Agustín De Beitia
La Prensa, 29.04.2018
El uso interesado de la memoria histórica terminó
decidiendo quiénes eran buenos y malos.
El cineasta Andrés Paternostro pensó primero abordar
la década del 70 desde un ángulo menos transitado: la realidad de los
conscriptos de aquella época. "Me interesaba indagar por qué la
"juventud maravillosa" decidió tomarlos como blanco, si no tenían
mucho que ver con la dictadura", cuenta hoy en una entrevista con La
Prensa. En eso estaba cuando un amigo lo acercó al Centro de Estudios en
Historia, Política y Derechos Humanos de Salta, quienes buscaban un director
para un documental sobre aquellos años.
La propuesta de ese centro, creado en 2004 por un
grupo de salteños de profesiones, edades y pensamientos dispares, y que trabaja
para dar a conocer la verdad histórica, le alumbró otro camino: reflejar cómo
se están vulnerando los derechos humanos de los condenados por hechos de
entonces, muchos de ellas de avanzada edad, y sobre todo ilegalmente. En plena
época kirchnerista, con la cuestión de los derechos humanos al tope de la
agenda, a Paternostro le cautivó la idea. "Enseguida me puse a investigar
y armar el guión", comenta.
El resultado es un documental titulado Será venganza!!!,
que se presentará en la Feria del Libro el próximo jueves, a las 20.30, en la
sala Jorge Luis Borges, y al que este diario tuvo acceso por adelantado.
- La estructura del guión está muy bien pensada. ¿Cómo
lo planeó?
- Había pensado otro nombre para el documental. Iba a
ser Memoria, verdad, injusticia. Por eso lo estructuré en tres capítulos. El
primero recuerda el surgimiento de las guerrillas en la Argentina y lo que pasó
después del 76, para romper esa idea que tienen sobre todo los más jóvenes de que
esto empezó con la dictadura. El segundo capítulo, "verdad", está
dedicado a recordar cómo Néstor Kirchner, para legitimar su poder, se llevó
puesta a la Justicia, y con ello se armaron todos los juicios a las Fuerzas
Armadas, se reabrieron juicios, se volvió a juzgar a personas que ya habían
sido declaradas inocentes... Y el último, "injusticia", está dedicado
a las historias de los familiares que vivieron todo ese proceso. El título,
después, fue otro.
- ¿Busca entonces dirigirse al público joven y a quienes
no están tan embebidos del tema?_
- Claro. Durante mucho tiempo escuchamos eso que se
llamó "el relato". Hay mucha gente, en particular los jóvenes, que se
quedaron con una parte de la historia. Me pareció oportuno plantear que aquello
que nos dijeron no fue tan así, sin exculpar a nadie.
- Esos tres capítulos van desmontando el relato...
- Esa es la idea.
RECORTES
- El uso interesado de la memoria histórica terminó
decidiendo quiénes eran buenos y malos. En el documental, el doctor Guillermo Fanego
recuerda cómo Alfonsín exceptuó de todo proceso a peronistas y ministros
radicales del gobierno militar, y cómo su ministro del Interior, Antonio
Trócoli, prometió un "Nunca más" sobre la guerrilla que finalmente
nunca se hizo. Esto es muy revelador sobre cómo se fue recortando la realidad.
- Lo que ocurre es que una vez recuperada la
democracia, todos los partidos políticos buscaron volver a tener protagonismo,
olvidándose de lo que había pasado en los siete años previos. Como si ellos no
hubiesen tenido nada que ver. Como si hubiera sido la obra de unos locos que
salieron a matar gente. Hubiera sido necesario reflexionar sobre lo que nos
pasó, sobre por qué llegamos a tener ese grado de violencia, a esa dictadura
que fue una cosa tremenda para el país, como también había sido tremenda la
violencia anterior.
- Esa restricción de culpables terminó garantizando la
impunidad de los guerrilleros. Y no sólo la impunidad sino que, como muestra el
documental, con el tiempo se llegó a una mayor osadía: a la reivindicación.
- Es tremendo. En el documental, al final hay un acto
que tuvo lugar el año pasado, donde se reivindica en la Plaza de Mayo a las
organizaciones guerrilleras. Parece que no aprendimos nada en estos años.
- En cambio, hay personas que merecen otra suerte. El
ex juez de la Corte Suprema Adolfo Vázquez, el consitucionalista Gregorio
Badeni y otros repasan ante las cámaras todas las reformas legales y jurídicas
que se hicieron para garantizar sus condenas._
- Para mí, lo increíble es que todo esto no se hizo
para legitimar el poco poder que tenía Néstor Kirchner cuando asume en el 2003.
Sino que además se transformó en un gran negocio. No sólo por las
indemnizaciones que se pagaron a las víctimas, algo que ahora sale a la luz
porque empiezan a aparecer los desaparecidos. Sino porque hay un gran negocio
en la Justicia. Porque no se unifican las causas y hay personas que son
juzgadas una y otra vez. Y todo eso es dinero. El doctor Vázquez cuenta cómo lo
apretaron a él y cuántos jueces tuvieron que renunciar o fueron extorsionados.
Ya el hecho de que haya gente inocente que sufre es muy grave. Pero más grave
aún es que, como país, nos estamos suicidando. Porque no hay garantías. Se
puede crear una ley, hacerla retroactiva, poner jueces amigos...
- Hay un caso conmovedor, el de la familia del coronel
Delmé, que alega que ni siquiera estaba en el país cuando ocurrieron los hechos
que se le imputan. No le permitieron presentar documentos para corroborarlo,
como su pasaporte, y lo condenaron igual. Su familia habla de juicios
estalinistas. Y eso es lo que parece...
- Fijate que durante mucho tiempo escuchamos la frase
"Juicio y castigo". Habrás visto la gorra con esa frase. Lo lógico,
en realidad, sería abrir un juicio para ver si corresponde el castigo. Acá no
hay distinción entre inocentes y culpables. Hay una frase pronunciada por
Cabandié durante una entrevista, que incluí en el documental, que dice algo así
como: "Para nosotros, vengarnos es ser felices". Una vez que alguien
cae en el circuito de los juicios es muy difícil que salga. Yo, a medida que
iba haciendo entrevistas, llegué a pensar: Me estoy metiendo en algo que es
siniestro.
INTOCABLES
- Muchos consideran que los detenidos son culpables,
sin distinción, y otros prefieren no hablar, no meterse. Y en el camino ya
murieron más de 400 en prisión. ¿Su situación no le importa a nadie?
- Parece que es mejor dejar todo así hasta que se
mueran todos. Yo no defiendo a los que cometieron atrocidades. Defiendo que
haya juicios justos.
- El documental tiene un contenido histórico pero
también tiene una faceta actual, que es la alteración que se hizo de las leyes
y la justicia con fines ideológicos. Cambios en la Corte, limpieza de jueces,
fiscales y defensores oficiales, cambios en la Constitución, leyes
retroactivas... La lista es enorme. Todos asistimos a esas reformas pero verlas
todas juntas impacta. Lo que han logrado los organismos de derechos humanos es
alucinante._
- Ganaron la guerra cultural, en la que vienen
trabajando desde 1978 o 1979. Han hecho un trabajo extraordinario. Yo trato de
no hablar de estos temas entre amigos porque la gente no sabe lo que pasó o
confunde.
- Es el triunfo del relato.
- Sí. Todos nos llenamos la boca con los derechos
humanos. A mí me hubiera gustado que los organismos de derechos humanos se
hubiese preocupado por la situación de estas personas. Sería la prueba de que
su preocupación es legítima. Pero está tan claro que no se van a ocupar...