falencias prácticas muy serias:
1. Que la toma de nueva Deuda Externa –
cualquiera sea su destino – no elimina la enorme masa de deuda financiera
existente sino que pasa a coexistir con ella aumentándola y, por consiguiente,
a cargar adicionalmente sus efectos al Déficit Fiscal y al desequilibrio de la Balanza de Pagos.
2. Que – como pasa también con toda la
deuda financiera actual – tampoco se conoce la demostración de la capacidad de
repago de estos nuevos préstamos considerados productivos (que, de hecho, los
van a tener que pagar los futuros gobiernos).
3. Que la “necesidad” del financiamiento
externo que ahora se invoca como justificativo de la toma de nueva deuda
externa se habría obviado o sustancialmente reducido si el gobierno K no
hubiera permitido la salida de 90.000 MD del país durante los últimos años, si
no hubiera efectuado los pagos extraordinarios por 200.000 MD que dice haber
efectuado durante la “década ganada” y si no hubiera decidido contratar afuera
la mayor parte de las obras y equipos que pudieran fabricarse en el país con
costo en pesos y no con financiación en moneda extranjera (como ocurre con los
acuerdos con China sobre locomotoras y vagones, barcazas, obras de riego y la
mayor parte de las obras civiles de las represas hidroeléctricas).
Este último punto es
particularmente gravoso dado que las licitaciones y/o contrataciones directas
que se están realizando vienen directamente atadas a las condiciones de
financiamiento y no a las ofertas económicas (como el caso, ya citado, de las
represas de Santa Cruz).
Es decir, que la toma
de decisiones en materia de Obras Públicas y de Infraestructura se subordina
así a las posibilidades de la nueva Deuda Externa tomada para financiarlas.
Así sí la Deuda se convierte en
“necesaria”: primero se crean las condiciones de pérdida masiva de divisas y
luego se ponderan los préstamos externos que vienen a cubrirlas.
d) VENCIMIENTOS 2015.
Con respecto a los
vencimientos de la Deuda
Pública que caen durante el corriente año la presidenta dijo:
“Para tranquilidad de
todos los argentinos digo, y de quien le toque presidir el país, a partir del
próximo 10 de diciembre, quiero decirles que la deuda que van a tener en el año
2015, la última que vamos a tener que pagar en esta gestión es de 10.796; 9.132
millones en moneda extranjera porque vence el BODEN 15 y 1.664 en moneda
nacional. En el 2016 la cosa cambia diametralmente, de 9.000 millones pasamos a
2.564 millones de dólares y apenas 1.126 en moneda nacional. En el 2017 en
moneda extranjera, porque vence el último gran vencimiento, que igualmente es
inferior al BODEN 15, el BONAR 10, 8.596 millones de dólares y 1.900 millones
de pesos moneda nacional. Ya después 2018, 1.782 millones de dólares; 2019
2.361 millones de dólares y cada vez menos hasta el 2033.
Según el Presupuesto
2015 y el último Informe de Deuda Pública del MECON (con datos al 30.6.14) las
cosas son un poco diferentes:
- El presupuesto aprobado por el
Congreso dice que este año los vencimientos de Capital (Amortizaciones de
Deuda) son 506.900 M$, equivalentes a 53.600 MD (al tipo de cambio 9.45 $/US$)
y no los 10.800 MD que menciona la presidenta.
- El 68 % de la Deuda Pública
Performing – sin los 12.000 MD de Holdouts - está en Moneda Extranjera.
- Aplicando este porcentaje promedio a
los vencimientos del 2015 eso da que unos 36.500 MD corresponderían a Moneda
Extranjera y no los 9.100 MD que dice la presidenta.
- A su vez, el Cuadro A.3.6 del Informe
de Deuda del MECON – a diferencia de lo dicho por la presidenta y de lo
previsto en el Presupuesto – da, en cambio, que los vencimientos de Capital
para el 2015 son de 26.100 MD.
- La Deuda intra-Estado constituye el 58 % de la Deuda Performing
(115.000 MD) y las Deudas con Terceros son: el 27 % con Acreedores Privados
(54.200 MD) y el 15 % con Organismos Financieros/Bilaterales (29.600 MD).
