domingo, 29 de septiembre de 2013

LEGISLADOR CORDOBÉS DENUNCIA QUE NARCOS TIENEN PROTECCIÓN POLÍTICA



Desde hace varios años García Elorrio viene denunciando que en Córdoba los narcos tienen protección política. En una entrevista concedida al diario La Voz del Interior expresó que tomó conciencia del flagelo del narcotráfico simplemente por estar en contacto con los vecinos de barrios cordobeses cuyos jóvenes están devastados por la droga. Por su gran interés, reproducimos la entrevista concedida a La Voz.

–¿Le sorprendieron las irregularidades detectadas en la Policía?
–Estos problemas los detectamos durante la crisis de 2001, cuando, como integrante de la Pastoral Social, recibimos decenas de denuncias de gente desocupada que veía y padecía el incremento del narcotráfico en sus barrios. La misma gente nos decía que el problema estaba en la policía y en la política.
–¿Y cómo lo comprobó?
–Cuando afirmé esto en un medio de comunicación, me mandó una carta documento el entonces gobernador (Juan) Schiaretti, donde me intimaba a dar nombres. Pero antes de esa carta me habló un ministro de Schiaretti y me dijo que tenía que rectificarme. Como le dije que no, me respondió: “Asumirás las consecuencias”.
–¿Ya era legislador?
–¡No! Ni siquiera hacía política. El ministro que me habló me dijo que tenía que rectificarme; que me iban a hablar de una radio para hacerlo. Así sucedió, pero yo me negué y me mandaron la carta documento.
–¿Fue un apriete?
–Totalmente: fue un apriete para que no hablara más.
–¿Quién era ese ministro?
–Massei.
–Juan Carlos Massei fue ministro de Desarrollo Social; no tenía relación con el área seguridad, con drogas. ¿Usted lo conocía?
–Sí, por mi actividad en Portal de Belén. Yo le dije a Massei que me parecía muy cruel que me obligaran a correr los riesgos de denunciar esto cuando la Policía sabía perfectamente quiénes manejaban la droga.
–¿Qué pasó después?
–Me citó una fiscal provincial, la doctora Balestrini, para que diera los nombres. Le dije que no podía darle nombres porque ella no tenía competencia en la cuestión drogas, que era sólo de jurisdicción federal. Un año después reiteré lo que había dicho y entonces me llegó la citación de una fiscalía Federal. Allí mencioné, con nombre y apellido, a la banda más grande del tráfico local.
–¿Cuál es?
–La banda de barrio Maldonado, que ahora se dividió.
–¿Esa banda tenía protección política?
–Mucha protección política.
–¿De quién?
–Se daba la casualidad –quiero pensar que era una casualidad–, que un chico de nombre Elio Juncos, fue tomado durante un allanamiento; el chico salió rápido del lugar en cuestión, y cuando la Policía lo interceptó tenía 63 mil pesos en cambio chico. Ese muchacho, al que le contaron el dinero y lo dejaron ir, era –es– hijo de la entonces subdirectora de Derechos Humanos de la Provincia, Liliana Juncos.
–¿La exlegisladora?
–Sí. A mí me preocupó mucho porque ese chico vivía con la madre, y estaba en eso.
–¿Quedó detenido?
–No. Ni siquiera se lo investigó por los 63 mil pesos.
–¿Cuándo fue eso?
–En 2008.
–¿Por eso usted dice que hay protección política?
–Yo digo que en Córdoba hay protección política para los narcos por eso, y porque a los días nos enteramos que Juncos compartía una actividad solidaria con una mujer de apellido Gramajo, una actividad financiada por el Gobierno. El hijo de esta mujer fue detenido con 17 kilos de pasta base y fue condenado. La señora Gramajo trabaja en la Legislatura.
–¿Trabaja en el bloque oficialista?
–Tengo entendido que sí. Además, cuando esta señora Juncos era funcionaria de Derechos Humanos estaba a cargo de algunos programas carcelarios, y tenía mucha injerencia sobre las cárceles.
–Pero eso no basta para probar una conexión narco.
–Si algo me faltaba para corroborarlo, me tocó defender a un chico de 14 años, acusado de haber ahorcado a una nenita, en frente de la casa de Liliana Juncos. Los padres del chico me pidieron que lo defienda y yo no sabía si era inocente o no. Pero me convencí cuando vi las cosas que hacían en la causa algunos policías de la División Homicidios. Pusieron de testigos a narcos vinculados con Juncos para demostrar que lo habían visto al chico salir del local. Cuando identificamos a un sospechoso, con un sobrenombre que prefiero mantener en reserva, le pedimos a la Policía que lo detuviera, y me trajeron a un chico con el mismo apodo, pero “trucho”, falso, para confundir la investigación. Después saltó todo cuando un narco se asustó y declaró que había varios testimonios falsos.
–¿Se esclareció el caso?
–Ese crimen no se esclarecerá hasta que no se intervenga a la Policía. En la fuerza hay un montón de gente honrada, seria, responsable, pero lo que sucede en Drogas Peligrosas también se repite en Protección de las Personas, en Homicidios.
–¿Usted sabía de Viarnes?
–Hace algunos años me llegaron mails anónimos con información sobre agentes de servicios de inteligencia del Ejército que podían estar relacionados con el monitoreo del paso de la droga grande que va a Europa. A alguien le interesaba tener “topos” en las policías provinciales para controlar el paso de la droga.
–¿Por qué pasa por aquí la droga que va hacia Europa?
–Porque la DEA tiene radarizado hasta el sur de Perú y Brasil. Más abajo, no hay controles. Santiago del Estero se ha convertido en una pista de aterrizaje. Y por aquí pasan 70 mil kilos de cocaína por año.
–¿Cómo es la ruta?
–Colombia-Santiago del Estero, vía aérea. Desde Santiago baja por las rutas 38 o 60, y en Córdoba se divide en dos: una parte va por el Pacífico y la otra por el Atlántico. Esa droga se compra en Colombia a 1.700 dólares el kilo, y se pone en un puerto español a 50 mil dólares el kilo. El traslado lo hace un grupo italiano conocido como “Ndrangheta”.
–¿Alguna autoridad política o policial cordobesa recibe dinero para permitir esto?
–Yo no lo vi, pero si pasan 70 mil kilos de cocaína por año, como dice la Embajada de Estados Unidos, alguien, en alguna dependencia estatal, lo está monitoreando.
–¿Qué dice de la investigación de Senestrari?
–Si va hasta el hueso y no se queda en las falencias de la Policía local, no descarto que encuentre probables vínculos de algunos operadores políticos provinciales y nacionales que trabajan juntos.

ArgentinosAlerta.org, 24 Septiembre, 2013