Clarin.com, 03/06/15
La Asignación Universal por Hijo (AUH) hace un año que
está congelada en $ 644 por cada chico. Este es un beneficio que cobran los
padres de 3,6 millones de chicos en todo el país.
Por el decreto 779/2014, el 26 de mayo de 2014 se fijó
ese valor a partir de junio del año pasado y, a pesar de la inflación, hasta ahora
el Gobierno no anunció su ajuste. Algo parecido pasa con las Asignaciones
Familiares, que cobran los padres de los trabajadores formales por unos 5
millones de chicos, según los niveles de ingresos.
En este caso el beneficio es decreciente ($ 644, $ 432,
$ 260 y $ 132) según los rangos salariales y lo perciben si el matrimonio cobra
menos de $ 30.000 y ninguno de los cónyuges gana más de $ 15.000. Por eso, al
no actualizarse los rangos salariales, muchos trabajadores pierden el beneficio
o pasan a cobrar menos.
Las asignaciones se financian con contribuciones de
las empresas sobre la masa salarial y con los intereses del Fondo de Garantía
de la ANSeS.
Así con las subas salariales, crece la recaudación,
aunque los valores de las Asignaciones no aumentan al mismo ritmo.
En general las asignaciones se fueron ajustando una
vez por año perdiendo así la carrera con la inflación, que sube día a día,
semana a semana. Así, durante todo el período anterior a cada aumento, las
asignaciones soportan una brusca caída del poder adquisitivo que en ningún
momento es compensada y tampoco se recupera lo perdido durante los 12 meses que
median entre uno y otro aumento.
Esta vez se cumplieron 12 meses, sin ningún ajuste. El
último sucedió en mayo de 2014.
De los números elaborados por la experta Graciela
Bevacqua -la directora del INDEC que fue desplazada de su cargo en enero de
2007 por negarse a manipular las cifras de inflación- surge que por la
inflación, sobre todo en alimentos, la AUH perdió un poco más de la cuarta parte
del poder de compra que tenía cuando fue lanzado, en octubre de 2009.
El deterioro se produjo porque la AUH no tiene
movilidad automática y tanto la oportunidad como el porcentaje de aumento
dependen de la decisión presidencial.
En una alta proporción la AUH permite que muchas
familias dejen de ser indigentes, pero no salen de la pobreza.
Sin embargo, no hay cifras oficiales sobre indigencia
y pobreza. El 23 de abril de 2014 por decisión de Axel Kicillof el INDEC no
difundió las cifras de indigencia y pobreza del segundo semestre de 2013 y
decidió de dejar de medir ambos indicadores claves.
La AUH fue creada por medio del decreto 1602/09, del
Poder Ejecutivo Nacional, y comenzó a regir a partir del primer día de
noviembre de 2009. Los beneficiarios cobran mes a mes el 80% del beneficio y el
resto se percibe contra la presentación de los certificados de asistencia
escolar y de salud.