- Cuando CFK dice que este año se van a
pagar 10.800 MD de Deuda se supone que se refiere a la parte de los
vencimientos de Capital que se van a pagar este año sólo a Acreedores Privados,
dando por descontado que la totalidad de los vencimientos de la Deuda intra-Estado y
Organismos Financieros Internacionales no se paga sino que se refinancia.
- Pero ocurre que los vencimientos de la Deuda con Acreedores
Privados tampoco se pagan saldando la deuda en forma neta sino que se pagan con
nuevas deudas ya que, como dijimos, el gobierno refinancia y seguirá
refinanciando obligaciones vía novaciones con tenedores de títulos y/o con más
Deuda intra-Estado.
- Y además el Presupuesto 2015
contempla un aumento del stock de la
Deuda de 17.700 MD este año, producto de los 53.600 MD de
vencimientos contra 71.300 MD de nuevo Endeudamiento Público previsto.
- La cosa es mucho más grave todavía
porque – como ya hemos explicado otras veces – la Ley de Presupuesto 2015
autoriza la toma de nueva Deuda Pública este año por un total de hasta 133.600
MD: 46.100 MD por Operaciones de Crédito Público, 50.300 MD por Operaciones de
Crédito Adicionales y 37.200 MD por Operaciones de Crédito Pluri-anuales.
Por ende, las cifras
dadas por la presidenta difieren notablemente de los datos del Presupuesto 2015
y de los propios Informes del MECON en lo tocante al corriente año.
Para el 2016 la
presidenta dijo que los vencimientos serían de unos 3.700 MD – 2.600 en dólares
y 1.100 en pesos – pero el Informe del MECON habla de 17.300 MD en total.
Para el 2017, CFK
dice que los vencimientos serán de 10.500 MD – 8.600 más 1.900 – mientras que
el MECON dice que son 14.700.
Y para el 2018-2019,
CFK dice que los vencimientos serán de
1.800 y 2.400 MD respectivamente mientras que el MECON consigna 10.200 y
9.900 MD.
Tampoco son
decrecientes los vencimientos de capital de los años siguientes, que
oficialmente se mantienen en el orden de los 10.000 MD anuales.
Es presumible que la
presidenta está partiendo aquí de la base que toda la Deuda intra-Estado no se
paga (ANSES, BCRA, BNA y resto de Organismos Nacionales prestamistas al Tesoro)
y que los desembolsos a los Organismos Financieros Internacionales se compensan
todos con nuevas Deudas, con lo que la exposición se reduciría sólo a lo que
habría que pagar a Acreedores Privados.
Pero de la estructura
o desagregado de vencimientos de la planilla del MECON de Perfil de
Vencimientos (A.3.6) no surge tal cosa (caso Títulos Públicos, por ejemplo), de
lo que se deduce que la presidenta está suministrando datos que no tienen
respaldo técnico conocido ni coincidencia con los Informes de Deuda ni con las
cifras aprobadas por el Presupuesto 2015.
Por último, cabe
hacer una observación que nunca se menciona pero que es fundamental: los
importes del cuadro de vencimientos del MECON están todos registrados según la
fecha de corte 30.6.14 con el falso supuesto de pago y extinción de las
obligaciones a su vencimiento - como si las deudas se cancelaran efectivamente
y desaparecieran entonces del cuadro - pero ello no es cierto porque tales
vencimientos se renuevan en su totalidad y además se toma más deuda.
En consecuencia, la
falacia de tal Perfil de Vencimientos es que parte del supuesto no verdadero de
que las deudas se pagan y que, por lo tanto, las proyecciones de servicios son
decrecientes hasta agotar el saldo actual, en el 2089.
Pero esto es completamente
falso porque las deudas se refinancian en forma permanente y total; y porque
además se sigue tomando más deuda y se prevé aumentar sustancialmente el
endeudamiento (como lo prueba – según lo vimos - la propia Ley de Presupuesto
2015).
e) RESERVAS BCRA.
Como complemento de
las anteriores, las inexactitudes presidenciales se extendieron también a la
situación del BCRA:
“las reservas del
Banco Central – dijo CFK - después de nueve corridas financieras, dos
efectuadas durante la gestión del presidente Kirchner y siete durante mi
gestión, cerraron el viernes en 31.456 millones de dólares.”
La presidenta omitió
decir que este monto corresponde a las Reservas Brutas y no a las reservas
reales disponibles, que son menos de la mitad de esa cifra porque a los 31.500
MD hay que restarle los depósitos en moneda extranjera (8.200 MD) y los
préstamos de otros bancos centrales (Banco de Francia, Banco Popular Chino y
BIS de Basilea, por 6.300 MD).
Esto es, que las
reservas líquidas disponibles – al 31.1.15 (último dato del BCRA) – son de unos
17.000 MD, la mitad de las Reservas Brutas o teóricas.
Si a este monto se le
resta además el stock de la deuda cuasi-fiscal por Lebac/Nobac – que pasa los
300.000 M$, equivalentes a 35.200 MD (títulos por los que el BCRA paga tasas de
interés del 30 % anual) - las reservas disponibles pasan directamente a tener
saldo neto negativo.
Por otra parte, el
hecho que la posición de reservas del BCRA es gravísima no necesita mayores
demostraciones: si el BCRA tuviera la cobertura real de reservas que el
gobierno dice tener no se justificarían las medidas de cepo cambiario que se
están aplicando, particularmente en materia de pago de importaciones y remisión
de utilidades al exterior; ni el hecho que la totalidad de los vencimientos en
moneda extranjera se paguen con nuevas deudas.
Para llegar a esta
última falta considerar todo el resto de los rubros de endeudamiento que no
corresponden a la Tesorería
y cuyo cuadro de situación – en lo poco que se conoce - es tanto o más grave
que el de la Nación :
a) PROVINCIAS: El stock de la deuda
consolidada de todas las jurisdicciones provinciales – incluida la CABA – era al 30.6.14 (último
dato disponible) de 182.000 M$ (equivalentes a 22.400 MD), sin contar Deuda
Flotante ni Contingente. La mitad está contraída con el Estado Central.
b) MUNICIPIOS: No hay datos oficiales ni
estimaciones acerca de la deuda de los municipios y comunas del país.
c) EMPRESAS DEL ESTADO: El gobierno
tampoco da información sobre la deuda de las Empresas del Estado aunque sus
montos son relevantes. Solamente YPF - a raíz de la compra de su mayoría
accionaria por el gobierno K – pasó a tener un altísimo endeudamiento: 9.000 MD
de Deuda Externa heredados de la administración Repsol-Esquenazi, 11.000 MD por
indemnizaciones a Repsol (6.000 de Capital y 5.000 de Intereses) y
financiamiento en curso por 37.200 MD en el quinquenio 2013-2017.
d) ORGANISMOS NACIONALES: Tampoco informa
el gobierno sobre el total acumulado de deuda de los entes públicos.
e) FONDOS FIDUCIARIOS: Igualmente no hay
datos en este rubro. Siendo así que no se tiene información sobre la Deuda Pública
Indirecta (DPI = c + d + e). Notablemente, una de las razones de la Crisis de Deuda de Grecia
fue que los gobiernos ocultaban a la oficina de estadísticas de la Unión Europea el
extraordinario aumento que iba teniendo la DPI.
f) BCRA: La Deuda cuasi-fiscal
(Lebac/Nobac) es – como hemos visto – de 304.300 M$, equivalentes a 35.200 MD
al 31.1.2015. Esta deuda no está incluida en la del Tesoro pero interactúa con
la misma porque el Banco financia con deuda la compra de divisas que le presta
al gobierno.
g) JUICIOS CONTRA EL ESTADO CON SENTENCIA
EN FIRME: No existe información oficial alguna tampoco sobre este rubro de
endeudamiento público, pese a que ya desde el año 1999 se confeccionaron los
primeros relevamientos en firme (que entonces daban un total de aproximadamente
20.000 MD).
Tampoco se toman en
cuenta como Deuda ni se tienen noticias de los AVALES Y GARANTÍAS otorgados por
el Tesoro, cuyo monto total igualmente se desconoce.
Sólo para el
corriente año, el Presupuesto autoriza al Ejecutivo a suscribir garantías de
este tipo por hasta 47.260 MD.
Todo esto hace que la
verdadera magnitud del endeudamiento consolidado del Estado Argentino
constituya un enigma: un mayúsculo interrogante debido a que el gobierno no
informar sobre la realidad de la DEUDA PÚBLICA NACIONAL.
Hasta aquí las
observaciones y comentarios personales del autor sobre las informaciones inexactas
y/o engañosas de la presidenta CFK relativas a la Deuda Pública en su
discurso ante el Congreso del 1.3.